XXIV

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Osman

Sostengo a Sanem fuertemente en mis brazos tratando de darle calor y confort como se merece la maravillosa criatura que siempre ha sido. Entiendo que ahora mismo no puede pensar con claridad, espero que con el tiempo entienda qué es lo correcto y no puede ser negarle un hijo a un padre.

La tengo cerca de mi corazón que siempre la ha querido con un inmenso amor fraternal, me gustaría hacer algo por ella, me gustaría aliviar su dolor, me gustaría tener la solución al alcance de la mano, me gustaría no tener que irme y poder quedarme a su lado.

Permanecemos abrazados durante un tiempo indefinido hasta que una notificación en su teléfono móvil la obliga a separarse para leer el mensaje que ha recibido.

- Es Andrea, el propietario del apartamento en el que me hospedo, que me avisa de que me está esperando delante de la taquilla para llevarme de vuelta. Aquí, este es mi nuevo número con un usuario italiano, sólo uso el otro para enviar algunos mensajes a Layla de vez en cuando. No me apetece hablar con nadie, además he encontrado varias notificaciones que indican que Can me ha estado buscando, no entiendo por qué ha hecho eso.
De todos modos, ¿cuándo terminas de trabajar mañana? ¿Te volveré a ver? -

Me desconcierta escuchar que Can la ha estado buscando, ¿por qué lo haría si ha terminado con ella y está con otra?

La acompaño hasta el lugar donde tiene que reunirse con el tipo que tiene que llevarla de vuelta, nos miramos un momento tomando las medidas del otro, luego veo con qué consideración ayuda a Sanem a subir al jeep y la sonrisa amable que le dirige y me relajo. Me parece que está en buenas manos, le doy cita al día siguiente de nuevo en el puerto para las 19.00.
Los días siguientes pasamos juntos todo el tiempo libre que tengo del trabajo, Sanem también viene a visitarme al plató en una playa al otro lado de la isla y conseguimos comer juntos, la veo más relajada y feliz de pasar tiempo conmigo.

Ya estoy preocupado al pensar que en dos días mi trabajo en la isla terminará y tendré que dejarla, no me siento nada cómodo con la idea de dejarla sola allí aunque tuve la oportunidad de conocer a Elisa una noche cuando Sanem me invitó a una cena en el patio de su casa, y junto con su hermano me causaron muy buena impresión.

Siento que le han tomado mucho cariño a mi Sanem y la tratan con mucha consideración.
Así es ella, siempre ha sido capaz de hacer que todo el mundo la quiera instintivamente.

Hoy es mi último día de estancia en Ischia, salgo del hotel a primera hora de la mañana para llegar al puerto donde nos espera un barco para transportarnos a una playa donde se instalará el último conjunto de la isla.

Mientras llego al lugar de la cita miro a mi alrededor admirando los numerosos veleros amarrados en el muelle cercano, algunos son realmente hermosos y majestuosos. De repente me encuentro con unos ojos que me resultan demasiado familiares, ambos nos sorprendemos de encontrar al otro aquí, le veo bajar apresuradamente la escalera y casi correr a lo largo del muelle, como si temiera que yo pudiera desaparecer en el aire.

- Merhaba Can-

-Merhaba Osman-

Ambos nos observamos con recelo, estudiándonos atentamente como dos contendientes en un ring.
Él habla primero.

- Sabes dónde está Sanem, ¿verdad? Por favor, dígame dónde puedo encontrarla, necesito hablar con ella, necesito explicarle...

- Sabes lo mucho que quiero a Sanem, ¿por qué iba a dar con el paradero de un hombre que la ha maltratado física y moralmente, que le ha dicho que no es nada para él y que luego la ha dejado vagando sola por la noche en caminos de montaña? Dime, ¿por qué?

Baja la mirada, justamente avergonzado por la veracidad de las acusaciones que le he lanzado.

- Porque soy un hombre miserable sin ella, porque necesito hablar con ella, necesito decirle que la quiero más que a nada -

Me quedo boquiabierto ante la sinceridad de la voz del hombre que tengo delante, parece sinceramente arrepentido de lo que ha hecho.

Me llaman desde el barco para invitarme a subir a bordo, el equipo tiene que desplazarse hacia el plató, no puedo quedarme más tiempo. Lanzo una mirada seria hacia Can, tengo que pensar rápido y ahora mismo siento que tengo que escuchar lo que tiene que decir antes de decidir si le permito unirse a Sanem. Si ha llegado hasta aquí, sin duda está impulsado por una fuerte motivación.

- Tamam, nos vemos aquí a las 16:30 cuando regrese de la sesión de fotos y tendremos una buena charla hombre, no creas que puedes salirte con la tuya con tan poco después de todo lo que pasó, necesito resolver las cosas -

Asiente con decisión, le doy una última mirada y me muevo para llegar al barco y a la tripulación.

Tengo que entender lo que está pasando, este hombre ha venido en barco desde Turquía buscando a Sanem, no parece el comportamiento de alguien que piensa que lo suyo ha terminado.
Sus sentidas palabras me golpearon, ¿es posible que Sanem esté completamente fuera de la realidad?

Una oportunidad para volver a amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora