Harry Potter resurrección

Hogsmeade

Hermione.   

Estaba en el gran Comedor mientras hablaban del diario de hoy.

- Miren, han visto a Sirius Black en las cercanías - Dijo una voz nerviosa que no me moleste en identificar.

 - ¿Crean que venga a Hogwarts? - Pregunto alguien más.

- Lo dudo, están los dementores - Replicó.

- ¿Y de que sirven? Ya los evitó una vez - Dijo otro haciendo que el ambiente se tensara.

Completamente ajeno a la conversación el chico de pelo blanco dormía con la cabeza apoyada en mi hombro.

Murmuraba sobre cosas como... Wikipedia o de Apple.

- Herms - Murmuró mientras que su cara se volvía un poco roja.

***
Ya era de noche y estábamos juntos, Siendos sinceros no era difícil encontrar salas o habitaciones privadas en las que podíamos pasar nuestro tiempo juntos.

El chico dormido con la cabeza apoyada en la mesa.

- Mitocondria... aneurisma... tumor... - Decía en sus sueños mientras le acariciaba la cabeza.

Sus gestos eran muy tiernos.

- Alisa - Dijo cuando sus labios temblaron.

Le golpe el rostro.

Se levantó aturdido.

- ¡Me declaró inocente! - Dije nervioso.

- ¿Quién es Alisa? - Pregunté con celos.

- Mi hermanita - Dijo el tranquilamente aunque solo por decir si nombre el blanco de sus espaldas de volvió un rosa exagerado - Era una niña chiquita y linda - Dijo volviéndose lúgubre.

- Lo siento - Dije al percatarme de cono su blanco se volvía levemente gris.

- Nunca está de más recordar a nuestros muertos - Respondió el sonriendo - Y dejando eso de lado aún no hice la tarea - Dijo con pesadez.

Ese es el motivo principal de su reunión... hacer tarea... claro que casi nunca la hacían juntos, las distracciones eran inevitables por lo que hacemos por separado.

El querer darle su tarea fue inevitable pero solo fue un segundo antes de que esa idea muriera.

Si hace la tarea que la haga el.

El miro su mano derecha y me acarició la cabeza.

- Vamos a la biblioteca - Dijo luego de unos minutos.

***

Por alguna razón los pasillos del colegio eran fríos y oscuros.

Adán tarareaba una canción irreconocible.

- A kilómetros estamos conectando - Dijo ganándose un golpe en la nuca.

- ¿Con quien conectas? - Le pregunté

- Es la letra - Dijo - Tus celos pueden ser muy molestos - Se quejó.

Sus palabras cayeron sobre mi.

Molestos.

Me sentí horrible hasta que el volvió a hablar.

- Pero te hace mucho más tierna - Dijo besándome.

Me sonroje y quería golpearlo por confundirme pero aún así me encantaron sus palabras.

***

Adán.