Decenas de shurikens volaron en todas las direcciones impactando en diversos blancos. En uno de ellos se encontraba parada Emiko con los ojos cerrados, y antes de que las armas impactaran, esta logro protegerse.
-¡Elemento madera!-. Un gran muro se alzó delante de Emiko protegiéndola de los shurikens, por lo que ella saltó esquivando los que venían detrás. Los años de entrenamiento comenzaban a hacer su efecto, aunque estaba segura que la ayuda del Tercer Hokage fue fundamental, así como la de otra persona.
-¡Elemento fuego: Gran bola de fuego!-.
-¡Elemento agua: Gran dragón ascendente!-. Ambas fuerzas chocaron, aunque no querían herirse, tampoco querían un entrenamiento leve, sobretodo estos últimos años.
Tanto Emiko como Itachi habían crecido, tenían 13 años puntualmente. En particular, ella comenzó a desarrollar ciertas partes que antes, Itachi no hubiera prestado atención. Era bonita, sí. Era fuerte, sí. Tenía un carácter un tanto violento, también; pero el aspecto físico era algo que, debido a su edad, recién ahora observaba.
-Creo que es todo por hoy-. Dijo él. Emiko lo observó y asintió, luego oyó una voz infantil. -¡Hermano!- El pequeño hermano Itachi, Sasuke, había empezado a acompañarlos hacía un tiempo. Un chico raro, a su parecer, por lo que Naruto le había contado, era antipático, y lo había comprobado cuando comenzó a ir junto a Itachi a donde entrenaban juntos. Apenas la miraba, sólo tenía ojos para su hermano.
-¿Me enseñarás a lanzar shurikens de esa manera?- El niño miraba con mucha admiración a su hermano mayor.
-Será la próxima vez Sasuke. Ahora debemos volver, los demás nos esperan- Dijo Itachi.
-¿Otra vez el clan? Últimamente tu clan no hace otra cosa que reunirse-. Mencionó Emiko.
-Sí. Aunque la mayoría de las veces son puras tonterías- Respondió él –A veces un clan puede ser muy absorbente.
-En ese sentido no puedo comprenderte, de mi clan sólo existimos mi padre y yo. Aunque según él me dijo, hay otra persona de la que no se sabe su paradero- Comentó –Pero el punto es que, al haber solamente tres Senjus, me cuesta imaginarme conviviendo dentro un clan con normas tan rígidas como el tuyo.
-Son puras tonterías, en comparación con lo que nos rodea- Reflexionó Itachi –Bien, nos veremos mañana Emiko-.
-Claro, adiós, tú también pequeño- Dijo mirando al niño, que solo se limitó a lanzar un "hmp". Emiko los observó irse. Ese clan tenía muchos misterios.
//
-Hay fuertes sospechas de golpe de estado por parte del clan Uchiha- Dijo firmemente el Tercer Hokage. Hiroaki levantó inmediatamente su cabeza al oír eso. -¿Cómo?
-Al principio pensé que sólo eran exageraciones de Danzo. Pero los informes de los ANBU acabaron por confirmar algunas cosas.
Habían pasado unos meses del ataque del zorro, Hiruzen Sarutobi retomó su rango como hokage de la aldea y ahora se encontraba en medio de una discusión.
-¿Qué es lo que tratas de decir, Danzo?- Miró atentamente al hombre en frente suyo.
-Que ese clan maldito es el responsable del ataque de la bestia con cola a la aldea de la Hoja, y por ende, de la muerte del Cuarto Hokage-. El hombre estaba muy seguro de sus dicho, aunque Hiruzen no quería darle mucho crédito debido a la inquina que le tenía al clan Uchiha desde hacía tiempo, decidió oírlo y después para después dar su opinión.
ESTÁS LEYENDO
CRONICAS DE UN AMOR SHINOBI
RomanceEmiko Senju y Yumi Nozawa poseen diferentes personalidades y capacidades como ninjas, sin embargo, la tragedia acaecida en la aldea de la Hoja cambiará sus vidas por completo, quedando unidas de por vida a quienes menos imaginaban. Por otro lado, Sa...