La fiesta en honor al contrato que acababan de firmar Pete y Dayli era en casa de la antes mencionada. Ae se había encargado de invitar a todos enviando un mensaje. Pero los enamorados habían llegado tarde luego de su encuentro en el living.
Las cosas se pusieron incómodas luego de que en la puerta apareciera el señor Non Jutamat con una botella de vino en las manos y unas flores.
-Me tomé el atrevimiento de traer esto - dejo las flores en las manos de Pete, quien solo miraba la expresión molesta de su novio - Espero no te moleste.
-Esta bien - asintió - Gracias - se hizo a un lado dejando que Non entrará en la casa.
La vista de Ae no se despegaba del hombre que dejó las flores en las manos del chico de piel blanca. Pete había visto muchas veces esa mirada, y era cierto que podías sentir como esta te atravesaba.
-¿Me puedes acompañar a llevar esto a la cocina? - pidió al hombre bronceado que lo siguió desde atrás.
En la cocina dejó el vino con las demás bebidas con alto contenido de alcohol y tomó una jarra con agua para dejar las flores.
-¿Ese hombre es tu jefe? - preguntó cómo si le restará importancia.
-Es un socio de la empresa - se recargo de espalda en la barra.
Ae apretó los labios asintiendo.
-¿Que? - las expresiones de su novio le hicieron reír.
-Ven - extendió sus manos para que el castaño las tomará - Ese hombre tienen otras intenciones contigo. Por algo te trajo flores.
-No pasará nada, no están permitidas las relaciones amorosas dentro de la oficina - dejó que el hombre bronceado rodear su cintura con sus brazos - Además, no estoy interesado en nadie que no seas tu - golpeó la nariz de su novio - Tus celos son innecesarios.
-Lo siento - dijo en voz baja con algo de vergüenza.
El silencio se apoderó de ellos durante unos segundos, en los cuales se miraban a los ojos.
-Ya no eres un niño - había un matiz de nostalgia en sus palabras.
Pete negó con la cabeza llevando la yema de sus dedos a las mejillas del moreno, acariciando lentamente cada centímetro de estas.
-Seguiras siendo mi niño durante mucho tiempo más - coló los dedos de sus manos por debajo de la camiseta de su chico para poder acariciar su piel desnuda - No importa la edad que tengas.
Los ojos del chico de piel porcelana se llenaron de ternura y solo pudo asentir con una pequeña risa.
-Todos los echan de menos afuera - entró Dayli siendo tomada de la mano por Bow.
La pareja de chicos frunció el ceño ladeando la cabeza.
-¿Ustedes...? - hablaron los dos al mismo tiempo.
-Nos conocimos en el antro - habló Dayli con las mejillas rosadas - Y tu hermana se fue con... - miró a la chica a su lado.
-Chompoo - mencionó - Solo se quedaron unos minutos y después se fueron de la nada.
Los dos chicos se miraron con sorpresa para después soltar una risa. Después de charlar unos minutos con Bow y Dayli se decidieron por salir a la celebración.
[°°°]
Cuando la fiesta terminó todos comenzaron a marcharse. Algunos estaban bastante ebrios sin poder mantenerse en pie, y los demás...al menos recordaban su nombre.
Habían decidido quedarse en casa de Dayli debido a la hora en la que la fiesta había terminado. Ninguno de los dos estaba en condiciones de conducir el coche. Pete y Ae se quedarian en la habitación de abajo, mientras Dayli dormía con Bow en su habitación.
-Bebiste demasiado - regañó Pete mientras ayudaba al hombre bronceado a quitarse los pantalones.
-Eso no fue nada - una risa se le escapó de los labios - Sigo consiente, y eso quiere decir que no bebí mucho.
-Mañana tendrás una resaca horrible - se burló - Eso te enseñará.
Terminó de desabrochar los botones de la camisa del hombre de piel canela y acarició su pecho con la intención de ir más abajo.
Una llamada le impidió seguir con su cometido. Camino hasta la mesita de noche para atender la llamada.
-¿Non? - contestó encontrándose confundido ante la repentina llamada del hombre.
-No se muy bien lo que estoy haciendo, pero creo que el alcohol me da un poco más de valor - hubo un corto silencio - Quería invitarte a salir...solo...nosotros. Que sea algo fuera de lo laboral.
-De una u otra forma no se podría - empezó el chico - Primero; en la oficina las relaciones entre socios no están permitidas. Segundo; ahora mismo estoy saliendo con alguien, de hecho lo conoció durante la fiesta, pero no creo que lo recuerde sabiendo como se fue de aquí - terminó sintiendo las manos de Ae rodear su cintura mientras recargaba el mentón en su hombro - Si no le molesta es tarde.
El silencio incomodo le hizo a Pete terminar por colgar la llamada. Reviso los mensajes que tenía en el buzón. La mayoría de los mensajes eran de Nic pidiéndole disculpas, y por la manera en la que estaban escritos deducia que se encontraba ebrio.
-Nic quiere que nos veamos mañana para arreglar las cosas - comentó al hombre que lo rodeaba con sus brazos.
-No creo que debas ir, puede ser algo malo - le hizo saber su preocupación sin ocultar que esa idea no le agradaba.
-Esta arrepentido...no quiere perder nuestra amistad - murmuró girandose.
-Pete, lo digo en serio...
-Es mi amigo, nos conocemos desde hace mucho tiempo.
-¿Sabes como me sentiría si algo te pasa? - se paso el cabello hacia atrás con las manos - Te golpeó una vez, si lo hace de nuevo...esta bien es tu decisión de todas formas - soltó un suspiro sentándose en la cama para vestirse.
-¿A dónde vas? - cuestionó sentándose a su lado.
-Necesito algo de aire - se levantó y antes de salir de la habitación dejo un beso en la frente del castaño - Deberías meterte en la cama a descansar.
-Ae... - tiró de su camisa.
-Tengo un fuerte dolor de cabeza y estoy algo molesto...no me gustaría pelear contigo por algo así - acarició su cabellera castaña - Te amo bonito - se inclinó pegando sus labios a los de su novio.
-Te amo - respondió con las mejillas calientes por cómo le había llamado.
-Te traeré algún snack por si sigues despierto cuando vuelva - guiño un ojo sonriendole.
El cosquilleo en su estómago le provoco una sonrisa boba.
~Sun&Moon🍂🥀
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[Captive By Love] ➳ AePete © ✔
Fanfiction"Al amor y a ti los conocí el mismo día" En la guerra y en el amor todo se vale, y las cosas no siempre son como uno quiere. Sin ser conscientes de tener algo en común y de que la vida puede cambiar de un momento a otro. Que el destino es la fuerza...