Capítulo 51 -Mentes perversas 2-

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Julies

Realmente estoy que ardo de la bronca que tengo, Zirel de repente ya no quiere nada conmigo, nunca me imaginé que se enojaría tanto por lo sucedido con Carlos, la subestimé...la muy tonta está recuperando el temperamento que solía tener cuando éramos adolescentes, yo podía molestarla y burlarme de ella hasta cierto modo, ella sabía ponerme en mi lugar antes de que la situación pasará de claro a oscuro. Esta Zirel para mi asombro fue más indulgente...hasta ahora que a pesar que con Carlos veníamos excediéndonos con algunas actitudes desubicadas ella nos tenía paciencia...estoy completamente y extremadamente odiosa...saber que Ibrahim tuvo sexo con ella me da envidia y frustración, cómo es posible que todavía no me lo haya follado...pero esto no quedará así, todavía puedo persuadirlo de que se acueste conmigo. Decido ir a la oficina para hablar con él, como era de esperar me atiende lo más esquivo imposible. A pesar de todo el argumento que le doy para amedrentarlo de que si no hace lo que digo podría perder a su esposa, no hay caso, no solo no me lleva el apunte, sino que me echa de su oficina amenazándome que me hará sacar por los de seguridad, cosa con la cual no le doy el gusto, luego de amenazarlo una vez más que no me quedaré sin hacer nada salgo de su oficina con mi rostro bien erguido, pero no sin maldecir y refunfuñar hacia mis adentro. Subo a mi auto que se encuentra estacionado en frente de la empresa me quedo sentada con la mirada perdida...pensando que plan siniestro podría elaborar para vengarme...después de un buen tiempo, veo salir a Zirel de la empresa, se la ve bastante perturbada...acaso él le habrá comentado algo sobre mi propuesta atrevida...ja, ja Zirel siempre tan frágil...comienzo a seguirla con el auto a una distancia prudente para que no se dé cuenta, de todos formas si fuera a la par de ella no creo que se diera cuenta porque la muy tonta está bastante ausente del entorno. Freno el auto cuando la veo llegar a la puerta de la casa de su suegra, ingresa a la casa y yo me quedo en el auto haciendo guardia, en realidad no sé por qué lo hago, después de unos minutos decido mandar todo al demonio y en el preciso momento que estoy por darle contacto al auto para prenderlo y así marcharme veo salir a Sara y Zirel, ella lleva una valija de viaje chica, ambas se suben al auto de Sara y se van, enciendo mi auto y marcho detrás de ella para saber cuál es su destino. A una distancia no muy lejana llegamos a una zona de quintas, ellas frenan en la entrada de una que es la más hermosa y grande que he visto hasta ahora, el portón se abre e ingresan, yo me quedo fuera, pero estaciono el auto a una distancia que me permita ver si salen pero que a la vez ellas no se den cuenta de mi presencia. Durante la espera llamo a Carlos... no atiende el móvil, le dejo un mensaje que en cuanto pueda se comunique conmigo. Decido salir del auto para estirar un poco mis piernas, me acerco al portón, trato de espiar, pero es imposible ver hacia adentro, de repente el portón se abre de golpe, me escondo detrás de una planta grande que se halla a unos pasos y acercando prudentemente mi vista veo el auto de Sara asomar la trompa en la acera, frena de golpe y atiende su móvil, puedo escuchar parte de lo que dice; -me llamaron del mercado, están atrasados con los pedidos, tardarán no más de una hora en llegar...(silencio) sí, sí cariño no le diré a mi hijo que estás aquí, tú solo disfruta de este tiempo a solas contigo misma, nos hablamos...- Sara finaliza la llamada y subiendo la ventanilla de su auto, se marcha del lugar. Yo por mi parte salto como loca de alegría, por esta oportunidad...Zirel sola en una quinta...lugar perfecto para llevar a cabo el encuentro amoroso con Carlos, voy corriendo al auto... mi móvil suena... es Carlos recibo su llamada, luego de explicarle todo el plan a grandes rasgos le pido que se prepare que pasaré por él. Ambos nos reímos a carcajadas porque pronto Zirel estará devastada, desolada...y ni hablar de él, el gran Ibrahim Lang; haré un video de ella mientras Carlos se la folla bestialmente...de todas las formas que le sea posible y luego... (rio como loca) luego el video se hará viral en las redes.

