Página 39.
Rikido Sato.
Eh llegado a pensar en Sato como mi mamá, seguro te preguntaras el por qué, querido diario, la respuesta es muy fácil... Por sus postres.
A mamá le encantaba cocinar para mi, sobretodo postres, y a mi también me encantaba. Siempre me dejaba ayudarla a cocinar y sentía que en esos momentos solo eramos ella y yo, e esos momentos inolvidables, no existía nadie más que ella y yo. El cocinar era otro de los momentos que eran solo para nosotros como lo era también el cabalgar.
Pero desde que quedo en coma, ya no podemos compartir más de esos momentos, y es cuando mi mente me juega malas jugadas. Hay veces en las que entro a la cocina de los dormitorios y en vez de ver a Sato cocinando, la veo a ella; entro a la cocina y la veo cocinando mientras canta una hermosa canción y se mueve a al compás de una maravillosa melodía que resuena en su cabeza.
Pero después esa ilusión se desvanece para dejar ver a Sato cocinando. Cada que Sato cocina lo veo con detenimiento y me permito imaginar que es mi mamá la que esta cocinando, incluso se parecen e cuanto al sazón de la comida. Eh escuchado que cada persona le da un distinto sazón a la comida, nunca lo entendí hasta que robe la comida de mi mamá y probaba la comida de otras personas.
El sazón de Sato me es nostálgico porque se parece mucho al de mi mamá, pero siempre recuerdo que por más que se parece no es el de mi mamá y nunca sera igual.
Incluso su kosei tiene que ver con comida, cada que Sato come azúcar, obtiene fuerza sobrehumana por un determinado límite de tiempo, hasta cierto punto se me hace un kosei y curioso y chistosos, es un gran kosei solo tiene que aprender a usarlo mejor. Sato comento que debido a su kosei se vio obligado a aprender a cocinar.
Solo puedo decir... Gracias Rikido Sato por dejarme ver a mi mamá cada que cocinas.
Página 40.
Koji Koda.
Uno de los kosai que más me gusta de mis compañeros después del de Tokoyami y antes que el de Toru, es el de Koda, ya que el puede hablar con los animales y entenderlos, igual que lo hacía mi mamá.
El nombre de Koda me recuerda al nombre de uno de mis amigos animales, un osito pardo bebé muy bonito al que nombre Koda, se me hace un nombre muy tierno y simpático, al igual que adorable, como lo es mi amiguito Koda y mi compañero Koda, ya ni se a cual me refiero cuando digo ese nombre jajajaja.
Koda me recuerda a mi mamá, ya que así como es Koda, tranquilo, tímido, cohibido; así a veces era mi mamá, o al menos siempre lo era conmigo, ya que cuando trabajaba, iba a misiones o tenía que atender sus negocios con personas frívolas, ella también lo es; pero conmigo era todo lo contrario.
Cuando estoy cerca de Koda me siento junto a ella, expiran casi la misma aura de serenidad y apacibilidad, la que mamá tenía conmigo y la que Koda tiene todo el tiempo. Cuando estoy cerca de Koda puedo dormir tranquilo, porque siento que la que esta a mi lado es mi mamita acariciando mis cabellos mientras me canta mi canción para ayudarme a dormir.
Gracias Koji Koda por ayudarme a dormir en las noches.
Continuara...
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Querido Diario (El diario de Izuku Midoriya)
RandomEs bonito tener un diario, se convierte en tu santuario donde puedes desahogar todo lo que te agobia. Puedes decir todo lo que se sientes y todo lo que piensas hasta tus más profundos secretos. ¿Qué podría pasar si ese santuario cae en unas manos qu...