Tentación

27

Hermana

A pesar de que no he parado de preguntar, exigir y rogar por respuestas a las dudas que tengo acerca del aterrador encuentro con aquella bruja, Bael se niega a decir algo hasta que sus dos hermanos estén presentes.

Y el demonio que siempre aparece y desaparece cuando le da la gana, en estos momentos se ha tardado como si tuviera agenda llena.

—¿Qué le dijiste cuando apenas se vieron? — pregunto referente a las palabras extrañas que dijo al tener contacto con la bruja.

—Daimonium eina aemicum — repite —. Un demonio es amigo, es la forma de presentarse ante alguien cuando vas pacíficamente.

—¿Y qué respondió?

—Yn Mayissa doist ma ephty: la bruja da un deseo. Eso significa que acepta mi presencia y brindará un deseo luego de tratar los temas por los que me presentaba ante ella.

—Jamás había visto un ser como ella... — confieso y al imaginarla me da un escalofrío.

—Es una bruja real, no como las que acostumbras a ver que son tan humanas y mortales como tú, su sabiduría, poder y conocimiento han llegado a un nivel superior en el cual se vuelven inmortales y son consideradas parte de los seres mágicos. Ella en algún momento fue tan humana como tú, y no tenía el aspecto que ahora tiene, era una mujer hermosa que eligió el camino de la hechicería sobre la vida mundana.

—Y la sangre... ¿para qué?

—Es algo que dice mucho de una persona, puedes saber el futuro o pasado de alguien probando su sangre.

—Entiendo porqué probó la mía... ¿pero tú?

—Es una bruja longeva, sobreviviente de la santa inquisición y participante en los grandes aquelarres de esa época, puedo decir con seguridad que es la más antigua de todas, posee conocimientos del mundo que nadie más tiene. Pero yo soy mucho más grande que ella y mi conocimiento aún más amplio, mi sangre la ha cultivado más de lo que ya era.

—¿Y cuál es la diferencia con los humanos si también lo fue? Uno cualquiera puede probarla de otra persona y sólo sentirá su sabor.

—Sí, no tienen los dones y mentalidad necesarios para llevar a cabo dicha práctica.

Eso es bueno, de ser al revés estoy segura que nos pasaríamos la vida acuchillando personas para ampliar nuestra inteligencia, y nuestra codicia nos llevaría a beber toda su sangre aunque sólo fuera necesaria una sola gota.

—Estoy abrumada.

—Lo sé, yo también lo estoy — apoya y comprendo la gravedad de las cosas.

Para que él se haya visto afectado también debo aceptar que la situación es más fuertes de lo que quise pensar.

—¿No soy normal? — cuestiono afligida una vez que no consigo mantener mi mente bloqueada por más tiempo.

—No — niega casi frío, pero al notar mi estado se acerca y toma mi rostro con cuidado —. ¿Pero a quién mierda le gusta ser normal? No lo eres, pero puedo decir con toda seguridad que eres especial y única en este y todos los mundos.

Bueno, al menos no me ha dicho que soy un nicho raro e inservible.

El destello de la mañana vuelve a aparecer, Lucifer queda a la vista segundos después, y detrás de él viene Belial.

—Llegamos — informa.

—Si no me avisa no lo habría notado — me es imposible detener mi boca una vez que la idea sarcástica llega a mi mente.