La novia sustituta del millonario, pt.1

Verdad o reto

─ Hermano mayor, Elena tomó una copa en el bar hace un momento, resulta que lo que le sirvieron era un vino afrodisiaco.

Holden frunció el ceño.

En ese momento, la fragancia de una dulce mujer permaneció en su nariz y el delicado cuerpo de Elena cayó directamente sobre sus hombros. Ella se frotó en él como un gatito y susurró suavemente:

─ Señor Lu, tócame y dime si tengo fiebre alta... Tengo tanto calor...

Elena olió el aroma de Holden, limpio y claro. El olor era como encontrarse con un estanque de agua en el desierto, atrayéndola constantemente para que se acercara. Así que extendió la mano para abrazar su cuello, ella besó su impecable y hermoso rostro.

Holden perdió el control del volante por un momento y detrás se oyó una fuerte bocina de auto y la voz de James se escuchó:

─ Hermano mayor, ¿estás pensando tomar a Elena en el auto? ¡Maldita sea! Debes recompensarme por hacer que pase esto, pero mejor espera a llegar a tu casa para jugar con tu esposa.

Holden estabilizó el volante y cambió de carril rápidamente. La joven a su lado lo estaba molestando y lo había besado varias veces mientras él cambiaba de carril, tanto que le recordaron a su mamá y a todos sus parientes.

Su amigo por teléfono sintió que su presencia estaba de más por lo que colgó la llamada.

─ Señor Lu...

En ese momento, Elena se recostó sobre sus hombros y respiró en sus oídos y susurró:

─ Sé que quieres verme desnuda, eres un lujurioso.

Holden estaba a nada de perder el control, sabía que, si ella seguía frotándose y hablando melosamente, definitivamente no podría conducir. Él la abrazó en su regazo y advirtió cuando Elena quiso apartarse:

─ ¡Elena, si no quieres ocasionar un accidente, detente!

Él habló tan demandante que solo quedo obedecerlo.

Bar 1949

James estaba colgando la llamada con su hermano mayor, cuando Henry y Usha entraron a la oficina.

─ Henry, Usha que bueno verlos.

─ ¿Hablaste con Holden? ¿Qué te dijo?

James parpadeó como si estuviese coqueteando:

─ ¡Creo que el hermano mayor tendrá sexo esta noche! ¿Ustedes ya se van? Usha, ¿por qué no juegas esta noche? Recién regresaste a Darenvil y no hemos tenido oportunidad de divertirnos todos juntos.

En ese momento, alguien gritó:

─ Señor Gu, Usha, es raro verlos por acá, ¡vamos a jugar!

James jalo a los hermanos para llevarlos a la habitación de juego.

Cuando llegaron a la habitación, las damas y varios empresarios ya estaba reunidos, incluidas Jasmine y Siena.

La persona que invito a los grandes personajes, hablo:

─ Las reglas del juego son las siguientes. Las cartas que le están entregando tienen un número, el mayor número elegirá entre verdad o reto, el número menor debe responder o acatar la orden y no pueden objetar sobre la verdad o reto. ¿Todos están de acuerdo?

Por supuesto, todos están de acuerdo con las reglas, eso lo hacía emocionante.

Siena miró a Henry en secreto varias veces, ella estaba implorando que le tocará el número mayor y que a su amor platónico le toque el menor, ¡así le podía pedir a Henry que la besara!

─ ¿Todos están listos?

Los presentes asintieron.

─ El juego comienza ahora, pueden voltear las cartas.

Usha volteó su carta, el número que le tocó era dos. A comparación de los demás, que ya habían alzado su tarjeta, era la cifra menor. Ella sintió que este día no tenía suerte y que no podía empeorar más.

La carta con la cifra más alta de esta ronda la tuvo un joven que no podía esperar para preguntarle a la joven.

─ Usha, elijo verdad, quiero preguntarte, ¿a qué edad fue tu primera vez?