Don Cherry y Dirty Work

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Después de la pelea contra Steely Dan, el grupo salió del hotel y fueron a caminar antes de ir a su siguiente destino. Caesar y Josephine estaban paseando por el puerto de Karachi.

- Joruko hizo un buen trabajo cuidando al enemigo- hablo Josephine.

- Si, y al final le dio a ese bastardo lo que merecía- asintió Caesar mientras la rodeaba con una brazo, luego miro alrededor como si hubiera olvidado algo- Por cierto ¿dónde esta Joruko y los demás?

- Los he enviado a comprar alimentos y suministros antes de que nos vayamos mañana a Arabia Saudita- dijo Josephine- Hablando de eso, tengo que encontrar un teléfono público para hacer algunos arreglos con la Fundación Speedwagon. Nuestro hotel no acepta llamadas de larga distancia.

- Entonces vamos.

La pareja caminaron juntos como si fueran dos jóvenes enamorados. Hace tiempo que no se sentían así, si bien tenían sus peleas (y muy fuertes, por cierto) al final, ellos se reconciliaban. Los dos encontraron un pequeño restaurante y también encontraron a Polnareff tristemente sentado adentro, en medio del almuerzo, así que se le unieron.

- Aquí no hay nada más que inodoros en cuclillas...- refunfuñó Polnareff. Se animó cuando vio a los dos abuelos- ¡Oh, Monsieur Zeppeli! ¡Madame Joestar! ¡Que bueno que los veo!

- Hola- saludo Caesar.

- Entonces, ¿terminaste con las compras?- Josephine preguntó mientras miraba el menú-¿Dónde están Joruko y Kakyoin?

- La última vez que los vi, van de regreso al hotel- respondió Polnareff- Por cierto,  ¡deberían probar el pollo tikka de aquí!

Los tres disfrutaron de un buen almuerzo. Los tres compartían bromas y se echaban a reír a carcajadas. 

- ...¡Y después de todo eso, todavía no logramos abrir esta botella!- Josephine terminó su broma.

Los dos hombres rieron, Polnareff casi rompiendo a llorar que inclinó la silla hacia atrás tanto que cayó al suelo con un breve grito.

- ¡Mamma mia, Polnareff! ¡Muestra algo de autocontrol, estamos en un lugar público!- le regaño Caesar.

Josephine dejo de reír cuando consultó su reloj de bolsillo.

- Tengo que volver al hotel. ¿Esta bien si los dejo solos?

- Si, dolcezza- dijo Caesar dulcemente- Yo cuidare de este bebe grande.

- ¡Oiga, no soy un niño para que me cuide!- exclamo Polnareff.

- En realidad, si- dijo Josephine- ¡Cada vez que te vas solo, siempre te pasa algo malo!

Polnareff se sintió levemente insultado y Caesar se rió entre dientes.

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En su camino de regreso al hotel después de comprar, Kakyoin y Joruko decidieron pasar por una pequeña librería para buscar. Kakyoin encontró un libro ordenado de la historia y la cultura de Arabia Saudita, mientras que Joruko tiene los ojos pegados a un libro con imágenes de barcos. El pelirrojo deseaba preguntarle si estaba bien luego de su "tortura" por parte de Steely Dan pero no quería recibir unos golpes de Star Platinum.

- Oye, Kakyoin, ¿recuerdas ese Stand de peces contra el que luché hace algún tiempo?- pregunto Joruko, sacándolo de sus pensamientos.

- ¿Hmm? Sí, Dark Blue Moon era el nombre- dijo Kakyoin, mirando el libro pero sin leerlo- ¿Qué pasa con eso?

- Pensé que era solo un Stand tonto con un truco tonto- murmuró Joruko- Pero ... tenía una estética interesante.

Kakyoin levantó la vista de su libro y vio a Joruko mirando imágenes de especies de peces en un libro de texto escolar.

Nuevo mundo, nueva aventuraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora