Llegó otro día caluroso al desierto egipcio y el Grupo Joestar está parado cerca de su vehículo esperando algo. No sabían qué es, pero Josephine les dijo que el área es un punto de encuentro.
- ¿Qué es eso?- Polnareff gritó, sus ojos azules pegados al objeto en el cielo.
- Llegó- respondió Josephine en su lugar con una sonrisa en su rostro cuando también levantó la vista.
- ¡Un helicóptero!- Polnareff gritó, identificando rápidamente a dicho helicóptero mientras cubría el sol a su paso, ocultándolo.
- No digas cosas obvias- Kakyoin se burló de él- Podemos verlo claramente.
- Es un helicóptero de la Fundación Speedwagon- explicó Josephine mientras el helicóptero daba una vuelta en el aire- Buscan un lugar para aterrizar.
- ¿La Fundación Speedwagon?- Joruko preguntó, dejando que su mirada azul verdosa se detuviera un poco en el helicóptero antes de mirar a sus abuelos- ¿Tus viejos conocidos cuidan de mi madre en Japón?
- Así es- respondió Caesar a la pregunta de su nieta.
- ¿Nos harás montar ese helicóptero?- Joruko volvió a preguntar pero, esta vez, con el ceño fruncido mientras se agarraba el sombrero para que no se le escapara mientras el helicóptero finalmente descendía para aterrizar correctamente, unos metros por delante de ellos.
- No- respondió Josephine- Admito que me encantaría, pero son usuarios de Stand. Se verían involucrados si nos atacaran.
- Entonces ¿Qué hace aquí el helicóptero?- pregunto Kakyoin detrás de ellos.
- Vino a traernos un ayudante.
Las palabras de Josephine, tan despreocupadas como sonaron, lograron tomar por sorpresa al grupo así como a Polnareff, cuyos ojos se abrieron un poco por la conmoción ante la mención de una nueva incorporación a su grupo, ya que ninguno de ellos estaba esperando algo parecido.
- ¿Qué? ¿Un ayudante?- pregunta Polnareff.
- Tardaron en traerlo porque tiene una personalidad problemática- explico la mujer mayor.
- ¡Señora Joestar!- Avdol intervino por primera vez, dándole a dicha mujer una mirada preocupada mientras que Caesar frunció el ceño-¡De nada nos servirá su compañía! ¡No puede ayudarnos!
- Es una mierda que solo causará problemas- coincide Caesar
- ¿Lo conoces, Avdol?- le pregunta Kakyoin.
- Si, y muy bien- le respondió Avdol con un tono de mal humor en su voz antes de volver a mirar el helicóptero.
- Un momento- exigió Joruko mientras daba un paso adelante- Si viene a ayudar significa que es un usuario de Stand ¿no?
- Es un usuario cuyo Stand corresponde a la carta de El Loco- dijo Josephine antes de que Avdol pudiera responder, tomando la iniciativa para explicar la información de su nuevo compañero
- ¿El Loco?- Polnareff soltó una carcajada- El nombre de su carta lo hace sonar un poco estúpido.
- Deberías alegrarte de que no sea nuestro enemigo- regañó Avdol a Polnareff, mirándolo con el ceño fruncido- Podría derrotarte.
- ¿Qué dijiste?- Polnareff gritó con los dientes apretados, ofendido y enojado por la declaración contundente y abierta, agarrando a la adivina por el cuello de su túnica- Cuidado con lo que dices.
- Es la verdad. ¡Y saca tu mano de ahí!
Polnareff se sonrojo al ver que le estaba tocando el pecho y aparta su mano rápidamente, los dos estaban rojos de la vergüenza.
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Nuevo mundo, nueva aventura
FanfictionEn 1989, Josephine Joestar viaja a Japón para ayudar a su nieta Joruko Kujo, ya que ambas despertaron un misterioso poder conocido como Stand en el momento en el que Dio vuelve a la vida, ahora usando el cuerpo de su ancestro Jonathan Joestar a su v...