city full of lonely people | l.h [1]

capítulo 8

—Breanna Alene Snearl —mi madre dice caminando hasta donde estamos Luke y yo—, ya sé porqué no me contestas las llamadas —desvía su mirada hacia el rubio.

Lydia Snearl, mejor conocida como la encargada de llevarme en el vientre por nueve meses y traerme al mundo, está parada frente a nosotros. Las manos me comienzan a sudar y deseo que la tierra se abra en cualquier momento y me trague.

—¿Qué haces aquí? —pregunto aturdida, el casi beso y mi madre me descolocan por completo.

—Hola mamá estoy bien, ¿tú cómo estás? —dice ella mirándome—. Así es que se saluda, cariño.

—No respondes a mi pregunta madre. —me cruzo de brazo, Luke se mueve incómodo.

Le doy una mirada rápida y él sonríe de lado.

Esto es incómodo.

—Cariño, eres una maleducada —ruedo mis ojos—, no me has presentado a tu... ¿novio?

—¡No! —niego rápidamente—. Luke no es mi novio, mamá. —mi madre sonríe y gira hacia él para darle la mano.

—Lydia Snearl —Luke estrecha su mano—, la madre de Breanna.

—Un placer —mi madre parece encantada por el rubio, y no la culpo—. Soy Luke Hemmings, conozco a Brea por el trabajo.

—¡Oh qué encantador eres Luke! —el rubio se ríe, yo por mi parte, quiero salir corriendo—. Exactamente, ¿qué haces con referente al trabajo de mi hija?

—Él es uno de mis clientes. —mi madre frunce el ceño— No pienses que me estoy prostituyendo y Luke es uno de mis... ya sabes —ella me mira mal y escucho al rubio reírse en voz bajita— Luke, con otros tres chicos son miembros de una banda y ahora estoy trabajando con ellos.

—¡Maravilloso! —dice muy entusiasmada.

Yo doy un leve asentimiento y el silencio más incómodo del mundo se empieza a sentir, mi madre tiene una sonrisa muy sospechosa en el rostro, Luke apoya su espalda en el auto y yo me quedo mirando al vacío.

Universo, tenemos que hablar. ¿Exactamente qué te hice para recibir semejante incomodidad?

—Bree —volteo hacia donde Luke—, debemos irnos, ya sabes, la fiesta —menciona tocándose la punta de su nariz—. Llegaremos tarde.

—Oh claro, hmm madre —sus verdosos ojos me ponen atención—, nosotros nos vamos, pasa, siéntete en casa y come lo que quieras. —le entrego mis llaves.

Luke se despide de mi madre y ambos nos montamos en el auto, el motor se enciende y arranca.

—¡No llegues tarde! —escucho el grito de mi madre mientras nos alejamos de mi casa.

El rubio se ríe y yo bufo mientras Luke conduce, cierro mis ojos unos segundos y trato de rebobinar lo sucedido. Mi madre, siempre tan oportuna interrumpió algo que según la Breanna irracional quería que pasara. ¿Realmente quería que Luke me besara?

No. 

Si.

¿Si? 

Dios, soy un lío en estos momentos.

—¿Bree? —la suave voz del chico me saca de mis pensamientos— ¿Todo bien? Estas muy callada y eso no es normal en ti.

—Mi madre siempre aparece en los momentos menos indicados —digo poniendo mis ojos en su lindo perfil—. Ya sabes, yo la amo con todo mi corazón pero no puede evitar ponerme los nervios de punta.