Capítulo 16

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Capítulo 16

>> Cálmate... Tranquilízate Heriberto... Ve por Victoria y llévala al hospital... <<

Si, qué fácil se escuchaba, pero ya en la práctica otro gallo cantaba.

Estaba nervioso, ¿Y para qué intentar ocultarlo??

Se pasó no uno, sino 2 semáforos en rojo, y estaba haciéndolo con un tercero cuando escuchó una sirena de policía... Una multa de varios pesos... Pero finalmente llegó a la mansión...

Encontrándose a Victoria viendo TV con Max... ¿...???

H: pero...

Max: ¡papi!! ¡Papi!! (Abrazándolo un instante para volver a sentarse junto a la mamá en el sofá)

H: Victoria... ¿No que te pusiste de parto??

V: si mi amor... (Sin poder levantarse por sí sola del sofá) Ya empezaron las contracciones...

H: ¿Cada cuánto? (Ayudándola a ponerse de pie)

V: no sé...

H: Mi vida, ¿No tomaste el tiempo...?

V: Ahí... Ahí viene otra... ¡AHHHHH!

H: respira, mi amor... Como lo aprendimos en las clases...

V: Vamos... Vamos al hospital...

H: si, mejor es que vayamos lo antes posible...

Max: ¿Yo también voy?? (Al escuchar que se iban)

V: no mi vida, tu hermanita va a nacer ya...

Max: ¡Yo quiero ver!!

H: la verás cuando nazca, campeón... Diana se quedará contigo... Y tú te portarás como el mejor hermano mayor del mundo, ¿Eh...?

Max: ¡si papi!

H: dale un beso a mamá... (Alzando al niño para ponerlo a la altura de Victoria)

V: te portas bien, mi chiquito...

Max: tu también, mami... (Besándole las 2 mejillas)

H: ahora a la bebé... (Poniéndolo en el piso)

Max: chao bebé... (Ahora besando la panza de Victoria)

H: vengo por ti para llevarte y que conozcas a tu hermanita... ¿De acuerdo?

Max: si papito... (Abrazándolo muy fuerte antes de que se fueran)

Pero el parto no era tan sencillo como llegar al hospital y dar a luz.

Había que tener en cuenta varios aspectos más. Contracciones fuertes y regulares, la dilatación del cuello uterino y el rompimiento de la fuente.

Después de horas y horas en labores de parto, ya entrada la madrugada, cerca de las 4 de la mañana y muy agotada, Victoria veía a Heriberto colocar a su recién nacida sobre su pecho... Ambos llorando como 2 tontos pero obviamente por la emoción...


"Hace tiempo que te espero y también que te deseo,

En cualquier momento llegarás y serás mi mundo nuevo,

Está dentro de ese vientre, tierno, frágil de cristal

Eres tú deseada niña la alegría de mi hogar..."

TRES PALABRASDonde viven las historias. Descúbrelo ahora