El color perfecto para las uñas

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Henry presto atención a todos los colores de uñas del libro.

En cambio, Elena admiraba su rostro de jade, él es absolutamente guapo como Holden. Su cuerpo vestía un traje fino a la medida, ella estaba impresionada, un hombre así hace que la gente quiera acercarse, pero al mismo que actúe con inteligencia a su alrededor.

Toda su imagen reflejaba seriedad y serenidad, era imposible que sea lo que Usha menciono hace rato. Creía que Henry era de todo menos una bestia, por lo que estaba interesada en descubrir cual color elegiría él.

En este momento, Henry extendió su dedo y la sacó de sus pensamientos.

Este es bueno.

Se refería al rojo escarlata, el color que eligió Usha.

Elena estaba asombrada, pero no le dio tiempo de decir nada más porque su amiga apareció:

Hermano, ¿tan pronto terminó tu reunión?

Henry levantó los ojos para mirarla y también observó sus uñas recién hechas. Usha volvió a hablar:

¿Crees que se me ve bien este color?

Ella estrechó su mano frente a él.

Henry la miró con atención por unos momentos y en silencio.

¿Cómo podría no verse bien?

Usha nació en una familia famosa y fue adoptada por una familia de comerciantes, siempre estuvo rodeada de opulencia y el color rojo hacía juego con su estilo de vida. Parecía que ahora en sus veintes ella no había perdido el gusto por el color.

Sus manos son tan delgadas y blancas que combinan con su tono de uñas, así como con el rojo de sus labios.

Henry comenzaba a sentir deseo, pero se controló.

Se ve bien.

Usha retrajo su manita y agarró a su amiga:

Elena, regresemos al hotel, es todo por el día de hoy. Hermano, ¿puedes cargar las bolsas de compras por nosotras?

Elena al principio se negó, pero después agradeció que Henry ayudara a llevar las bolsas de compras.

Cuando los tres salieron del centro comercial, Henry fue en busca de su Maybach plateado, una vez que estuvo de nuevo en donde dejo a las jóvenes, pidió que se subieran.

Usha en su lugar, levantó su mano, era la llave de un auto:

No es necesario Henry, nos iremos en mí automóvil. Jasmine y Siena siguen aquí, ¿por qué no mejor las llevas a ellas?

¿Quién te enseño a conducir? Hasta hace unos años, cuando comenzaste a practicar conmigo no sabías la diferencia entre izquierda y derecha.

La joven se colocó algunos mechones de cabello castaño rizado detrás de las orejas:

No podía esperanzarme a que tú me enseñaras o me llevarás a los lugares que quería ir, tenía que aprender.

Henry la miró, su voz indiferente sin altibajos:

No importa, deja el auto aquí, yo las llevaré.

En ese momento, el teléfono móvil de Henry sonó, al observar el identificador de llamadas, lo ignoró.

¿Es Jasmine? Respóndele, lo más seguro es que quiera que la lleves a su casa.

Usha insistió.

Él quería demostrarle a la joven que estaba equivocada, así que aceptó la llamada y puso el altavoz.

Hola Henry, ¿sigues en el centro comercial? Es que te íbamos a pedir un favor. ¿Puedes llevarnos a casa? Mi auto se averió y lo estoy enviando en grúa al taller.

La novia sustituta del millonario, pt.1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora