002. 𝗍𝗁𝖾 𝗁𝗎𝗇𝗍𝖾𝗋𝗌.

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002

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002. las cazadoras.

SOLTÓ UN QUEJIDO DE DOLOR, cuando Annabeth y su gorra invisible embistió contra ellos, derribandolos

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SOLTÓ UN QUEJIDO DE DOLOR, cuando Annabeth y su gorra invisible embistió contra ellos, derribandolos.

La primera tanda de proyectiles pasó por sus cabezas. Thalia y Grover avanzaron entonces desde atrás: Thalia empuñaba a Égida, su escudo mágico.

Si nunca has visto a Thalia entrando en combate, no sabes lo que es pasar miedo en serio. Para empezar, tiene una lanza enorme que se expande a partir de ese pulverizador de defensa personal que lleva siempre en el bolsillo. Pero lo que intimida de verdad es su escudo: un escudo trabajado como el que usa su padre Zeus (también llamado Égida), obsequio de Atenea. En su superficie de bronce aparece en relieve la cabeza de Medusa, la Gorgona, y aunque no llegue a petrificarte como la auténtica, resulta tan espantosa que la mayoría se deja ganar por el pánico y echa a correr nada más verla.

Hasta el doctor Espino hizo una mueca y se puso a gruñir cuando la tuvo delante.

Thalia atacó con su lanza en ristre.
—¡Por Zeus!

Thalia le había clavado la lanza en la cabeza. Pero él soltó un rugido y la apartó de un golpe. Su mano se convirtió en una garra naranja con unas uñas enormes que soltaban chispas a cada arañazo que le daba al escudo de Thalia. De no ser por la Égida, ella habría acabado cortada en rodajitas. Gracias a su protección, consiguió rodar hacia atrás y caer de pie.

El estrépito del helicóptero se hacia cada vez más fuerte a sus espaldas, pero no se atrevían a volverse ni un segundo.

El doctor le lanzó otra descarga de proyectiles a Thalia. Su cola era curtida como la de un escorpión, con una punta erizada de pinchos. La Égida desvió la andanada, pero la fuerza del impacto derribó a Thalia.

Grover se adelantó de un salto. Con sus flautas de junco en los labios, se puso a tocar una tonada frenética que un pirata habría bailado con gusto. Ante la sorpresa general, empezó a surgir hierba entre la nieve y, en unos segundos, las piernas del doctor quedaron enredadas en una maraña de hierbajos gruesos como una soga.

 𝐈𝐂𝐄: Percy Jackson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora