Fue Un Placer Conocerte

Capítulo Setenta y Dos - Resentimiento Pt.1

Jackson fue atendido en emergencias, nuevamente, su pierna y su herida en el vientre estaban abriéndose, que por descuido estaba sangrando abundantemente, Sei por otro lado en el mismo hospital, tanto como su imagen, como su ser, en sí era débil, su salud tan fácil de romper le estaba jugando en contra ahora. Charlotte seguía en la escena, llorando desconsoladamente, cuando apareció Jihyun por atrás corriendo hacia ella, la abrazo tratando calmarla, le habían informado de lo que había pasado, sus amigos estaban en el hospital por el incidente de ahora, mientras que ella estaba todavía ahí, por más que la abrazara sabía que no podía hacer mucho, el cariño que su esposa le tenía a Emma era terriblemente grande, no iba a sufrir solo unos días, él era consciente que se iría pronto, también sentía un empatía grande por la esposa de su amigo, la cual hacía que tanto como su mejor amigo y su esposa sonrían siempre como si no hubiera un mañana, eran felices todos, se sentía mal por ella, también era una amiga que le aconsejó como perder el miedo antes de irse. Hyun comenzó a llorar en silencio sin hacer ningún tipo de ruido, aferrándose fuertemente a su esposa, abrazándola sin intención de soltarla.

Por otro lado, volviendo a hospital. Sei estaba despierto, solo fue un gran shock que su mente no pudo asimilar, esta con medicamentos, nada grave físicamente. Jackson quien no dejaba de llorar y lamentarse, estaba siendo atendido cerca, cosiendo su herida con anestesia local, su pierna no la tenía que mover mucho, mínimo dos días. Mientras que él era ruidoso, Sei estaba en completo silencio llorando, tratando de asimilar lo que estaba pasando, había vuelto solo hace unas horas y había visto a Emma cubierta de sangre sin que haga ningún movimiento, la escena se repetía mil veces en su cabeza, un sonido tan bajo que hacía al pensar que ella estaba muerta, se tapó la boca para tratar ser lo más silencioso posible.

Mientras más veces se repetía la escena, negaba con su cabeza, trataba de alejar el ruido de sus pensamientos, tapándose las orejas con sus manos.

El sabía que iban a casarse pero no sabía que ya se habían casado, ni mucho menos sabía que ella estaba embarazada, el hecho de que se enterara de eso apenas llegó... la verdad le dolió bastante, todavía no podía olvidar sus sentimientos, pero saber que ella ya no estaba aquí era algo que no sabía si su mente podría soportar, -como pasó todo esto?, no puede estar...-, se levantó del lugar donde estaba y salió a buscar por todo el hospital donde estaba aquella mujer que le cambió la vida y que si dejara su existencia, la destruiría completamente.

Se había autoconvencido que lo que había visto, no era correcto, no era ella, se negaba.

Caminando por los pasillos y salas del hospital, hasta llegar a emergencias donde preguntaba constantemente por ella, sin ninguna respuesta, pasando por el lado de Jackson ignorándolo completamente por seguirla buscando, en vano.

Al salir ambos del hospital, Jihyun y Charlotte fueron por ellos, en el viaje de vuelta ninguno habló del tema, el silencio perturbado por pequeños sonidos de llantos ahogados de Charlotte y Jackson, Sei no sabía como reaccionar ante todo, Jihyun manejaba de camino a casa de Jackson, estaba tenso y con algunos rastros en sus ojos de haber llorado, era más de media noche, mucho más, la madrugada estaba presente pero el amanecer aún lejos, las calles estaban tranquilas, al llegar a casa de este no solo bajo Jackson sino también Sei, quien insistió en quedarse ahí, Charlotte y Jihyun se fueron.
Al entrar a su casa, la señora Kim quien se había quedado esperando noticias sobre lo sucedido, al ver llorando desesperadamente a Jackson, le entró un escalofrío terrible, preguntándole que había sucedido mientras estaba al borde de las lágrimas, se había encariñado con la chica, quien le ayudaba y sonreía siempre, tan amable que ahora...

-Emma... no-, su garganta dolía, su voz quebrada, -...no estará más-, al decir eso cayó al piso de la sala principal, la señora Kim quien no soportó lo noticia fue hacia afuera para tratar de pensar lo que había escuchado, al salir, en un intercambio de caminos, había entrado Sei completamente molesto, en sus ojos ardía un fuego inextinguible, su mirada y cuerpo llenos de rabia, su cara llena de lagrimas, la impotencia que sentía por todo, nadie le había dicho lo que había estado sucediendo, la furia al enterarse que al volver la persona que más apreciaba estaba... no, que ahora ya no estaba... , destruía todos los límites de sus sentimientos, entre rabia y tristeza era una lucha constante, al acercarse a su amigo, lo golpeó sin pensarlo, agarrándolo del cuello de la camisa, mientras ambos seguían llorando de diferente manera.

-Me prometiste que la ibas a cuidar-, después de tirarlo hacia el piso.

-Yo.. no pude-, su voz quebrada y llanto incesable era notorio.

-DIJISTE QUE ELLA ERA TODO PARA TÍ-, respiró hondo antes de volver a gritar, temblaba de la rabia y su rostro lleno de resentimiento aún así caían lágrimas.

-COMO ES POSIBLE QUE AHORA ELLA ESTE M-, un golpe en el corazón lo detuvo, mientras más lágrimas brotaban de él, no se detuvo, veía a su amigo quizás sufriendo más de lo que él se imaginaba.

-Sei... yo-, interrumpió el mencionado.

-SOLO DEBÍAS CUIDARLA, NO TENÍAS QUE HACER NADA MÁS, ELLA ERA FELIZ CONTIGO... COMO PUDISTE DEJARLA SOLA-, lo volvió a golpear en el rostro, mientras su llanto silencioso se volvía más audible.

-CUANDO TERMINAMOS, SENTÍ QUE ME DESTRUÍA PERO AÚN ASÍ SIEMPRE ESTUVE PARA ELLA, SIEMPRE CORRÍ HACIA DONDE ESTABA-, su respiración comenzó a ser desastrosa.

-DIJISTE QUE SIEMPRE ESTARÍAS PARA ELLA, DONDE MIERDA ESTUVISTE PARA QUE ELLA ACABARA ASÍ-.

Cada palabra, cada hecho que decía, hacía que recordara pequeñas escenas, donde él se encontraba con ella, en su breve relación y en sus tiempos compartidos, suficiente para marcarlo.