La novia sustituta del millonario, pt.1

Humillando al enemigo

Siena y Jasmine tienen una buena relación personal, pero esto no impide que Siena se ponga celosa de su amiga.

Después de todo, se sabe que a Henry le gusta Jasmine.

Jasmine tomó la mano de Siena:

─ Siena, ya he dicho que Henry y yo solo somos amigos, aunque Henry me hubiese pedido ser su novia, definitivamente lo rechazaría porque a mí me gusta Holden. Solo le dije que lo llamará para que juguemos juntos, los cuatro, así yo puedo estar a solas con Holden y tú con él.

Este comentario puso a Siena feliz y sonrió.

Jasmine fingió suspirar:

─ Se supone que tú y Henry se casarían por el acuerdo matrimonial entre sus familias... pero ahora con el regresó de Usha... no sabemos si te pedirá matrimonio...

Siena inmediatamente se enojó y miró a Usha:

─ ¡Tarde o temprano la haré desaparecer!

Jasmine levantó sus labios rojos, una mujer inteligente nunca se ensuciaría las manos ni se mancharía de sangre, así que dejaría que Siena se ocupará de eso.

Elena se probó el camisón, Usha asintió con satisfacción, realmente era perfecto para su amiga, así que Elena entregó el camisón a la guía de compras:

─ Solo me llevaré esto, ya puede pasarlo a caja.

─ Está bien, señora.

La guía de compras se dirigió a empacar.

Siena se acercó y dijo con un tono extraño:

─ Elena, ¿sabes cuánto vale el camisón que elegiste? ¡7000 dólares! ¿Tienes tanto dinero o te estás gastando la fortuna de tu esposo fantasma del Jardín Verde?

Pocas personas saben que Holden es el dueño del Jardín Verde, y Henry y James no han revelado este secreto a nadie, incluido a Siena.

Jasmine se acercó y dijo:

─ Elena, no creo que tu esposo tenga una fortuna tan grande, si realmente te gusta este camisón yo lo pagaré.

Usha miró a Jasmine y Siena como si estuviera mirando a dos idiotas. Para ser honesta, ella estaba ansiosa por ver sus maravillosos cambios de expresión cuando se enterarán de que el esposo fantasma era el mismísimo Holden Lu.

La hermanastra ya tenía su tarjeta en la mano y Elena dijo:

─ Espera un minuto.

─ No te preocupes Elena, nosotras somos hermanas, así que no te debes avergonzar, te lo estoy dando como un regalo.

─ No, no es eso, quiero decir... ya que te has ofrecido a pagar, quiero llevarme otras cosas.

Diciendo eso Elena regreso a los mostradores.

─ ¡Listo! Eso sería todo.

Ella eligió todos los nuevos productos en la ventana y compró mucha ropa, zapatos y bolsos. No parpadeó, como si estuviera comprando en un mercado de pulgas.

Siena es la pequeña princesa de la familia Huo. Lleva todas las marcas famosas y gasta el dinero como si fuera agua, pero también está asombrada porque nunca ha gastado una suma tan grande de dinero. No pudo evitar decir:

─ Elena, ¿estás loca?

A Elena no le importaba en absoluto Siena. Ella miró a Jasmine con una hermosa sonrisa:

─ Hermana... ¿aún pagarías por mí?

Estas cosas sumaron varios millones, Jasmine no sería tan estúpida como para que se aprovecharan de ella. Ella recuperó su tarjeta y ni siquiera pareció avergonzada.

Ella solo miró a Elena con preocupación:

─ Elena, no seas desvergonzada, sí no tienes dinero, no debes dificultar el trabajo del personal, ¿no estás llevando demasiado lejos tu broma.

─ No es solo una broma de mal gusto, es un crimen, Elena, llamaré a la policía ahora para que te detengan.

Elena interrumpió de inmediato su acción, levantó sus delicadas cejas y rodó los ojos:

─ ¿No es agotador humillarse solas? Mejor ahórrense la vergüenza... Señorita, ¿puedo pasar esta tarjeta?

Elena le entregó la tarjeta de oro a la mujer de la caja.

Jasmine y Siena se asombraron drásticamente.