Todas las mujeres miraron en la dirección que apuntaba Siena. Y vieron tan espectacular rostro.
Siena supuso que era Holden porque estaba acompañado de Henry y su hermano, James.
El nuevo rostro, vestía una camisa y pantalones negros. Toda su ropa no presentaba arrugas y su imagen parecía extremadamente divina.
─ Vaya, el Presidente Lu es tan guapo.
Las damas contemplaban el exquisito rostro que se acaba de desbloquear en sus mentes. Era la primera vez que todas ellas conocían en persona al señor Lu.
Ahora todas querían ser la señora Lu.
Jasmine miró fríamente a todas las mujeres, ella las consideraba idiotas. Si no fuera por Elena, no dejaría que estas estas conocieran el rostro de Holden.
Él es tan superior, que deja tentada a cualquier mujer que lo observe. Sin embargo, quién pueda casarse con Holden dependerá del método en que lo consiga.
Jasmine está bastante segura de que podrá casarse con él.
─ Está bien que lo consideren encantador, pero no sean tan descaradas. Recuerden que a él le gusta Elena, ahora que ambos están en el bar podemos exponer a Elena.
Las damas recordaron su maléfico plan y recobraron la cordura.
No estarán dispuestas a dejar que Holden magnifico Lu siga rendido ante Elena, ellas se niegan a permitirlo.
─ Sí, ¡es hora de actuar!
─ Siena, ¿cuál es el vino más fuerte del bar? Envíales dos botellas al palco de Elena y Usha. Debemos emborracharla para que ella sola revele sus intenciones con el señor Lu.
─ ¡Sí! ¡Cuando el señor Lu la escuche definitivamente la dejará!
Regresando al lujoso palco, Elena y Usha conversaban amenamente.
─ Elena, tu hermanastra es realmente una perra cobarde. Ella está tomando prestadas las manos de estas mujeres para acabar contigo.
─ ¿Qué se puede esperar de Jasmine? Prefiere que otros se embarren las manos... Ahora todas esas mujeres van a armar un gran escándalo con el señor Lu.
─ ¿No es justo lo que queremos?
Elena sonrió con satisfacción.
Ambas se imagina la escena cuando Jasmine se entera de que Holden Lu es el dueño del Jardín Verde y que Elena se ha ganado el amor de la abuela Lu.
En ese momento se abrió la puerta del palco y el camarero entró con una botella de su mejor vino y dos copas servidas.
Elena no sabe beber, ella se emborracha fácilmente, pero ahora que ve la copa, realmente se le antoja tomar un sorbo.
─ Cariño, ¿puedo tomar un poco de la bebida?
─ Recuerda que no bebes bien, así que solo un sorbo.
Con el consentimiento de Usha, Elena probó un poco.
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La novia sustituta del millonario, pt.1
RandomLa novia sustituta del millonario Xia Elena y Lu Holden son dos personas distintas que están destinadas para toda la vida. Su historia comienza en el vagón de un tren que se dirige a Darenvil, pero se torna completamente extraña al convertirse en...