Una oportunidad para volver a amar

XI

Sanem

Las heridas de las manos y la cara ya están curadas, la semana que viene me quitaré el vendaje del pecho y dentro de dos semanas la escayola de la muñeca.
Las heridas de mi cuerpo se están curando, las de mi alma siguen sangrando, pero no es el momento de compadecerme, tengo que actuar y actuar rápido.

Intento descansar todo lo posible y comer sano, tal y como me ha aconsejado el médico del hospital, para que no le pase nada malo a ese pequeño ser que empiezo a aceptar como parte de mí, debo hacer todo lo posible para no dañarlo.

Renuncié a la agencia nada más llegar a casa, era el primer paso necesario para pasar página y abrir un nuevo capítulo en mi existencia, tenía que cortar todos los lazos con él y la vida que teníamos en común, no podía ser de otra manera.

Me daba pena dejar la agencia, me había empezado a gustar el trabajo estimulante y creativo del publicista, había pensado que podía ser mi futuro, pero no soportaba verlo todos los días y luego... las cosas se complicarían mucho en unos meses, así que una ruptura limpia era la mejor solución. Iba a echar de menos a Cey Cey y a los chicos de la agencia, todos habían venido a verme en el transcurso de esas dos semanas, incluso Deren y Emre.

Tuve la oportunidad de observar detenidamente por primera vez a mi hermana en presencia de Emre, vi miradas y caricias que dicen mucho del entendimiento entre los dos. Personalmente preferiría no tener nada más que ver con los Divits, pero no me corresponde decidirlo, no puedo imponer mi voluntad a Layla.

A estas alturas la agencia y todos ellos pertenecen a mi pasado, tengo que mirar hacia adelante y averiguar qué hacer con mi vida en el futuro próximo.
Transcribí mi diario en formato electrónico y envié algunos capítulos a varias editoriales con la esperanza de que alguien pudiera encontrarlos interesantes.

Entonces tomé una decisión que nunca pensé que llegaría a tomar.
Creé muestras de mis cremas y las envié a varias empresas de cosmética, dos de ellas se pusieron en contacto conmigo en pocos días, increíble, nunca lo hubiera creído posible.
Tras una entrevista con ambos, opté por vender la fórmula al que más confianza me daba, una empresa multinacional muy seria, conocida en Turquía y en todo el mundo, que se preocupa por utilizar productos naturales prohibiendo el uso de aditivos químicos.

Metin se encargó de mi protección legal en la transacción, demostró ser un amigo leal y confiable, su cercanía a mí en este momento delicado de mi vida me dio mucho consuelo.

Gané una cantidad exorbitante de dinero con la venta, nunca pensé que podría ganar tal suma con la venta de una simple receta familiar, pero afortunadamente esto me da la seguridad e independencia económica que necesito en este momento.

Es mi pequeña venganza, el perfume era el causante de todo, eso es lo único que le importaba a Can, no era a mí a quien quería, sólo le preocupaba que el perfume fuera suyo, me aseguraré de conseguirle una muestra del primer frasco que salga al mercado para que Polen lo use y sea feliz por fin.

Es absolutamente paradójico que el mismo olor que nos dividió, sea la llave para abrir la puerta de mi nueva vida, mi vida sin él.

Pronto, muy pronto.

Estoy haciendo contactos y sopesando varias opciones posibles sobre cuáles pueden ser mis próximos pasos, pero nadie tiene por qué saberlo.

En este momento puedo y debo confiar sólo en mis propias fuerzas, no puedo involucrar a nadie más, nadie debe estar al tanto de lo que planeo hacer, es mejor para todos de esa manera.