Ibragim Lang

Luego de terminar con la reunión me dirijo a mi oficina, miro la hora sonrío de satisfacción porque pronto estará llegando Zirel, me prometió que me haría un fabuloso almuerzo...suspiro de amor, realmente mi mujer me tiene completamente enamorado y atontado, ya no puedo resistirme a nada de sus antojos...te tiene en sus manos Ibrahim Lang, tu mujer te tiene totalmente a su merced, meneo mi cabeza para borrar semejante pensamiento. Llego a la oficina, entro me siento en mi sillón atiendo una llamada de programación, es Juan nesecita de mi ayuda...corto la llamada para ir hacia él, pero me detengo al interrumpir en el lugar ella, hoy está más sacada que nunca su mirada libidinosa con un tinte maligno me hace sospechar que se viene con algo bastante oscuro y perverso y como era de esperar se salió con unas cuestiones un poco tomadas del aire, trató de persuadirme; con...si no me acostaba con ella...inclusive insistía que podríamos tener el acto sexual en mi misma oficina...sobre el escritorio...uff que repugnante...realmente esta mujer es muy relajada y decidida a dar lo que sea por su deseo obsesivo hacia mí. Le diría a mi esposa que esa imagen que logró recordar...de nosotros discutiendo bajo la lluvia se debía a que Zirel descubrió que yo la engañaba con ella; - realmente Julies está totalmente errada en creer que mi esposa es tan fácil de persuadir con respecto a algo del pasado... que haya perdido la memoria, no la hace una tonta...ser fácilmente manipulada con historias ficticias...- esta mujer sabe cómo sacarme de las casillas luego de pedirle varias veces que se retire, la amenazó con sacarla por la fuerza...con el personal de seguridad. Por suerte se retira, espero unos segundos y luego salgo para ir a programación, en el camino intento comunicarme con mi esposa, pero no me atiende la llamada. Dos horas se pasaron en programación, pareciera que fue tan solo media hora, subo a mi oficina, me encuentro con mi secretaria, luego de preguntarle si sabía si Zirel había llegado, me quedo preocupado ante su respuesta; Ibrahim tu esposa llegó a la empresa antes de que terminaras tu reunión con los empresarios...me pidió que no te dijera nada...que te daría una sorpresa... Agradezco el dato a mi secretaria y a pasos ligeros voy hacia la parte privada de mi oficina, Zirel no se encuentra, la mesa está servida pero ella no está, entro con urgencia al sistema y puedo ver a mi esposa agazapada al lado de la puerta escuchando todo con respecto a la intromisión de Julies...llamo por el móvil a mi esposa, sigue sin atenderme...comienzo a preocuparme...tomo el auto y voy a casa, la busco por todos lados...no la hayo, mi corazón comienza a latir a mil, voy de Sara, ella me dice: -tengo la información que necesitas para saber sobre el paradero de Zirel-

-dime mamá...me estoy volviendo loco...dime en dónde está...qué le sucedió...no me contesta los llamados, es más apagó su móvil...luego de mandarme un mensaje de texto...-

-primero te hago un café y mientras lo bebes te cuento-

A pesar de que protesté, esperé al café, una vez que lo tuve en mí mano con una mirada de urgencia le hice entender a Sara, que no probara más mi paciencia y me contara; luego de que dijera todo con lujo de detalles de lo sucedido, omitió decirme en dónde se fue por unos días mi esposa y a pesar que le insistí...por qué no sé, creo que mi esposa está en peligro no hubo caso; Sara se refugió en su palabra de promesa dada a su nuera de solo guardarse para ellas el lugar de su estadía. Me voy refunfuñando a casa. Luego de unas horas solo me esperaba esperar que Zirel encendiera su móvil para hacer la llamada a nuestro hijo y ese sería el momento justo para rastrear el lugar a través de una función que tiene su móvil...eres un genio Ibrahim me digo cuando logro encontrar el lugar...se encuentra en la quinta de la familia. Salgo para allí junto a life, en el camino entro a las cámaras de seguridad, no puedo ver ninguna imagen, llamo a la empresa para pedir una explicación, me contestan que pronto me solucionarán el problema, luego de media hora me llaman que han podido solucionar por el momento las imagines del exterior, pero para las del interior tardarían otra media hora, protesto...pero igual por el momento me conformo con ver el exterior, entro a las cámaras y cuando chequeo las de la entrada a la quinta una alarma de terror se enciende en mi interior al ver un auto estacionado...la puerta de entrada no se encuentra cerrada del todo; -ese auto lo conozco...es el auto de Julies...- aprieto el acelerador ante el reconocimiento, llegamos...me bajo con rapidez al igual que Life, él entra antes que yo a la casa y se dirige hacia la planta de arriba con urgencia, lo sigo por detrás a pasos largos...Life trata de entrar a la habitación pero la puerta se haya cerrada, se pueden apreciar sonidos raros, en cuanto abro esa puerta mi corazón casi se paraliza ante lo que mis ojos pueden apreciar...Julies filmando con su móvil...Life va hacia ella con rabia yo por mi parte me lanzo sobre Carlos que se encuentra totalmente desnudo sobre el cuerpo de mi esposa, está tratando de sacarle su ropa interior mientras Zirel con movimientos torpes y súplicas agonizantes le ruega que la deje. Lo tomo por el cuello y lo lanzo con toda la furia que me embarga en este momento, me encuentro segado de rabia y lo muelo a golpes hasta dejarlo casi muerto...mis manos se hallan ensangrentadas...sino fuera por esa voz interior que me puso un freno...creo que lo hubiese matado. Me acerco a mi esposa, la cubro aún más con el acolchado y luego de comprobar que su estado no es tan terrible. Limpio mis manos, abrazo un tiempo más a mí mujer y al finalizar me dirijo hacia ella, la mujer más osada, perversa y enajenada que he conocido en mi vida, le arranco de sus manos el móvil...miro el repugnante video...siento que voy a explotar de la cólera que siento por semejante ignominia...estrello el móvil contra la pared y una vez en el suelo lo termino de destruir pisándolo. No me importa perder parte de la prueba en contra de estos engendros...no puedo permitir que Zirel sea más avergonzada...nadie más debía mirar el ataque perpetrado hacia ella. Me quedo tranquilo porque Life tiene controlada a la enferma entre sus patas y sus fauces rabiosas cerca de su rostro. Vuelvo con mi esposa y mientras la consuelo, llamo a seguridad y a la policía que no tardaron en venir.

Pasamos unas cuantas horas entre la denuncia y los controles médicos de Zirel. Verla tan ausente me destroza por dentro, ni hablar de lo que padeció...una vez en la quinta vamos a una de las habitaciones para huéspedes, le preparo la bañadera y una vez que todo está listo me encargo de su aseo, no puedo evitar de confesarle mi frustración por no haberla protegido...cuidarla como ella se lo merecía, ella a pesar de su dolor...me consuela y me dice palabras tan profundas que logran por el momento ser cómo una medicina que sanan a mi corazón y alma dañada por toda esta maldad soltada.

72 horasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora