MUDDY GREEN WATERS ✧ draco malfoy |Traducción [✓]

𝟐𝟏 - 𝐊𝐚𝐭𝐢𝐞 𝐁𝐞𝐥𝐥

Draco Malfoy se apartó culpablemente de Rosie y se giró para ver a un sonriente Theodore Nott, apoyado en la pared, con los brazos cruzados sobre el pecho de forma arrogante.

Mierda. Draco se preguntó qué aspecto había tenido. No podía permitir que Theo difundiera rumores. Si llegaba a oídos de su padre, o incluso peor... bueno, no quería pensar en eso.

No sabía qué le había pasado. No tenía intención de quedarse así después de curarle la mejilla, pero algo le atrajo. El olor de su champú en el pelo, el tacto de su cara, sus fieros ojos azules... todo le había hipnotizado. Y cuando sus labios pronunciaron su nombre, pensó que podría perderse completamente en ella.

Pero entonces, sin más, el hechizo se había roto. Parpadeó, recordando quién era y para qué estaba. Tenía que poner fin a esto ahora mismo, antes de que las cosas fueran demasiado lejos.

-Sólo admiraba la obra de Pansy. - dijo, poniendo su mejor cara de desprecio

Theo centró su mirada en la mejilla de Rosie que, aunque ya estaba curada, lucía una furiosa cicatriz roja y quedaban restos de sangre en su piel.

Draco observó con atención la expresión de Theo, rogando que no hubiera captado ninguna... tensión.

Pero Theo se limitó a reírse, con los ojos brillantes.

-Buen trabajo. Esa es nuestra Pansy. - se acercó a ellos. Rosie, que seguía sentada en el borde del sofá, se movió de repente de forma incómoda. Draco la miró y se dio cuenta de que deseaba estar en cualquier sitio menos aquí. Se estremeció cuando Theo se detuvo frente a ella y se agachó para ver de cerca su cicatriz.

-¿Lo has curado? - se levantó, ahora mirando a Draco con una mirada inquisitiva.

-Era eso o que fuera al ala del hospital lo que metiera a Pansy en problemas. - el alivio inundó a Draco cuando Theo pareció creerse esta excusa.

-¿Qué ha hecho para cabrearla, de todos modos? - inquirió, sonriendo hacia Rosie, que estaba sentada nerviosa y quieta. Draco se sintió culpable de que estuvieran hablando como si ella no estuviera allí.

-Ella no tiene que hacer nada. - gruñó Draco. -Es una Sangre sucia. - lanzó una rápida y culpable mirada a Rosie.

-Sí, bueno amigo, ya sabes lo que pienso; tienen lo que se merecen.

Rosie se levantó de repente, Draco notó una mirada feroz y fría en sus ojos mientras rodeaba a Theo.

-Cállate. Solo cállate estúpido ignorante prejuicio baboso. Me importa una mierda lo que pienses, nunca lo he hecho y nunca lo haré.

Y con eso, se dirigió furiosa a los dormitorios de las chicas, sin mirar atrás. Draco y Theo se limitaron a observar en un silencio incrédulo. Cuando oyeron el portazo, Theo soltó una carcajada. -Estúpida tipa.