Tin aparco delante de la puerta del hospital, y de inmediato Can bajo en busca de una camilla. Subieron a Ae para llevarlo dentro del hospital mientras gritaban por ayuda. El hombre de piel bronceada parecía estar alucinando y ya no reacciónaba a lo que le decían.
Pete estaba preocupado por la salud de su novio. No pasó mucho cuando un grupo de enfermeros tomó la camilla en la que iba el hombre de piel canela, llevándoselo por el pasillo lejos de la vista de sus amigos y novio.
En ese momento llamaron a todos los familiares para hacerles saber del incidente.
-Deberías ir a casa - las manos de Can le acariciaron la espalda - Tienes que comer algo y darte una ducha.
-Quiero quedarme aquí hasta saber cómo está - murmuró con un nudo en la garganta - No quiero dejarlo.
-Nosotros nos quedaremos aquí - le aseguró con una media sonrisa - Por favor. Estoy seguro que si Ae despierta no le gustara verte así.
-Si despierta cuando yo no esté aquí, me llamaran, ¿verdad? - miró a las personas que lo acompañaban.
-Ten por seguro que lo haremos - palmeo su pierna - Bow y Dayli te llevarán a casa, yo me quedate aquí con Tin para esperar noticias. ¿Bien?
Con una débil sonrisa el chico de cabello castaño terminó asintiendo. Dejó que la pareja de chicas lo llevarán a su departamento para comer algo y tomar una ducha, realmente lo necesitaba.
Durante parte del trayecto no pudo evitar que muchas lágrimas abandonaran sus ojos. Mientras el tomaba una ducha, su amiga y su cuñada se ofrecieron para prepararle algo de comer.
Al salir de la ducha tenía que cambiarse de ropa, encontrándose con una camiseta de su novio mientras buscaba en el armario. La tomó entre sus manos llevandola a su nariz para poder inhalar el perfume que tenía impregnado. Sus ojos se volvieron a llenar de lágrimas cuando decidió que usaría esa prenda.
-Hemos preparado una pasta y algo dulce para que sonrías un poco - Bow le dejo los platos delante cuando se sentó en la barra - ¿Es de Ae? - preguntó al ver la camiseta que usaba el chico de piel porcelana.
-Si - una vez más disfruto del aroma que desprendía.
-Te ves muy lindo en ella - el. cumplido de su amiga le hizo sonreír.
Sin mucha prisa degusto lo que la pareja de chicas había preparado para el. Quería estar presente en el hospital para recibir noticias de su novio. Pero tenía que asegurarse de cuidar de él mismo primero, así podría ayudar a su chico cuando tenga que recuperarse.
Una hora más tarde cuando ya estaba por subir a la camioneta con las chicas, recibió una llamada de Tin.
-Pete, ¿ya vienes? - el ruido de fondo apenas le dejaba escucharlo.
-En un momento - respondió entrando a la camioneta - ¿Ya recibieron noticias?
-El médico que está atendiendo a Ae esta delante de nosotros ahora mismo, pero le pedimos que esperará para que estuvieras presenge - explicó - Le dijimos que eres su novio, así que acepto esperar.
-Ya estoy en camino, gracias - colgó la llamada.
Sus manos comenzaron a temblar y movía sus pies con inquietud. El tráfico en la calle no ayudaba mucho en ese momento.
-¿Podemos ir más rápido?
-Eso intento, pero no puedo saltarme los semáforos en rojo - dijo la chica de cabello castaño - No quiero provocar un accidente.
El chico de piel blanca dejó escapar un suspiro de frustración.
Pero una vez las calles se despejaron Bow pudo pisar el acelerador sin ninguna preocupación. Entraron de inmediato al hospital llegando al lado de Tin y Can quienes eran acompañados por el médico.
-¿Es usted la pareja de Ae Intouch? - miró las hojas en sus manos para confirmar el nombre.
-Si, soy yo - se apresuró a responder - ¿Como esta el?
-Llegaron con el tiempo suficiente para detener la hemorragia, aún así perdió mucha sangre. Su salud es buena, y tiene un cuerpo en forma que le impidió que todo pasara a mayores. Por el momento necesitamos ver como reacciona a los medicamentos y si eso sale bien despertará, pero...
Desde que el médico había empezado a hablar el corazón de Pete se había tranquilizado sabiendo que estaria bien.
Su corazón regresaría a latir con violencia al escuchar esa palabra que ahora odia más que nada. La sonrisa aliviada ahora era una mueca que aguantaba las lágrimas.
-¿Pero...? - buscó que el médico continuara, este parecía no saber como hacerlo. Su ansiedad estaba creciendo y su cuerpo se estaba debilitando.
-Si las cosas no salen como esperamos tendriamos dos opciones, y ustedes tendrán la libertad de escoger cualquiera de las dos. La primera es que podemos inducirlo al coma para tener más tiempo de ayudarlo y hacer todo lo que esté en nuestras manos para que se recupere - se quedó en silencio unos segundos antes de atreverse a continuar - Lo segundo sería no retrasar su muerte y desconectarlo.
Pete juraría que estaba a punto de caer al suelo si no hubiera sido por las manos de Bow que lo sostuvieron para abrazarlo.
-Aún está a tiempo de recuperarse, pero es necesario que estén al tanto de esto. Puede haber miles de posibilidades - se apresuró a decir al ver el impacto que tuvieron sus palabras en el novio del hombre bronceado - Tienen tiempo suficiente para digerir las cosas.
[°°°]
-¿Ya estas mejor? - Dayli se puso delante tomando sus manos.
-No - sintió que pronto volvería a llorar - Es mi culpa que Ae este así.
-No, no es...
-Después de todo el daño que me hizo Nic aun así confíe en el, pensé que realmente quería recuperar mi amistad - sacudió la cabeza - Ae me lo advirtió muchas veces, me dijo que estaba obsesionado conmigo, pero soy tan idiota que no lo quise ver. El no habría tenido la necesidad de irme a buscar a esa bodega si tan solo yo no fuera tan terco.
-No tienes que pensar en eso - limpió las lágrimas de su amigo - Ahora tienes que ser fuerte por el y por ti.
Pete asintió dispuesto a ser fuerte por ambos.
Y aunque la última estrella del cielo desaparezca, siempre estare a tu lado para iluminar ese cielo oscuro.
~Sun&Moon🍂🥀
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[Captive By Love] ➳ AePete © ✔
Fanfiction"Al amor y a ti los conocí el mismo día" En la guerra y en el amor todo se vale, y las cosas no siempre son como uno quiere. Sin ser conscientes de tener algo en común y de que la vida puede cambiar de un momento a otro. Que el destino es la fuerza...