Larga vida a la Reina - Fanfic Kirinmaru Towa - UA

Límite

Nota de autor: Disculpas. Por no haber publicado esta semana con la asiduidad acostumbrada. Sucedió que tuve dos familiares con complicaciones graves de salud y uno de ellos nos dejó. Eso drenó mis ánimos, inspiración, energías y tiempo. Pero hoy es un día especial (cofmicumpleañoscof) así que la publicación pretende ser también especial y compensadora del sufrimiento, tal y como fue planeado para el espíritu de Larga Vida a la Reina desde un principio.

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Límite

Casi sin un control propio, la hoja iluminada se movió en modo transversal atacando el cuerpo del Kirin, esto detuvo el movimiento que el mismo había hecho desde arriba con la intención de cortarlo, la dureza de la bajada de la katana fue suavizada, pero cortó las junturas de una de las partes de la hombrera derecha de la armadura de Touga, la cual, a pesar de verse parecida a la que usó en vida, no tenía la misma resistencia, ya que Zero no había escogido materiales resistentes de origen totalmente youkai, sino más bien unos que pudiera moldear rápido.

Ignorando el corte que desgarró parte del peto de su armadura, desde la nueva posición inferior, Kirinmaru intentó cortarlo transversalmente, conforme de haber encontrado un punto débil, pero un rápido movimiento defensivo de Touga detuvo el avance de su espada antes de que pudiera tocarlo siquiera. El pulso de ambos tembló a causa de la fuerza aplicada desde ambas direcciones.

Ambas hojas, real y de energía, comenzaron a chocar con la misma violencia que Tessaiga lo hiciera momentos atrás: desde arriba y abajo, de frente a frente, de un lado a otro, desde vertical a horizontal, desde abajo arriba. Cerca de las cabezas de los contrincantes, cerca de sus pechos, cerca de sus hombros, incluso de punta, intentando apuñalar al contrario, técnica que era esquivada dada la rapidez de uno y de otro.

─No te rendirás en obtener estas tierras a pesar de que tus brazos huelen completamente a sangre ─dijo Touga contraatacando con gran velocidad.

Kirinmaru maldijo para sus adentros el buen olfato de su antiguo rival, esas eran las heridas inhabilitantes que le había causado Hikyu en la batalla previa, valiéndose de palabras de distracción. Como Kirin que era, no pensaba hacer caso a estas heridas y tampoco escuchar nada, sino limitarse a atacar casi ciegamente, porque cualquier distracción nueva podría ser fatal. Las heridas estaban a medio camino de sanarse, pero a diferencia de los inuyoukai que sanaban en un día o menos, él necesitaba al menos dos, no estaba dejando descansar a sus brazos y por eso sus movimientos se habían vuelto más lentos que en batallas normales. Y mientras más se alargaba la batalla, más lento se volvía, al contrario que Touga que parecía absorberlo y aumentar su velocidad.

Absorber energía era una técnica muy usual de este Daiyoukai incluso en batallas antiguas, pero al sentir dicho impacto, producido cada vez que chocaban hojas, él no podía más que pensar en Towa y sus técnicas ¿habría muerto rápido? ¿por el contrario, habría sido doloroso? ¿fue mientras era humana? ¿o presentó más batalla en su forma de hanyou? No tenía tiempo de preguntar a su hermana, todo lo que podía hacer era blandir su espada, rodeada cada vez más de un aura púrpura, a cada instante mayor, pues con su youki intentaba balancear su disminución de fuerza física.

Recordaba que el inuyoukai era rápido. Pero no así de rápido, su velocidad dejaba en ridículo incluso a Sesshoumaru, quien había entrenado arduamente durante los últimos dos siglos. Se planteó si eso era efecto de la necromancia, pero se dio cuenta de que se trataba de algo diferente.

─No es eso. Estás valiéndote de las habilidades de guerra aprendidas por ella durante los viajes. De alguna manera éstas te están potenciando.

─No entiendo de qué hablas ¿estás echando la culpa de tu disminución en habilidades a hechizos inexistentes? ─le lanzó un corte limpio cerca del cuello.