city full of lonely people | l.h [1]

capítulo 18

Salgo del hotel como alma que lleva el diablo, me encuentro en la necesidad de hacerlo. Dejo que mi lado coherente me lidere para así evitar que mis sentimientos me lleven de nuevo con Luke.

Me regaño un millón de veces. ¡Dios, cómo odio yo los engaños e infidelidades! Las aborrezco totalmente y realmente pienso que el que engaña es porque no le importa la otra persona, pero aquí estoy yo, teniendo lo que fuese Caín  y lo he engañado con Luke. Recuerdo que Ross me aseguró mas de una vez, que Caín me engañaba con una chica que trabaja con él en la serie que estaba grabando cuando empezamos a tener problemas. Hasta el sol de hoy nunca supe si fue verdad o no, pero ahorita no me encontraba en posición de ni siquiera reprocharle algo.

Voy caminando hacia la rueda de la fortuna, le había enviado un texto a Leigh diciendo que la vería allí. Encuentro un lugar donde no hay mucha gente y decido esperarla ahí. Me quedo viendo a las personas que van y vienen, las chicas con esa vestimentas tan extravagantes y la mayoría de los chicos sin camisa.

—¡Breanna! —giro mi rostro para ver de quién se trata, distingo el cabello rojo de mi amiga y me pongo de pie.

—¡¿Dioses, qué llevas puesto?! —pregunto mientras observo a la pelirroja venir corriendo directo a mi dirección.

Lleva lo que parece ser un traje de baño enterizo y encima tiene un vestido transparente con diseño de estrellas pero eso no es lo que me sorprende, no, lo que me deja confundida son las alas gigantes y brillantes de mariposa que carga en la espalda.

—No trates de entender la moda, cariño  —dice mi mejor amiga mientras me da un fuerte abrazo—. Myah te manda saludos, ahora, cuéntame todo.

—Besé a Luke y por favor, no o te hagas la sorprendida, hace unas horas te lo dije.

—¿Y tu humor de arcoíris a dónde se fue? —ella me pregunta frunciendo el ceño.

—Ya no más buen humor —me encojo de hombros—, ahora lo que hay en mí es sentimiento de culpa.

—Si dices que es por Caín te doy una cachetada —se cruza de brazos.

—Es por Caín... —y la mano de mi supuesta mejor amiga se estrella en mi mejilla con fuerza, no mucha pero sí duele— . ¡Estás demente Leighton!

—Te lo advertí —su delgado dedo me apunta con acusación—, tu eres la que está demente, ¿por qué dejas que Archer te quite la felicidad?

—No me está quitando nada —replico ofendida—, es sólo que no me parece justo que le haya hecho eso...

—Aquí lo que tienes que ver es que tú y Caín no debieron estar juntos de nuevo —Leigh me reprocha—, desde que decidieron volver no te he visto feliz de la manera que antes lo eras — intento decir algo pero la pelirroja me calla—. Déjame hablar, me vas a escuchar detenidamente y al final tu podrás aceptar que yo tengo la razón.

Le ruedo los ojos y a regañadientes asiento con mi cabeza, ambas caminamos y buscamos la sombra de una palmera gigante para sentarnos y hablar sin tanto alboroto.

—No podemos negar que lo tuyo con Caín no fue especial, pero ya tuvo su tiempo y eso no significa que tú debas perseguir eso, la seguridad que antes esa relación te brindaba, ya no lo hace —quise reprocharle pero no encontraba una razón para hacerlo—. Por otra parte está que tú realmente no quieres estar con él, te lo repito Brea, querías la estabilidad y seguridad que tuviste con Caín, pero de quererlo de nuevo, lo dudo mucho.

—¿Me quieres decir que yo creé una dependencia emocional con Caín?

—No pero sí —le ruedo los ojos—. A ver, no es que sin él no vives pero piensas que si no es con él no es con nadie —la miro mal—, acéptalo.