La Suerte Líquida

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Hermione se sentó a mi lado cuando llegamos a la clase de pociones y se apoyo en mi mientras esperábamos a que los demás llegarán.

Tonteabamos, incluso cuando el salón estaba casi lleno, pero obviamente nos detuvimos cuando llegó el profesor Slughorn.

- Hola jóvenes - Dijo el profe mientras entraba en el aula con una sonrisa al barrer el aula con la mirada.

El profesor no tardó mucho más en comenzar la clase.

- Por favor parense y acérquense - Indico lo que no tardamos en hacer - ¿Alguna puede identificar estás pociones? - Pregunto el profesor a lo que la mayoría de alumnos trato de sentir el aroma de la poción.

Oli levemente y sentí el profundo aroma de libros, vainilla y tren.

Mire de reojo a Hermione y suspire.

¿A eso huele mi amortentia?

Pero luego mire a las demás pociones entendiendo cual era cada cual.

- Está es amortentia - Señale.

El profesor Slughorn asintió alegre.

- ¿Y sus efectos? - Pregunté a lo que recordé.

- Es un filtro de amor muy poderoso, claro que los efectos son más similares a la obsesión que al amor - Informe con calma.

- Correcto señor Kedward - Dijo señalándome - 5 puntos para Gryffindor - Agrego.

Pero de repente una persona entro apurada y llego un poco tarde.

- Lo siento profesor - Dijo la chica de pelo azabache disculpándose mientras caminaba a una esquina de la habitación y tomaba un libro a falta del suyo.

- No se preocupe señorita Potter - Sonrió el profesor.

Sonreí suavemente y mire a Hermione que hablo con seriedad.

- Está es veritaserum - Dije con indiferencia - Una poción sin olor ni sabor que obliga al que lo toma a decir la verdad, basran 3 gotas - Murmuró dándome una mirada rara.

- Perfecto señorita Granger… - Trato de decir

- Y esta es poción multijugos - Dijo mirandola con cierto disgusto aunque mi día mejoro cuando recordé el segundo año.

- ¡Excelente señorita Granger!¡10 puntos para Gryffindor! - Felicito a lo que Mione me miro como si me hubiera vencido en un duelo.

Sonreí ante su ternura.

- ¿Y ese de allí profesor? - Pregunto una alumna que por fin quito su atención de la amortentia.

- Bien… - Murmuró caminando a lado de una pequeña botellita - Es el Felix Felicis, también llamada la suerte líquida.

Todos parecieron emocionados por el nombre que no dejo mucho a la imaginación.

- Esta poción los hará lograr todo lo que se propongan con exito. No se tiene que abusar tomándolo, ya que su exceso provoca vértigo, imprudencia y un peligroso exceso de confianza. - Dijo seriamente para luego volverse a sus alumnos - Y el que pueda hacer el mejor filtro de no muertos se lo llevará - Los alumnos nos miramos entre nosotros y la mayoría estábamos emocionados.

Rápidamente nos ordenamos en el aula y comenzamos a trabajar.

- Adán - Me llamó mi vida.

- ¿Si? - Pregunté sonriendo mientras encendía el fuego.

- ¿Quieres hacer una apuesta? - Pregunto Hermione.

Dude un poco pero la mire.

- Bueno - Mi mirada estaba llena de cariño cuando ella sonrió.

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