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Ben corría por el jardín con el sombrero de Vaquero que Matt había comprado para él por su cumpleaños, el mayor de los Rogers cumplía siete años y para hacer que su ánimo subiera después de todo lo que habían pasado, Lisa y james habían hecho un pastel para el pequeño junto a las  galletas de malvavisco que amaba, Foggy y Sam habían contribuido comprando juguetes para él y para la Pequeña Ana para que no se sintiera excluida.

A pesar de ser solo una pequeña reunión con adultos, un pastel de chocolate y regalos mal envueltos con periódico, Ben no dejo de sonreír todo el día, incluso aún cuando sus pocos invitados se fueron en el atardecer.

Mientras su novio limpiaba la cocina, Lisa veía las fotos que se habían tomado con el celular de James, mientras escuchaba a los pequeños jugar en el jardín. Ella había intentado ayudarlo a recoger todo, pero él se había negado obligándole a sentarse en el comedor para que descansará su herida, que últimamente había comenzado a molestarle un poco.

— ¿James?

— Si?— Pregunto él mientras juntaba el papel de colores que fue la envoltura de los regalos de Ben.

— ¿Conociste a Spiderman?

El hombre alzó la vista confundido, observo que su amada le veía expectante, suspiro, cruzo sus brazos recargándose en la encimera y asintió no muy orgulloso.

— Solo lo vi dos veces, no fue algo lindo a decir verdad.

—¿ Viste su rostro?— Pregunto curiosa acercándose a él queriendo saberlo todo, Spiderman era una persona que siempre le intrigó desde que apareció en las noticias nacionales años atrás.

— Puede ser. ¿Por qué?

— Solo estoy intrigada, es todo.

— ¿Por que la pregunta tan repentina?

— Fuiste un vengador por un tiempo, debió ser divertido.

— No mucho en realidad.— Suspiro y Lisa se acercó a él tomando su mano.— Es demasiado trabajo, todo empeoró con las leyes nuevas.

— Si tuvieras la oportunidad,¿volverías a las misiones?

— Si antes de conocerte me hubiera llegado la oportunidad, aceptaría sin dudarlo, pero ahora contigo en mi vida, ni loco dejaría lo que tengo por una misión.

Lisa sintió su corazón alegrarse y se puso de puntillas para besarle con dulzura.

— Eres un encanto.

— Solo contigo, primor.— le guiño un ojo divertido volviendo a besarla.

— Iugh!! ¡Consíganse una habitación!— Chillo Ben haciendo que ambos se separaran estupefactos.

— ¿Donde aprendiste eso, amigo?— James pregunto confundido, en lo que a él respectaba, desde que Ben comenzó con su faceta de repetir todo lo que escuchaba, se había limitado en su vocabulario.

— El tío Sam lo dijo una vez.

James apretó la mandíbula y Lisa río entre dientes.

— Eso no se repite Ben, es para mayores.— Lisa dijo divertida, Ben asintió viéndose asustado por haber dicho algo indebido.

— Lo siento, mamá Lisa!

Después Ben siguió jugando con sus juguetes nuevos, desconectándose del mundo junto a su curiosa hermana. 

— Voy a matar a Sam cuando lo vea.— Exclamó James entre dientes. Lisa tomo su rostro y beso su barbilla.

— Que Ben no te vea hacerlo.— Contestó divertida alejándose de él para jugar con Ana en el suelo.

Hasta lo ImposibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora