Doloroso Amor

Capítulo 137

La lluvia se hizo más pesada mientras WanYin todavía estaba arrodillado en el piso mojado. Sus manos se agitaron frenéticamente a su alrededor.

Los coches pasaron junto a él y salpicó agua sobre él una y otra vez. Sin embargo, todavía no podía encontrar su paraguas.

XiChen estaba a punto de arrancar el coche, pero no pudo evitar mirar el espejo retrovisor. GuangYao notó esto e inmediatamente cambió la atención de XiChen.

— XiChen, vamos. Tenemos que traer a A-Yi para revisar su cara.

XiChen giró la cabeza — No te preocupes, no habrá una cicatriz en la cara de A-Yi.

— No pensé que WanYin me odiaría tanto. Tampoco pensé que mi padre le pediría a la gente que cortara a WanYin en la cara solo para vengarnos a mí y a A-Yi — dijo inocentemente GuangYao — XiChen, no culparás a mi padre, ¿verdad?.

— Tonto, ¿por qué lo culparía? — XiChen sonrió.

Volvió a mirar el espejo retrovisor. Vio a WanYin de pie después de encontrar su paraguas. Luego, lo vio alejarse mientras seguía el camino. Se burló en un ataque de ira.

— Merece que le desfiguren la cara. ¿Quién le pidió que hiciera esas cosas crueles y despreciables?

GuangYao estaba complacido cuando vio la ira y el resentimiento de XiChen. Sin embargo, se hizo el tonto y dijo — XiChen, quiero convertirme en tu esposo tan desesperadamente. ¿Sabes que después de separarme de ti en la playa, te he echado de menos todos los días? He anhelado el día en que me convertiré en tu novio, y este día finalmente está aquí.

XiChen estuvo en silencio durante unos segundos antes de volver a sus sentidos — Voy a mantener mis promesas.

— Bueno — GuangYao sonrió dulcemente. Sin embargo, había un destello de envidia en sus ojos.

A pesar de que XiChen le prometía, todavía se sentía incómodo. Pensó que sólo podría estar a gusto si WanYin moría.

...

WanYin volvió a su casa y tomó algunos analgésicos. Había pasado por tanto estos días que pensó que quizás no tendría ni un mes.

Sintió como si mil hormigas estuvieran mordisqueando su corazón. El dolor seguía invadiendo su cuerpo marchito y roto repetidamente.

Había pasado algún tiempo desde que tomó los analgésicos, pero su dolor aún no disminuyó. WanYin sacó la foto que GuangYao le había tirado previamente y la acarició con sus dedos. Era como si pudiera sentir los rasgos del niño de esta manera.

— Querida, papá se reunirá contigo pronto. Muy pronto... — WanYin cerró los ojos desesperado.

Al día siguiente, recibió los papeles del divorcio de XiChen. Le pidió a su asistente que los enviara. El asistente esperó a que WanYin los firmara antes de llevarlos de vuelta. Sin embargo, WanYin se negó a firmar los papeles sin importar qué. Finalmente, el asistente sólo podía llamar a XiChen.

Después de un tiempo, XiChen llegó. Había estado lloviendo durante los últimos días y el aire que rodeaba su cuerpo se había vuelto aún más frío.

WanYin estaba sentado en el sofá con una mirada distante. A pesar de que su visión restante se volvía cada vez más tenue, todavía podía sentir que XiChen se estaba acercando a él.

Tiró los papeles a la cara de WanYin — Fírmalos.

Sus palabras no tenían calidez en absoluto. Esas dos palabras fueron breves y directo al grano. WanYin era como una estatua, no daba ninguna reacción.