XXXIV

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Sanem

Sus palabras volvieron a sacudir el muro que rodeaba mi corazón desde los cimientos, seni çok seviyorum, te quiero tanto me dijo, pero como ahora lo había dicho tantas veces en el pasado también. El amor es un sentimiento loco y grandioso, puede permitirnos hacer cosas inimaginables, locuras que nunca hubiéramos imaginado hacer, por amor cruzamos fronteras, rompemos cadenas, rompemos prejuicios y escalamos montañas.

¿Cómo puedes decir que amas y un momento después decir que se acabó, que la persona que dijiste que amabas ya no es nada y nada para ti? Esto hizo Can conmigo ... pero ahora me doy cuenta de que estoy haciendo exactamente lo mismo con él. Si le quiero ¿cómo puedo cerrarme a cualquier posibilidad de perdonarle y volver a confiar en él?

Siempre he pensado que mi amor por él era Amor con mayúsculas, de esos que sólo se encuentran una vez en la vida y que te llevan a hacer cualquier cosa por la otra persona, él no fue capaz de perdonar un error mío, una falta mía y ahora yo no hago lo mismo...

Le veo bajar de nuevo a la playa para recuperar las cosas que dejó allí durante la tormenta. Se gira hacia mí y me mira intensamente, a pesar de la distancia siento el calor de su mirada en mi piel como si me acariciara, le miro con la misma intensidad suspirando, ¿puedo decir hoy que nuestro vínculo ya no existe como me dijo aquella noche en la cabaña?

Sacudo la cabeza cada vez más confundida al ver que levanta la mano en señal de saludo y se va, ni siquiera ha desaparecido al doblar la esquina y ya lo extraño, ni siquiera sé cómo me siento en este momento, me encantaría correr tras él pero no puedo, siento que ya no puedo permitirme creer.

Vuelvo a la casa para cambiarme y luego subo a cenar. Andrea ha vuelto de sus gestiones en Nápoles, me recibe en la mesa sonriendo como siempre y su compañía consigue una vez más que no piense en las difíciles decisiones que tengo que tomar en el futuro inmediato.

Como es habitual, al final de la cena, cuando todos los demás comensales abandonan lentamente el restaurante, Elisa viene a sentarse a la mesa con nosotros trayendo té para mí y café para ellos.

- Así que chica, ¿qué dices? Hoy en la comida te he visto en compañía, ¿qué ha pasado? Dime...

- Elisa, en este momento no tengo fuerzas para repasar lo que ha pasado hoy, es demasiado para procesar y en este momento no me siento en condiciones de hacerlo, sólo puedo decirte que cada vez estoy más confundida -.

Sanem han pasado demasiadas cosas en tu vida en los últimos meses, es natural que te cueste metabolizarlas, no te preocupes, piensa en descansar y verás que poco a poco las ideas empezarán a aclararse, estoy segura.
Sabes que estaré de tu lado sea cual sea la decisión que decidas tomar, le dije a mi amiga que mantuviera pendiente el alquiler de su apartamento para darte tiempo a tomar una decisión.
Recuerda, eso es sólo el plan B - Me guiña un ojo - El aturdidor de un tipo que ha estado parado bajo nuestras ventanas durante días podría ser un hermoso plan A si lo dejaras -

Sonrío divertido ante su comentario: ¡veo que ha estado ocupado observándolo! -

- Sí, claro, no podía verlo con suficiente claridad así que tuve que bajar a la playa para verlo más de cerca -

- ¿Qué? No lo entiendo.

- Esta mañana he ido a la playa a hablar con él, ¿quieres que te diga lo que pienso? -

Asiento con convicción.

- Parece una buena persona Sanem, alguien que ha cometido un error y quiere compensarlo como sea. Todos cometemos errores, nadie es perfecto, piénsalo...

- Soy perfecto -

Andrea con sus bromas consigue aligerar el ambiente como siempre, nos reímos los tres mientras Elisa le empuja contra el hombro.

Me despido de ellos poco después para volver a casa, las palabras de Elisa me impactaron, creo que además de ser una amiga muy dulce es una mujer muy perspicaz y cuidadosa a la hora de juzgar a las personas, no sería periodista si no lo fuera, y me llamó la atención la impresión que tuvo de Can.

Yo también pensaba que Can era una buena persona, de hecho aún lo pienso, pero ahora mi visión de él está impulsada por la ira y el resentimiento y no es tan clara como antes.

¿Es posible que mi juicio esté tan nublado por lo sucedido que ya no pueda ver las cosas con claridad?

Si nunca ha sido capaz de permanecer mucho tiempo en un lugar, de establecer relaciones serias y duraderas con nadie, ¿cómo puedo estar segura de que al menor indicio de dificultad no huirá como pretendía hacer hace poco más de un mes? ¿Qué pasó con su intención de ir a los Balcanes a propuesta de Polen?

Apenas puedo creer lo que esa mujer ha sido capaz de urdir para dividirnos, me alegro, aunque sea, de que Can haya reconocido su culpa por no haber aclarado la situación de forma contundente al seguir dando la impresión, tanto a mis ojos como a los de Polen, obviamente, de que ella seguía ocupando un lugar importante en su vida. Con esa forma de hacer las cosas no hizo más que engañarla de que todavía había una oportunidad para que ella lo recuperara.

Hay tantas preguntas que se agolpan en mi mente, que siento que voy en círculos y no voy a ninguna parte en este momento. Solo puedo dejar que sus palabras de hoy se asienten para ver a donde nos pueden llevar, necesito ver si puedo ser capaz de pasar lo que fue y realmente superarlo para volver a confiar en él.

Una oportunidad para volver a amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora