No tengo que explicarlo.
Tú y yo, sabemos porque estas aquí.
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Para comprender la mayoría de estos, les recomiendo pasar primero por "Lineatus" esta en mi perfil y si vienes de Lineatus, pues hola de nuevo :)
Salí del salón de pociones con el pergamino en la mano, caminé por el pasillo hasta que en la vuelta de este, un brazo me metió a un salón, aparentemente solo.
- ___________ - mire al rubio frente a mí, tenía el cabello levemente despeinado y parecía agitado por correr.
- ¿Qué pasa? - me miro - ¿estás bien?
- Pansy , me invito al baile de navidad - lo mire.
- ¿El problema es?
- Por Merlín- dijo rodando los ojos - ¿tu ya tienes pareja?
- No, bueno - <estoy esperando a que me invite alguien que me agrade> pero no va a pasar - aun no.
- Creí que el chico de Ravenclaw te había invitado - asentí - pensé que le dirías que si, dijiste que era lindo.
- Yo pensé que le dirías que si a Pansy, ella es muy bonita - hizo una leve mueca.
- No es porque no sea bonita, es muy bonita, solo que...
- ¿Solo qué? - me miro - ¿sigues esperando a Astoria?
- No es eso...
- Porque debiste invitarla desde hace una semana y en lugar de eso esperaste - me miro - quien termino invitándote fue Pansy y la rechazaste, no entiendo que esperas.
-Habla quien rechazo a medio Ravenclaw - dijo cruzandose de brazos.
-Pues que no quiero ir con ellos, además no conozco a ninguno -tome la misma postura que el- tu si conoces a Pansy, es parte de tu circulo social.
-¿Qué quiere decir?
-Que deberías decirle que si, no encuentro tu lógica de rechazarla
- Es que no quería ir con Pansy, quiero ir contigo - soltó con tanta seguridad y naturalidad que me congele por un segundo.
- Mmm bueno yo...
- Ahora tartamudeas- se acercó - lo pediré bien.
Tiro mi cabello un poco para atrás, acomodo su corbata y tomo mis manos mientras <supongo> pensaba que decir.
- ¿Quieres ir conmigo al baile?
- Yo... - supongo que mi duda lo hizo entrar en pánico un poco.
- Es como amigos, solo es una salida de amigos como cuando vamos a las cocinas o a las tres escobas - sonreí, al notar sus intentos de que me sienta cómoda y dijera que sí.
- Claro, Draco - me miro con los ojos muy abiertos- me encantaría.
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