Sanem
Estar en sus brazos, apoyado en su pecho con el latido de su corazón como contrapeso a esa hermosa música, cuyas palabras hacen que mi corazón lata más rápido, parece un sueño.
En estos meses he temido a menudo que ya no hubiera esperanza, que a estas alturas nuestros caminos estuvieran irremediablemente separados, todo parece tan irreal y maravilloso.
Cuando termina nuestro baile, me coge la mano y la besa, mirándome intensamente a los ojos.
-Dulce noche Sanem, espero soñar contigo en el más bello de los sueños mi amor-.
Se aleja caminando hacia atrás durante un rato como si no pudiera quitarme los ojos de encima, yo me quedo quieta viéndole volver a su barco mientras de vez en cuando se gira para comprobar si sigo allí, nos reímos como dos adolescentes enamorados.
Entro por la puerta con una sensación de alegría que creo que nunca había sentido en nuestra relación, por fin siento que es capaz de anteponer mis necesidades a todo, incluso a sus propios deseos, la delicadeza de no presionarme para que me quede conmigo demuestra su consideración por mí y mis sentimientos.
Subo las escaleras y lo primero que hago es asomarme a la pequeña terraza para mirar hacia su barco, allí está sentado en la cubierta mirando hacia mis ventanas, levantando inmediatamente la mano para saludarme. Mi corazón estalla de alegría ante la idea de que pueda amarme como yo lo amo.
Ambos nos quedamos quietos y nos miramos de lejos, reflexionando sobre el milagro que estamos viviendo y la intensidad de nuestros sentimientos, aún más profundos después de una separación tan dolorosa.
Tras la enésima despedida vuelvo a prepararme para la noche, una noche que sólo puede estar llena de ensoñaciones sobre él, sobre nosotros y sobre nosotros y nuestro bebé.
A la mañana siguiente el primer pensamiento, incluso antes de abrir los ojos, es para él. Saber que está tan cerca me da una loca explosión de energía, tiro las sábanas y me pongo la bata para salir corriendo a la terraza a mirar en dirección a su barco. Lo encuentro en el mismo lugar donde lo dejé la noche anterior mirando mis ventanas porque levanta una mano para saludarme en cuanto me ve, señala un sobre, a él y a mí. Asiento alegremente y le hago un gesto con la mano para indicarle que puede venir, veo que se levanta de un salto y en un instante ya está en el muelle viniendo hacia mí, vuelvo a entrar tan emocionada como una niña pequeña para ir a ordenar antes de que llegue.
Hoy es el primer día de nuestro nuevo comienzo, de nuestra nueva vida juntos.
Oigo sonar el timbre de la puerta mientras me recojo el pelo en una cola, voy a abrir la puerta atando mi bata sobre mi prominente abdomen. Abro la puerta sonriendo esperando ver su rostro frente a mí y en su lugar me encuentro con el más romántico ramo de flores con gerberas, tulipanes y girasoles de delicados colores. Me quedo sin aliento por la sorpresa y la emoción de tan dulce y delicado pensamiento, veo su rostro sonriente saliendo de detrás de las flores y no puedo evitar echarle los brazos encima -Caann-.
Me abraza y me besa tan feliz como yo, estoy seguro.
-Pasa. Qué maravilla, teşekkürler, gracias -
Entra trayendo consigo un delicioso perfume que, una vez más, hace que mi estómago gruña, Can pone su mano en mi abdomen y baja diciendo - Buenos días bebé, no te preocupes papi trajo lo necesario para alimentar a tu mami - Me emociona escucharlo hablar así, oírlo llamarse a sí mismo papi y llamarme a mí mami me parece extraño y maravillosamente irreal.
Ponemos la mesa en la pequeña terraza y desayunamos charlando, le digo que hoy le llevaré a ver todos mis lugares favoritos y mete la mano en la mochila que ha traído para sacar la cámara.
- Genial, estoy dispuesta a empezar a capturar cada día para fijar los cambios que se producirán en el té hasta la llegada del bebé, todo tiene que quedar documentado desde ahora y luego los primeros años del pequeño, no hay que perder ningún detalle -
Le miro encantada por la delicadeza de ese pensamiento, parece que se ha hecho enseguida a la idea de ser padre y además se muestra muy entusiasmado con ello, no puedo estar más que contenta.
