In Your Arms (Miguel Diaz/Cobra kai)

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El resto del fin de semana pasó con normalidad, Mía y Miguel no habían vuelto a tocar el tema de su plática del sábado, y mucho menos de... de ese beso. Incomodidad, arrepentimiento, quien sabe qué cosas turbaban a los dos chicos que, definitivamente no querían siquiera mencionar lo que había sucedido.
Mía había estado pensando en todo eso el domingo, que a duras penas se habían visto, pues generalmente para ella ese día constaba de ir a la iglesia por la mañana, y pasar el día haciendo los quehaceres que podían esperar el transcurso de la semana. Si, había visto a Miguel, pues habían coincidido en el cuarto de lavado, pero parecía que ambos estaban evadiendo ese tema.
Era un tanto incómodo. Aún así, Hawtorne parecía convencida de que, después de todo, parecía que sus sentimientos estaban siendo correspondidos, ya solo había algo pendiente; aclararle a Eli lo que fuera que él sintiera y, le dijera que, solo quería su amistad, antes de que él empezara a armar conjeturas y sacar conclusiones que solo acabarían por herirlo.

Para el lunes, Mía había decidido que haría caso a las palabras de su vecino, que ahora también era el sensei de su amigo y crush aparentemente correspondido. Tomar cartas en el asunto y, golpear primero con él.
Como era costumbre, solo le "echaría más ganas" a su look, resaltando algunos detalles, pero nada extraordinario.

Los 4 amigos se reunieron en sus lockers antes de entrar a clases para platicar un poco y, sacar su estrés o compartirse las tareas que les hubieran faltado.
- vaya! Hola, chicos... ya no los vi el viernes, qué pasó?
- Bestie, nosotros...- empezaba Demetri, nervioso
- veamos, Eli; como a buen cirujano, te salió una emergencia que solo tú podías atender y por eso saliste corriendo; y tu, bestie? Un conjuro que salió mal o... porqué el.hechicero desapareció?
- hechicero? Mía, estaba disfrazado de...
- te estoy diciendo brujito por joder, sé que eras un nigromante, Demetri 🙄 a lo que voy es que ustedes dos son unos miedosos y unos abandonadores 😐 qué tal que nos pasaba algo más y ustedes? Vaya, con esos amigos...
- Mía, ya 🥺 perdón, si? Pensé que irías tras de nosotros y, no quería que Brucks o... - se disculpaba Eli, apenado con su inalcanzable. Él sabía que Mía no los había alcanzado porque en ese momento Miguel estaba siendo su prioridad, y era demasiado obvio el porqué. Por mucho que le doliera, él no figuraría en el corazón de ella a ese punto ni en chiste.
- perdóname Mía 🥺😪💔 de verdad... te compro un helado para que ya no sigas enojada, o.. bueno, si quie...
- en verdad, Eli... no hace falta. Estamos bien, ok? Solo... debes ser más valiente- le explicó ella, que seguía de pie frente al chico, para pasar dulcemente su mano por el rostro del ojiazul, llevándose consigo una lágrima que había salido de ellos, y encontrando sus miradas. Algo quizá levemente esperanzador para el tímido Moskowitz.
- Mía, no fue miedo. Fue mera supervivencia. Y tú lo sabes, bestie! Dos frágiles como nosotros no dursriamos ni 10 minutos con esos sujetos cerca y créeme, depender de un tercero y que me salve como Hit girl hacia con Kick ass; considerando que parece ser nuestro caso, y que indudablemente tú serias Hit girl... así que, por qué debería de preocuparme?- añadió Demetri, despreocupado
- bestie, estás diciéndome que...
- no hace falta que discutan, chicos. Ya no importa... como quiera que fuera, ya pasó.- los interrumpió Miguel- de todos modos, no creo vuelva a pasar. Mamá me castigó el karate, y...
- entonces no hablaste con ella? 🙄🤦🏽‍♀️- reclamó Mía, regañando a Miguel
- traté pero... nena, somos latinos. Sabes cómo funcionan las mamás de esos lares. Mínimo me hubiera dicho un "ya veremos", aunque sepamos que signifiqué un "no" pero...
- pero...?
- aún tiene remedio, sabes? A ver, en tu narco pasado debes haber hecho alguna cosa y armado toda una coartada para no ser descubierta, entonces, estaba pensando en que
- es demasiado obvio, Díaz. Hsta yo lo sé. Mismos días y horarios, creeme; con ese ingenio no hubieras durado vivo ni el reclutamiento 🙄🙄- explicó Mía como si fuera algo demasiado obvio.
- era una idea, genio. No que fuera a hacerlo.
- seamos coherentes, Miggy...