Traición

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Estaba tranquilamente sentado viendo cómo Harriet daba las instrucciones a los niños.

Finalmente la chica se acercó a mí y me miro con calma.

- ¿Enserio no puedo participar? - Le pregunté a lo que ella me miro con escepticismo.

- Claro, si hay algo que no sabes preguntamelo - Dijo con una mirada que dejaba claro que pensaba.

La niña obviamente lo decía con un tono sarcástica ya que no tenía intención de responder mis preguntas.

Sonreí levemente y suspire.

- ¿Como eres tan linda? - Murmuré con una sonrisa que la hizo sonrojar.

- Tonto - Murmuró con vergüenza dándome un pequeño golpe en mi costado.

Pero de la nada una fuerte sacudida alertó a todos los presentes, una pared de las tantas comenzó a agrietarse mientras los chicos buscaban ansiosos una salida.

Pero sin mucha resistencia la pared estalló con un <bombarda máxima> que me irritó al instante.

Me levanté y suspire mientras los alumnos que formaban parte de la brigada inquisidora desarmara a los alumnos de Harriet.

Poco después Umbridge entro en la sala y miro a Harriet con una sonrisa que parecía burlarse de ella.

***

Harriet.                 

Mis ojos se enfocaron en la que identifique como la delatora del grupo y la memorice sonriendo u sientiendome un poco… cambiada por Adán.

Sea por error o por decisión propia una falla así no puede ser admitida, esa falla me dejó humillada enfrente de Adán así que debería ser corregida de manera similar.

La muerte era el único castigo posible.

Mis manos se cerraron con fuerza y mire a Adán que parecía aburrido, sus ojos rojos miraban a el director frente a él.

- ¿Tiene alguna explicación para esto director? - Pregunto Umbridge rodeada por unos 5 aurores como sus guardaespaldas, sin contar a su secretario quién era el hermano de Ron, Percy.

En el banco de Dumbledore había una lista de los miembros del Ejército de Dumbledore.

- ¿Explicación?¿Eso es necesario? Allí dice el ejército de Dumbledore, ¿que hay que explicar? - Pregunto el hombre tranquilo.

Umbridge parecía mucho más feliz de lo usual y hablo tratando de ocultar esa felicidad.

- Albus Percival Wulfric Brian Dumbledore, bajo el cargo de insurrección y de utilizar su posición para fomentar la rebeldía de los jóvenes, no me queda más opción que pedirle que nos acompañe al ministerio donde será procesado y su caso será presentado - Dijo la mujer feliz.

Siendo sincera y dejando un poco de lado mis intereses me daba un poco de pena que el viejo sufriera por mis actos, claro que lo valía totalmente. O sea, Adán me felicitó por mi idea, eso valía más que la vida de cientos.

Pero un agregado en sus palabras volvió el ambiente peligrosamente denso.

- Y Adán Kedward, por la sospecha de complicidad en el acto será sometido a un interrogatorio en el ministerio - Declaró borrando la sonrisa en el rostro de mi amante.

- ¿Cómplice? - Pregunto el chico con ojos agudos y molestos.

- Claro, usted es claramente la mente maestra instalada entre los estudiantes, la chica Potter es fácil de manipular debido a su ego desmedido y usted seguramente vio eso - Aseguró la mujer haciéndome enfadar.

¿Mi ego desmedido?

Pero por primera vez en nuestra relación vi una sonrisa de Adán que no había visto nunca.

- Claro que tiene un ego desmedido, alguien con un ego débil no estaría a mi lado - Murmuró el mientras poco a poco una pequeñas llamas se iban encendiendo alrededor de todo su cuerpo.

El parecía un poco molesto cuando una llama del tamaño del fósforo salió disparada y atravesó a uno de los aurores.

- Pero no dejaría que alguien criticara mis cosas - Murmuró fríamente mientras el auror era rápidamente devorado por las llamas - Sobre todo si es de mis cosas favoritas - Susurro aún más suave.

Pero como si quisiera que así fuera, oí lo que el dijo, y tal fue mi reacción que el sonrió mirándome con ternura en el.

Aunque me sentí un poco molesta por qué me llamo "cosa" pero aún así me sentí un poco débil a el. 

Pero paso algo que no me espere.

Como si mi suerte se hubiera acabado poco a poco el cuerpo de Adán se deshizo en cenizas.

"¿Eh?¿El maldito no siquiera vino con su cuerpo real?" pensé con tanta molestia que jure lo mataría si lo volvía a ver.

Había escuchado de Hermione que el podía hacer esas cosas, pero no pensé que usaría trucos así en momentos tan importantes.

- ¿Donde diablos se metió ahora? - Pregunté en un murmuró buscándolo con la mirada pero no lo encontré.

Fue una sensación rara, nunca había sentido que Adán no estaba a mi vista, siempre era él quien estaba dispuesto y venía a mi cuando lo necesitaba, era como si el fuera mi mascota que siempre vendría hacia mi pero ahora…

Me sentía… como si fuera un bebé que dejó de usar el andador y comenzó a caminar solo.

Ahora solo queda dar bien esos pasos para no avergonzarlo.

Suspire y mire a Dumbledore que no tardó en desaparecer con una gran explosión.

***

Adán.              

Mis ojos estaban quietos en el cielo mientras pensaba con calma.

Nunca pensé que mi "yo" sería tan fácil de destruir, incluso cuando el viejo lo atacó por la espalda pensé que la ceniza sería fácil de mantener.

Suspire un poco molesto y me levanté del lugar donde estaba sentado. Pensé un poco en que debía hacer ahora con tal de que todo saliera correctamente.

No faltaría mucho para que Harriet y Mione se marcharán al ministerio, Sirius moriría allí, mi pequeña estaría triste y a su vez Hermione se preocuparía por su amiga. Como conclusión, no tengo que dejar que pase nada malo allí porque sea lo que sea alguna de mis niñas se pondrá triste.

Finalmente suspire y con molestia me apareci.

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