Ante y Después

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Adán.           

Harriet abrió la puerta del vagón y nos miro a uno por uno.

- Adán, nos llama el profesor de Defensa - Dijo Harriet sonriéndole amable a Mione.

Salí del vagón dándole una sonrisa a mi novia y mirando de reojo a Delphin que me miro con sus ojos azules.

Salí del vagón y Harriet tomo mi mano.

- ¿Por qué no me escribiste en las vacaciones? Llore - Pregunto tranquila aunque esas palabras me ardían.

- Estaba ocupado - Me límite a contestar aunque ella ya sabía lo demás, era obvio para ella hasta donde había llegado la intensidad de mi relación con Mione.

- ¿Y mi regalo de cumpleaños? - Pregunto ella mirándome de reojo.

- Eso… - Murmuré viéndola de arriba a bajo desde atrás.

Mi mano se movió rápidamente y la chica se sonrojo.

- ¿Aquí? - Pregunto sonriendo y mirándome de reojo.

Sonreí y volví a golpear su culo.

- ¿Te molesta? - Pregunté sintiendo calor en todo mi cuerpo.

Ella miro hacia los lados y abrió la puerta de un vagón.

- ¿Tu que crees? - Pregunto mientras su mano tomaba mi corbata y me llevaba a el vagón mientras yo cerraba la puerta - Pegate, te recordaré lo que es bueno de verdad - Murmuró dándome la espalda.

Mi corazón comenzó a acelerarse mientras me pegaba a ella y sentía su calor.

- Oh, ya estás duro - Dijo la niña sonriendo mientras sus manos tanteaban a sus espaldas.

- Muchísimo - Murmuré besando su cuello.

Ella tomo la iniciativa y escuché como se bajaba la pollera.

- ¿Quieres empezar por eso? Bien - Murmuré tocándola y sintiendo humedad.

***

Harriet abrió la boca y saco la lengua dejando una vista cuanto menos angelical, y más temprano que tarde su boca termino llena de mi amor.

Ella sin pararse trago y sonrió hermosamente.

- Necesitaba eso - Dijo sin vergüenza mientras se levantaba y mostrando que había crecido en altura últimamente.

Sonreí y la mire totalmente enamorado.

- Te quedó un poco… - Murmuré tocando mi rostro para que ella hiciera lo mismo en el suyo.

Ella tocó su mejilla y paso su dedo limpiando el semen de su rostro para luego chuparse el dedo.

- ¿No quieres llenarme en otro lugar? - Pregunto apoyándose de espaldas al asiento.

Su mano derecha bajo a su vagina y la abrí levemente haciendo que no me importará llegar tarde a tal o cual reunión de mierda.

- No me culpes por lo que pase - Murmuré arremetiendo contra ella sin cuidado.

***

Harriet comenzó a vestirse con lentitud mientras me miraba de reojo.

- ¿Te gustó? - Pregunto mirándome con curiosidad.

Me acerqué a ella y mi mano rodeo su cintura.

- Si, sobre todo cuando usaste… - Dije un poco avergonzado.

- ¿Que te da vergüenza? - Pregunto sonriendo - ¿Decir que use mis pies? - Se burló con una sonrisa hermosa.

- ¿Vergüenza? - Pregunté besándola en el cuello - Nada de lo que me hagas me daría vergüenza - Murmuré

Harry Potter resurrección Donde viven las historias. Descúbrelo ahora