«Hogar, dulce hogar»Parte I
Un mes después.
Al abrir mis ojos, encontré el rostro de Ada frente a mí. Ella estaba despierta y rápidamente colocó un índice sobre sus labios para indicarme que guardara silencio. Me tomó algunos segundos recordar que no estábamos en nuestra habitación, sino en un campamento improvisado que habíamos construído la noche pasada en el oasis. Ada apartó su dedo y me sonrió.
«Buen día, mi rey»
«Buenos días, preciosa»
«¿Preciosa?» —bufó—. «Estoy recién levantada y con el cabello enredado»
«Aún así estás preciosa» —le coqueteé.
«Creo que a tu edad ya necesitas lentes» —bromeó, acariciando mi mandíbula.
«¿Me estás diciendo viejo, de nuevo?»
«Te estoy diciendo ciego»
Envolví mis brazos en su cintura para acercarla a mí lo más silenciosamente posible.
«Aún greñuda y recién levantada estas preciosa. Hasta un ciego podría verlo»
«Aww» —se mofó—. «Tremendo lobo se nos puso sentimental»
Rodé mis ojos.
«Eso me pasa por decirte cumplidos»
Como aún tenía mi mandíbula sujeta, le fue fácil jalarme hacia ella y regalarme un beso húmedo, con todo y lengua. Suspiré sobre su boca cuando fue mucho más corto de lo que creí.
«Esa fue mi manera de decirte gracias» —explicó.
«Preciosa, preciosa, preciosa»
«Tampoco abuses»
«¿Cómo dormiste?»
«Fatal. Eira se las arregló para patearme toda la noche»
«Yo definitivamente extrañé nuestra cama»
«Creo que ya estamos algo viejos para las pijamadas»
«¿Tengo que recordarte de quién fue la maravillosa idea?»
Ella hizo un puchero con sus labios y me dieron ganas de morderlos, pero me contuve.
«Se lo debíamos a Jared y Flora. Además, la siguiente será nuestro turno» —añadió traviesa.
«Ya la estoy saboreando»
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Féryco. Ezra Rey.
FantasyEl rey de las hadas aún no sabe que nunca volverá a ser el mismo una vez que descubra quién está detrás de los asesinatos que amenazan a su reino. ¿Ezra Rey tendrá la fuerza necesaria para proteger a su gente, su familia y a sí mismo? ¿Cuánto tendrá...