- Vamos, prepárate, voy a arreglar esto, llévame de paseo -
Pasamos un día inolvidable, despreocupados como nunca habíamos vivido juntos, almorzamos en un pequeño restaurante entre las callejuelas de Camogli y luego nos vamos a relajar en MI banco, a la sombra de un arce secular con vistas al mar. Se sienta y me invita a tumbarme apoyando mi cabeza en sus piernas, yo obedezco sonriendo ante sus atenciones.
- Háblame del embarazo, de cuándo te enteraste, de cómo fueron estos primeros meses, de cómo te sentiste, de las dolencias que tuviste...
Cuando le cuento que me enteré en el hospital tras despertarme de la operación y la decisión de irme antes de que mi madre pudiera sospechar algo, me acaricia la mejilla y me interrumpe.
- Perdóname otra vez Sanem, cuando pienso en todo lo que has pasado por mi culpa, primero el accidente y luego tener que lidiar con una situación así sola, realmente no sé cómo compensarte por todo esto...
Esta vez puse mi mano en su mejilla - Can, se acabó, fue duro pero se acabó. Avancemos juntos, a partir de hoy tenemos nuestro nuevo comienzo, eso es lo único que importa -
Entonces le hablo de las terribles náuseas de los primeros meses, él sonríe y asiente - Eso es lo que pasó durante nuestro picnic, por lo que te apartaste tratando de respirar profundamente, y pensé que estabas sufriendo ataques de pánico postraumáticos. Ahora también entiendo el sentido de todos esos suplementos en el baño - Sacude la cabeza - Qué tonto fui al no entender nada -
- Can, no podías haberlo adivinado, te dije que no había consecuencias de que estuviéramos juntos no podías pensar otra cosa -
Suspira - Sólo sé que lamento enormemente no haber estado a tu lado estos meses, no haber podido apoyarte cuando estabas enferma, affet beni aşkım, perdóname mi amor -.
Me levanto sentada y me acerco a él, cojo su mano y la llevo a mi abdomen - Can, lo más importante es que estés ahí ahora tamam, ¿vale? ¡A partir de ahora no perderás nada tranquilo! -
Justo entonces, como si hubiera percibido la solemnidad de ese instante entre nosotros, el bebé se mueve vigorosamente apretando su mano. Ambos nos miramos asombrados, hasta ahora sólo había escuchado el aleteo de una mariposa, pero nunca había percibido un movimiento tan decisivo. Los dos nos reímos con lágrimas en los ojos, incrédulos por la sensación indescriptible que sentimos en este momento.
- Es increíble Sanem, es maravilloso e increíble pensar que tú y yo juntos hemos creado un pequeño ser humano que pronto abrirá sus ojos a este mundo, hace sólo dos días no podía ni remotamente imaginarme estar hoy aquí contigo con el corazón revuelto por haber sentido a nuestro hijo moverse por primera vez. Teşekkürler canım, gracias mi amor, gracias por ser una mujer valiente y decidir seguir adelante con un embarazo, aunque sea sola, en lugar de tomar una decisión que podría haber solucionado todos los problemas que tenías pero que no habría traído a nuestro hijo al mundo. Seni çok seviyorum, te quiero mucho Sanem -
-Ben de seni çok seviyorum , yo también te quiero tanto Can y nunca podría haber matado una parte de ti, al contrario era mi consuelo pensar que aunque ahora te hubiera perdido irremediablemente podría haber amado una parte de ti para siempre -.
Me sostiene en un abrazo que dice tanto sobre su amor, sobre su deseo de mantenernos a los dos cerca para no soltarnos nunca más.
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Una oportunidad para volver a amar
Fiksi PenggemarCan está realmente delicado y arraigado al ver que Sanem ha vendido su perfume a Fabbri, está convencido de que su relación sigue siendo definitiva. Polen busca de todas las maneras posibles adaptarse a la situación para fraguar entre los dos y rec...