Capítulo 63

251 36 0
                                    

Eros estaba insistiendo todo el rato en llevarme al hospital, le había repetido mil veces que no hacía falta ya podía salir a la calle tranquila, no había ningún peligro como antes, además de que pensaba ir al médico por las molestias.

-Como me vuelvas a decir que me llevas al hospital te tragas mi puño - le amenacé en tono divertida, él se rio al igual que yo.

-Está bien fiera – levanto las manos en modo defensa.

-Me acompañas la próxima vez, ¿vale? - su cara se ilumino aún más mostrando otra sonrisa, asintiendo.

-Selene, ¿sigues con los dolores? - Maica me pregunta apartándome de Eros un poco lejos para que no escuchara.

-Si, ¿Por qué? - la dije sin entender por dónde quería ir.

-Al principio me pareció una locura que acabaras enamorada de tu hermanastro y que follaraís a escondidas, pero luego dije contra el amor no se puede luchar – puse mis manos sobre mi cintura.

-Maica, al grano, ¿A dónde quieres llegar? - la dije con una cara de pocos amigos.

-¿Vosotros habéis usado protección? - cuando me hace esa pregunta rompo a reírme.

-Pues claro que si boba – al ver su cara seria, vuelvo a preguntar. - ¿Qué pasa?

-¿Cuándo fue la última vez? - ya me estaba empezando a asustar.

-Antes de que pasara lo de la tortura de Culebra – la conteste después de haber estado pensando unos segundos, la miro su cara es de absoluto horror, cuando ella me mira así es porque pasa algo malo.

-¿Maica? Maica coño dime ya que se pasa por esta cabeza – la agite al ver que no reaccionaba para después darla en su cabeza con un dedo mío.

-Puedes estar embarazada – me paro en seco, quedándome completamente blanca.

-¿Qué? - conteste sin creerme que dijera eso.

-Selene, puede ser que si o no, solo hay una manera de salir de dudas – me cogió del brazo.

-Eso no puede ser Maica, en todo momento usamos condón – la, contesto rápido.

-¿Y si por alguna razón se pinchó o algo? - contesta nerviosa.

-No, eso es imposible – dije sin más, los dolores tendrían que ser por otra cosa estoy segura, todo este tiempo he estado pasando por momentos estresantes y agobiantes.

-Tienes que comprar una prueba de embarazo así saldremos de dudas – al ver que no la contesto sigue hablando. - ¿Vas al hospital, ¿no? Te acompaño y nos pasamos por una farmacia - asentí no muy segura, pero tampoco era malo salir de dudas.

-Está bien, tenía pensando pasarme por la cárcel donde esta Jasón, pero mejor lo dejare para mañana - Maica me mira haciendo una mueca, la observo y veo en sus ojos que quiere decirme algo, pero se calla.

-¿Me tienes que decir algo? - la digo al ver sus gestos.

-No, ¿Por qué? - sé que me está ocultando algo.

-¿Acaso paso algo que yo no sé? - insistí.

-No, si no te lo hubiera dicho – lo dejo estar, pero sé que me está ocultando algo y no me lo dice por el simple hecho de que no podrá, le abra contado algo Eros supongo.

-Está bien, pues vamos a coger un taxi - salimos de la casa, no sin antes Maica gritar como una loca a Eros de que nos íbamos, se dieron un pequeño beso, Maica se dispuso a llamar a un taxi que pasaba por la calle, tener que pisar la calle sin mirar a todas las direcciones me causaba una tranquilidad enorme, es como si me hubieran cambiado de cuerpo y fuese otra, no tenía por qué llevar ningún cuchillo ni arma encima.

Un Nuevo ComienzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora