Influencers [Dastián]

T3: OO5 - Privada

Hola, ¿Alguien todavía por aquí? ¿Nel?, no hay problema.

Realmente ya ni recuerdo como quedé aquí, así que haremos un pequeño salto en el tiempo.

¡Vamos a esa!

1 mes después

En la disquera de Sony music se encontraba un joven adulto en prueba de sonido.para empezar a grabar su próximo canción.

—Muy Daniel, ¿Listo?— Preguntó su manager.

El ojimiel asintió en afirmación.

—...Right before I close my eyes
The only thing that's on my mind
Been dreamin' that you feel it too
I wonder what it's like to be loved by you
Yeah
I wonder what it's like
I wonder what it's like to be loved by...—

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—Bien hecho, esto será el próximo éxito— Elogia su mánager.

Su mánager era una joven chica de la misma edad de Daniel.

—Gracias Sara, ¿Sabes si mi papá ya llegó?—

—Si, está en su oficina, ahora con su permiso yo me retiro—

Y si, la chica tenía sentimientos por él ojimiel, pero ella sabía que él tenía dos niños de 3 años y que ya es casado. Aparte, ella era demasiado profesional y no mezclará lo personal con lo profesional.

Daniel se dirigió a la oficina de su padre que estaba ubicado en el 4 y último piso.

Tocó la puerta en Eso era de escuchar la autorización de su progenitor.

Un adelante fue lo que basto parar entrar.

—Hola pa', ¿Estás ocupado?—

—Sólo revisó a algunos papeles, ¿Por qué?—

—Pronto será el cumpleaños de Erick, y pues quería ver si me puedes ayudar con algunas cosas y de paso para pasar tiempo contigo—

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—¡No quiero!— Emma hacía berrinche para no comer.

—¡Emma Córcega! ¡Vas a comer eso si o si!— Regañaba el ojinegro, a su berrinchuda hija.

—¡No papá! ¡No me gusta la pera y las zanahorias!— Volvió a reprochar.

—Vas a comer o no tienes postre hoy— Amenazó a su hija.

—¡Papiiiii!— Se escuchó el gritó del pequeño Alez desde el segundo piso.

—Voy a ver que necsita tu hermno y cuando vuelva más vale que ya te.hayas comido todo—

La pequeña miraba su plato con desprecio, odiaba tener que comer verduras.

La fuerta fue abierta dejando ver a su otro padre.

—¡Papi!— Emma corrió siendo alzada por su progenitor.

—Mi pequeña traviesa, ¿Que diabluras has hecho ahora?— El mayor le daba pequeños besitos en toda la carita de la niña.

—Uhm...— Emma desvió su mirada a la cocina.

Al ver la exoreauo  de su hija, se dirigió a la cocina y el mesón estaba un plato e zanahorias picadas.

—¿No te has comido las zanahorias, Emma?— Daniel fruncio con la mirada a la digna copia suya cuándo era pequeño.

—Saben feo, wuala— Exclamó con asco.

—Ay Emma, ahora entiendo a mis padres, ¿Qué vamos hacer contigo?—

Emma sonrió con inocenciA, eso siempre la salvaba del castigo.

—Pero creo saber como ayudarte a que no te regañen—

Daniel bajo a su hija y busco algo en los estantes de arriba.

—Esto es un secreto entre tú y yo—

—Si papi—

Saco un frasco de lechera de los estantes. La destapó y con ayuda de una cuchara echó una porción del dulce en las zanahorias.

—Ahora pruebalos—

Emma agarró un pedazo de zanahoria y la metió en su boca, ¡Oh cielos!, era lo más rico que a probado.

—Papi, sabe delicioso—

—Tus abuelos me hacían lo mismo pero con chocolate, pero no le digas nada a papá, ¿Va?—

—si, promesa—

—Ahora come antes de que llegué—

La niña comía con tranquilidad, pues ahora si le gustaban.

—Estuvo muy rico, gracias papi—

—¿Ya acabaste Emma?— Sebastián regresó, ahora con Alex en sus brazos.

—Si papá, ya acabé, ¿Puedo ir a jugar ahora?—

—Ve pues, pero sin hacer daños—

—Si papá—

—Esa niña me va a volver loco; Hola amor, ¿Cómo te fue?— Se acercó a su pareja y con cuidado de no lastimar a su pequeño hijo, le dio un beso en los labios.

—Bien, algo cansado, al menos todavía no comienzan los ensayos de la gira, ¿Por qué Alex está durmiendo en su cama?—

—Le estaba ayudando a ordenar toda su ropa y quedó dormido y pues quiero despertarlo—

—Parece un angelito—

—Si, pero digno hijo tuyo tenía que ser, Emma me dijo que a Alex todavía trata mal a ese niño Mateo; el niño ni grosero es, no sé por que a Alex no le agrada—

—Posiblemente para él todavía es difícil, antes sólo pasaba tiempo con Emma, el convivir con más niños todavía le debe costar, ya se acostumbrara—

—Pero si siendo un niño es así y Emma con sus berrinches, ¿Imagínate cuando sean unos adolescentes? El dolor de cabeza que nos van a dar—

—¿Amor, no crees que exageras? Aparte, para eso todavía faltan muchos años—

Pero los niños crecen muy rápido....