Doloroso Amor

Capítulo 109

Cuando él terminó de hablar, tomó su abrigo y se alejó.

WanYin miró la espalda de WangJi cuando se iba, y la luz de sus ojos se fue apagando poco a poco. Al final, no quedó nada más que desesperación en sus ojos.

No sabía cómo lo trataría XiChen, solo sabía que sus métodos definitivamente serían muy crueles.

Nunca olvidaría como había cavado en la tumba y había permitido que las cenizas de su propia hija fueran arrastradas por el viento y la nieve, y de hecho incluso le había sonreído con indiferencia ante eso.

Al ver los ojos enrojecidos de WanYin mirando en la dirección de partida de WangJi, XiChen se enojó.

— ¿Estás tan triste de que se vaya? Jin WanYin, ¿me estás tratando como si estuviera muerto? Yo soy tu esposo.

Apartó a WanYin de sus brazos con enojo. WanYin se tambaleó y cayó a un lado del sofá, rozando su mejilla herida contra la esquina del sofá y haciendo que sus dientes temblaran de dolor.

— Limpia este lugar. Lo que sea que hayas hecho por ese hombre hace poco, hazlo ahora.

WanYin bajó sus ojos y sonrió con amargura. 

— Está bien, siempre y cuando estés feliz, esposo mío. Puedes ponerme a hacer cualquier cosa.

XiChen miró a WanYin, quien se levantó lentamente. De alguna manera, él sintió que la forma en que lo había llamado esposo era particularmente inquietante.

A través del viento y la nieve, WanYin fue al supermercado a comprar la comida e inmediatamente le preparó a XiChen una mesa de platos después de que regresó.

WanYin también preparó el baño para XiChen según su deseo. No se atrevió a oponérsele. Solo sabía que, si iba en su contra, el destino de las personas a su alrededor sufriría.

Fue solo que, justo cuando WanYin le preparaba una toalla nueva a XiChen, sintió un dolor sordo y repentino en el abdomen cuando se levantó.

Se agachó reflexivamente por el dolor, su rostro se puso casi tan pálido como la nieve de inmediato.

— WanYin— La voz de XiChen había llegado a sus oídos.

Quería levantarse, pero el violento dolor hizo que no pudiera enderezar su cuerpo.

WanYin se acostó sobre las frías baldosas de cerámica mientras arqueaba el cuerpo. Se acurrucó aún más por el dolor cada vez más atormentador y su conciencia parecía estar disminuyendo.

— Jin WanYin, ¿estás sordo?

La voz insistente del hombre sonaba impaciente. WanYin se llevó la mano a los dientes y se mordió.

Un dolor profundo se extendió por su cuerpo. WanYin abrió sus ojos de repente, cada vez más borrosos, y cuando estaba a punto de levantarse del suelo, la figura de XiChen apareció frente a él.

Al ver a WanYin que parecía estar a punto de morir, XiChen lo miró con desdén.

— ¿Estás tratando de fingir estar muerto de nuevo para que sienta simpatía por ti?

WanYin respiró hondo y levantó la cabeza con dificultad. 

— Sr. Lan, ¿podría darme los analgésicos de la mesa de café ...?

Tenía tanto dolor que incluso recuperar el aliento era difícil. XiChen miró a WanYin durante dos segundos y luego se dio la vuelta.

No mucho después, XiChen regresó con la botella de analgésicos en su mano. 

— ¿Es esto lo que querías? — le preguntó de manera condescendiente a WanYin que se sostenía con la bañera.

WanYin apretó los dientes y asintió, y luego extendió la mano. 

— S-Si... — Sin embargo, antes de que pudiera terminar, los labios de XiChen temblaron y su sonrisa era sombría.

Él abrió el frasco de la medicina, vertió todas las pastillas en el inodoro y luego halo la cadena.

Con un sonido de chapoteo, todas las píldoras fueron arrastradas por el agua y el corazón de WanYin pareció haber desaparecido instantáneamente.

Miró al hombre que lo miraba con desdén como si fuera un perro. Una niebla le nublaba la vista.

— XiChen, realmente no me siento bien...

— ¿Y entonces? — El hombre se rio con indiferencia — Es simplemente una molestia. Como le dijiste a WangJi, no morirás.

— ...