Ya entrada la noche, Aizawa fue al cuarto de Midoriya, sumamente contento por lo que su alumno Todoroki le habia contado a él y al resto de sus alumnos. El hecho de que Midoriya halla interactuado un poco con Todoroki, era muy buena señal de la recuperación por parte del pecoso, talvez ya podría decirle que sus padres no le podrían hacer más daño, que estan en la carcel junto al hombre que intento lastimarlo sin posibilidad de salir y que había sido adoptado por él, que legamente ya no es Izuku Midoriya, sino Izuku Aizawa.
Toca la puerta de la habitación del pecoso, nadie contesto, lo cual no se le hizo extraño, debido a que apenas empezaba a interactuar con su entorno, talvez aún no estaba listo para hacerlo con todas las personas que lo rodean. Habrió levemente la puerta, asomando un poco su cabeza y pudo observar el cuarto a oscuras, y ahí estaba, su precioso hijo dormido en su nido -desde hace unos días le empezó a decir así debido a la forma que tenía-, calmado y sin que nada lo perturbara.
Dirigio la vista hacia la mesita de noche donde se encontraba la comida de su hijo sin ser tocada, entro despacio, cuidando el no hacer ruido para no despertar al pecoso, tomo la silla que estaba en el escritorio de Izuku y la colocó a un lado de la cama tomando asiento en ella para vigilarlo, como lo había estado asiendo ultimamente cuando descubrió en una de sus rodas nocturnas para vigilar a los alumnos, que su niño tenía constantemente pesadillas que le impedían dormir.
Así que se propuso estar ahí junto a él la mayor parte de la noche, para cuidarlo de sus pesadillas, que minímo pudiera dormir unas horas, porque se enteró que ni de día, las pesadillas dejaban en paz a su pequeña criatura.
Lo observo detenidamente, no había señal alguna de que fuera a tener pesadillas o de ya haberlas tenido, incluso se atrevía a decir que su piel se veía menos palida que en días anteriores y sus labios tenían un poco más de color. Se sentía tremendamente feliz de que su hijo este mejorando. Esta en debate, no sabía si levantarlo para que comiera algo, así no se quedaría simplemente con el desayuno en su estomago, o si dejarlo dormir hasta el día siguiente, aprovechando que las pesadillas se habían alejado momentaneamente.
Aunque no fue necesario seguir debatiendose en qué hacer, debido a que el pecoso estaba levantandose por si solo. Abrió sus ojos y lo primero que vió fue a su querido profesor que ha estado cuidando de el tan fervientemente. Se le quedo mirando durante unos minutos, observando como su profesor no dejaba de sonreírle.
Aizawa solo podía observar con una sonrisa como los grandes y bellos ojos de su hijo recuperaban un poco de su inusual brillo, que no hacía más que alegrar a toda la gente a su alrededor.
Aizawa: dormiste toda la tarde ¿verdad? (el pecoso simplemente asintió), ¿pudiste descansar bien? (el pecoso volvío a asentir). Me alegro, tu comida sigue en la mecha de noche, ¿quieres que la caliente para que puedas comerla o gustas que te traiga algo más ligero? Debes comer algo, solamente tienes el desayuno en tu estómago.
Por alguna extraña razón tenía hambre, y presisamente se le antojaba la comida que había traido Shoto para él, aunque no supiera qué era debido a que estaba tapada para que el olor de la comida no quedara impregnado en la habitación.
Izuku: (tímido) ¿podría calentarme la comida que me trajo Todoroki? (Era la primera vez en mucho tiempo que pedían su opinión y que él la daba, estaba muy nervioso, era seguro que su profesor no le haría caso, ¿quién le tomaría importancia a lo que dijera una escoria como él?)
Aizawa: (sonríe) por supuesto (toma la bandeja de la mesita de noche) ire a la cocina a calentarla, volvere en unos minutos, trata de mantenerte despierto para que cenes (se va de la habitación).
Cuando el peliverde se quedo solo, se volteo dirigiendo su vista hacia el techo y comenzo a pensar, a reflexionar en las cosas a su alrededor, estaba tan confundido eh intrigado, sentía su estomágo revuelto, un huracán de emociones en su interior, ese día había sido tan extraño. Primero que nada el escuchar a Shoto decir su nombre, fue algo tan hermoso, el como se oía su nombre de la voz de Shoto fue como un valzamo para su corazón, una gota de vida para su deztrozada alma, desearía el poder escuchar su nombre ser pronunciado más seguido por Shoto, estaba seguro que sería todo lo que necesitaría para sentirse bien.
Y ese besito que le dio en su mejilla, espanto por completo a las pesadillas, durmió como no había dormido en mucho tiempo, han pasado tantos años que honestamente no recuerda cuando fue la ultima vez que durmió tan bien, la ultima vez en la que su descanso estuvo lleno de paz, sintió demasiada nostalgia, podría decir que su sueño fue similar a los tiempos en los que su madre lo arrullaba y se aseguraba de alejar las pesadillas para que tuviera un excelente descanso.
Y junto a todo eso tenía hambre, cosa que hace tiempo perdió, encerio que quería comer pero su estomágo no quería ingerir nada, pero curiosamente ahora si quiere ingerir por completo la comida que le llevo Shoto, pero solamente esa comida.
Quería llorar de felicidad, hace tiempo que no se sentía así, sus ganas de vivir y salir adelante volvían, pero no sabía si estaba listo para avanzar, esta aterrado, no soportaría salir del pozo en el que estaba, solo para que lo volvierán a aventar y caer de bruces en el duro suelo, que la vida le demostrara una vez más que el no merecía felicidad, que su lugar era en el lodo, que debía morir para ir al infierno y así expirar sus pecados, aunque no sabe cuales son.
Pero lo intentará una vez más, una última vez, dara lo mejor de si mismo, lo más que le sea posible, aunque sean pasos pequeños. Como una vez se lo dijo su madre cuando le dijo que ya no podía más.
???: no te rindas, sigue adelante, nunca dejes de luchar, puede que tus pasos sean pequeños, pero seran significativos.
Continuara...
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Querido Diario (El diario de Izuku Midoriya)
OverigEs bonito tener un diario, se convierte en tu santuario donde puedes desahogar todo lo que te agobia. Puedes decir todo lo que se sientes y todo lo que piensas hasta tus más profundos secretos. ¿Qué podría pasar si ese santuario cae en unas manos qu...