city full of lonely people | l.h [1]

capítulo 38

Boston, Uncasville, Detroit, Chicago... 

Hemos recorrido todas esas ciudades en menos de una semana. Hasta estos momentos no sabía lo agotador que son las giras de conciertos, pero ahora lo sé y no culpo a los artistas que decidían descansar por algunos años pues realmente esto consume tu estado físico y el mental también se ve afectado, obvio que eso no quita lo emocionante que es conocer tantas ciudades en algunos meses.

Mi portafolio de fotografías está a rebosar de imágenes, me había encargado de atesorar cada mínimo detalle de cada lugar que visitaba y lo mejor de todo, que también estaba creando momentos con mi persona favorita y a la cual amaba. 

Luke a pesar de estar ocupado con las pruebas de sonido y todo el asunto de ser una estrella del rock, siempre deja espacio en su atareada agenda para pasar tiempo juntos.

Cómo por ejemplo ahora, estamos teniendo la más románticas de las cenas en su camerino y cuando digo romántica me refiero a que puso en su móvil un fondo de pantalla que simula unas velas y decoró el par de hamburguesas con un corazón hecho de salsa de tómate. ¡Dios, es que es perfecto!

—Esta definitivamente es la mejor cita del mundo —sonrío mientras Luke le da un apretón a mi mano—, Ricitos, en serio te luciste.

—Todo por ti, Bree —sube y baja sus cejas con diversión—. Sé que no te he prestado la atención que mereces y...

—Detente, no digas eso —niego con mi cabeza—. Estoy viviendo momentos que ni en mis sueños más locos pensé que pasarían y tu formas parte importante de ellos, así que ni por un segundo pienses lo contrario.

—Es odioso lo mucho que te quiero —el chico rasca el puente de su nariz.

Seguimos en nuestra improvisada cena, charlamos hasta que llega el momento del show, Luke se da una ducha rápida y se pone el atuendo elegido para la noche de hoy.

—¿Estarás en el público? —el rubio me pregunta mientras termina de calzar sus botines plateados.

—Si, hoy estaré gritando como fan obsesionada mientras Calum toca su solo de bajo durante Teeth —Luke me rueda los ojos— Ah y cuando Michael de todo su ser en Want You Back, sí, también ahí.

—Hilarante —me acerco y dejo un beso en sus labios—. Me gustas mucho.

—Somos novios y ¿hasta ahora es que me dices eso? —niego un par de veces—. Eres increíble.

—Y tú eres hermosa —me sorprende tomándome de la cintura y alzándome para darme un beso.

—¿Estás tratando de seducirme, Hemmings? —él sonríe.

—Sí.

—Está funcionado —me besa de nuevo y el sonido de la puerta nos interrumpe—. ¡Largo, el señor Hemmings se encuentra en medio de algo!

—Si te refieres a que está en medio de tus piernas, ¡qué perturbador, Breanna! —distingo la voz de Calum.

Luke y yo nos reímos, el rubio me deja en el suelo de nuevo y voy a abrir la puerta. Calum me sonríe y guiña uno de sus oscuros ojos.

—No me digan qué estaban haciendo, no me interesa —es lo primero que dice al entrar al camerino—. Por los menos ustedes tuvieron la decencia de abrirme la puerta, Ash y Michael me ignoraron.

Suelto una risa y Calum continua quejándose de que en los tours no se deberían admitir las parejas sentimentales de los artistas, aclara que eso es una distracción y que es poco profesional. Ruedo mis ojos y le lanzo un cojín para que cierre la boca y adivinen, no lo hace.