Death 13, Parte 2

167 10 3
                                    

Después de tener todo arreglado y la cena finalmente estaba lista, Josephine comenzó a preparar comida para bebés mientras Caesar atendía al bebé después de que la primera lo calmara lo suficiente mientras Polnareff felizmente comía su cena y Kakyoin distraídamente comía su propia porción, con la mirada pérdida mientras trataba de recuperarse de su anterior arrebato y crisis.

Mientras tanto, con una buena distancia entre los demás, Joruko se quedó solo con una taza en una de sus manos, mirando distraídamente la belleza de las estrellas en el cielo sobre ellos, admirando su luz mientras sus pensamientos confusos se detenían.

- "Arabia Saudita"- se dijo a si misma- "Estamos a unos 8,800 kilómetros de Japón. Ya han pasado cuatro semanas desde que partimos. Estaremos en aprietos si no nos apresuramos"

Este momento, para Joruko, lo sintió sub-real.

Que el hecho de que hubiera viajado tan lejos y que estuvieran tan cerca de Egipto, en lo que le parecieron siglos, lo dejó con otro sabor de boca. Cuando era niña, había soñado con viajar como sus abuelos, que parecían tener algo por viajar, y ahora que podía hacerlo, con sus amigos también, era algo que no cambiaría por nada.

Incluso con el peso de su misión sobre sus hombros por tener uno de los Stands más poderosos que habían encontrado hasta ahora, incluso cuando todo esto era con el objetivo solemne de salvar y sanar a su madre, no lo cambiaría ya que era por su familia. Aunque sentía que había otro motivo pero no sabía cual era pero también tiene que ver con la familia.

Con un suspiro silencioso, miró hacia las estrellas que brillaban sobre ella, buscando un tipo de consuelo en ellas y una pregunta sin respuesta que lo había estado molestando poco después del aparente colapso que Kakyoin había experimentado hace unos momentos, pero lo enterró profundamente dentro de ella debido a la memoria de su madre enferma dominaba todo lo demás.

Dándose la vuelta cuando decidió que sería el momento adecuado para volver con los demás, se acercó a ellos, dirigiéndose silenciosamente hacia ellos con la mirada hacia abajo cuando pasó cerca de un escorpión, moviéndolo hacia arriba cuando lo pasó, sus ojos inmediatamente. cayendo sobre la figura solitaria de Kakyoin, quien sostenía su plato de comida en una de sus manos mientras se sentaba solo en la roca que estaba usando como su asiento, notando de inmediato que tenía los ojos cerrados mientras algunos mechones de su flequillo caían sobre su frente, protegiendo su mirada depresiva.

- Oye, Joruko- Polnareff la llamó en un susurro mientras se acercaba a ella justo después de sentarse- ¿Qué crees que le ocurre a Kakyoin? Se volvió loco mientras dormía en la avioneta y luego casi ataca al bebe. Algo le sucede, creo que esta perdiendo la cordura. ¿Crees que podrá continuar este viaje con nosotros?

Mientras Kakyoin luchaba con sus emociones y recuerdos confusos, el bebé usuario de Stand miró al adolescente con una mirada oscura en sus ojos anormales y agudos mientras se reía de su canasta donde Caesar lo había dejado hace unos minutos, soltando algunas risas mientras miraba desde el borde de la canasta.

- "Entre en pánico al pensar que Kakyoin había descubierto mi verdadera identidad. Pero Kakyoin duda de si mismo en este momento. Y además, nos encontramos en pleno desierto. Solo me resta esperar a que todos se duerman. Si no hay nadie que los despierte..."- pensó el bebe.

El silencio alrededor del grupo de Crusaders fue interrumpido por el suave sonido de la comida para bebés que Josephine estaba preparando llenó el aire, haciéndole saber que estaba lista pero también despertando la curiosidad de Polnareff.

- Huele muy bien ¿Qué esta cocinando?- pregunto Polnareff con interés.

- Comida para bebe- explicó Josephine con una sonrisa en su rostro- Es un estofado de leche, yemas, bananas y un poco de pan, algo muy sano. ¿Quieres probar un poco?

Nuevo mundo, nueva aventuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora