Capítulo 34

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No podía distinguir bien que pensaba o que sentía entre ellos dos, todo para ella eran sensaciones. Al final pensando toda su vida había sido una chica buena que siempre hacia caso de lo que su madre la decía y más después de que su padre las dejara a las dos, su vida dio un giro, pero siguió cumpliendo con el hecho de seguir estudiando y respetando a su madre, aunque a veces se metería en líos.

Selene salió por un momento de su ensimismamiento, se puso un segundo apoyada en la pared, le había jodido lo que le había dicho Jasón, subió su mirada encontrándose con la suya.

-Soy un gilipollas – hablo el acercándose a ella de nuevo.

-Lo eres deberías de meterte la lengua por el culo – Selene le señalo con su dedo en su pecho.

-Gracias por el piropo – sonrió arrogante.

-No lo era – endureció su rostro demostrándole que estaba enfadada de verdad con él.

-Selene - Jasón se acercó a su oído, haciendo que su voz sonara más grave que otras veces, de esa manera que solía ponerla nerviosa – sabes seré un capullo un gilipollas un subnormal, pero te gusta y voy a meterme entre tus piernas

-¿Qué? - Selene pensó que no le había entendido hasta que le miro y vio la expresión de, el mirándola travieso dejando en claro que lo decía enserio.

-No – le contesto.

-No, acaso es una pregunta - Jasón trato de sonar lo más serio posible, porque le encantaba jugar con ella así, pero la cara de Selene le hacía demasiada gracia. - Abre esas lindas piernas hermanita

Selene no pudo evitar aguantarse la risa y termino riéndose por la situación y lo absurdo que la parecía.

-Estás loco – le dijo poniendo su mano sobre su pecho para que no se acercara más.

-Me vuelves loco igualmente – Jason la echo una mirada de arriba abajo como si estuviera solo en ropa interior.

-¿Así vestida? - alzo una ceja Selene.

-Vestida así, en ropa interior, desnuda, con una caja en tu cabeza me gustas tal y como eres - Jasón con un rápido movimiento la atrajo hacia el causando que ella soltase un jadeo por la impresión.

-Jamás en vida había visto una chica tan hermosa como tu Selene, no sabes lo que me has causado en tan poco tiempo – dijo levantando con su mano libre su barbilla para verla mejor.

-Lo es – contesto ella tragando duro mientras que miraba esos ojos que la llevaban a la perdición, podría ser un completo imbécil, pero era el imbécil que la volvía loca.

-Joder Selene, se me está poniendo como una roca - Jasón le confeso, su móvil vibro en su bolsillo acabo ignorándolo.

-Creo que lo que vibra es mi corazón - Selene toco su pecho sintiendo como latía rápido.

Selene le miro a los ojos apretando sus labios para no reírse, hizo un ademan de apartarse para que Jasón pudiera contestar sabía perfectamente que era su móvil el que estaba vibrando.

Se acerco a ella hasta quedar a pocos centímetros y la miro a los ojos, metió con cuidado los dedos por debajo de la camiseta, hizo que se deslizara por los hombros de Selene muy lentamente.

Hasta llegar a su clavícula, sus acaricias lentas envolvían a Selene y la hacía que su cuerpo se pusiera caliente, ella levanto una ceja, atónita sin creerse todavía que estuviera a solas con él y estuviera pasando esto, pero no se movía ni hacia el amago de apartarse.

-Ven conmigo - Jasón le hablo con ternura, cuando había entrado un momento para después haber salido con unas mantas.

-¿Te importa? - hizo una seña con que iba a tirar una manta grande al suelo cerca de la piscina, Selene se cruzó de brazos por un momento asintiendo, dejo libre sus brazos de nuevo sentía algo de nervios.

Un Nuevo ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora