XXXIX

225 50 3
                                    

Si... si estaba haciéndose muy difícil.

Toda esta semana, aun con poco trabajo, se estaba volviendo cuesta arriba solo por las clases con Vega.

–No, tienes que hacerlo con el brazo desde el hombro hasta el codo pegado al cuerpo y sin flexionar casi el brazo haces un movimiento hacia atrás –Me corrigió otra vez la postura.

Y era simplemente la postura correcta para dejar pasar una persona de tu misma clase social frente a ti.

Repetí otra vez el gesto más tenso que un palo solo moviendo la mano derecha, pero de nuevo estaba mal.

–Tiene que ser un gesto como de que le abres el camino, no recto, ni debes acabar el gesto con el brazo más atrás de tu cuerpo, eso es una falta de respeto encubierta muy mal vista –Explicó de nuevo poniéndose a mi lado y moviendo ella mi brazo.

–Y que diferencia hay con acabar a la altura de tu cuerpo a acabar ligeramente más atrás? –Dudé más que frustrado.

Todo lo que hacía mal llevaba constantemente a una falta de respeto.

–Es que si lo haces bien le estas diciendo "por favor, a delante, no quiero entorpecer tu camino", pero si lo haces mal le estas diciendo "camina delante que no quiero compartir mi espacio contigo" –Explicó agarrando su largo vestido para colocarlo mejor.

Si agarraba mal los cubiertos por qué decía que la comida era asquerosa, si las reverencias las hacía con el pie derecho delante le estaba diciendo que rechazaba su posición social, si tocaba la mano de una mujer con los guantes puestos por que era un gesto de asco pero si ella no me daba permiso para quitarme los guantes no podía tampoco saludarla como era debido...

Y así una larga lista de cosas que hacía mal una detrás de otra.

Las clases rápidas de supervivencia para el baile de Elira fueron menos complicadas.

–Es tu día libre, así que debemos aprovecharlo todo lo posible –Comentó una vez dio medio su aprobado con mi gesto.

Y me hizo una señal con el abanico para que me sentara con ella a la mesa.

De momento nadie se quejaba por que usáramos la sala de té para las visitas.

Como bien me había enseñado primero coloqué la silla para que ella se sentara , la ayudé a arrimarla y a continuación me pude sentar yo.

–No has revisado que agarrara mi vestido antes de arrimar la silla –Se quejó sacando el bajo de su vestido de debajo de una pata.

Definitivamente esto estaba saliendo peor que mal.

–No voy a aprobar jamás esto –Me quejé en alto sin poder más.

Y esto sólo había sido una semana.

–Todavía hay 53 días para practicar, mientras esté en mi mano ten por seguro que vas a aprobar –Concluyó Vera llevándose la taza a los labios para beber un poco.

–Si no se ni caminar bien sin faltarle el respeto a 3 personas diferentes! –Respondí con algo de rabia.

Vera a eso ya ni siquiera pudo llevarme la contraria.

–De donde eres? –Cambió de tema drásticamente agarrando una galleta.

–De un pueblo muy, muy pequeño del norte, cerca del río mayor Teoki –Expliqué dejándome escurrir un poco en la silla.

–Esas zonas son muy rurales, así que dudo que hasta los más adinerados sepan de etiqueta, verdad?

Si... la etiqueta no era algo muy importante en mi pueblo, ni siquiera supe que era hasta que Ares me lo explicó.

Plumaje real (Yaoi/BL) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora