Pavoverso 3. Cap 6. La bendición de Wei Wuxian

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Lan Wangji se despertó a su hora usual. Eran las siete de la mañana cuando buscó el calor de Wei Ying a su lado, pero al no sentirlo se levantó rápidamente. Miró en dirección a la cuna de A-Yuan y se dio cuenta de que el bebé no estaba.

Se deshizo de todos los pensamientos caóticos y peligrosos sobre que su novio no estuviera en la cama. A-Yuan era un bebé tranquilo, apenas y lloraba en las noches y, si lo hacía, apenas era alimentado o recibía su cambio de pañal se volvía a dormir.

Escuchó ruidos en la cocina y caminó antes de meterse a bañar.

El sol apenas y había salido, pero su sol ya estaba de pie haciéndole caras a su bebé que estaba en una canasta que Wei Ying había adaptado para él. Decidió no hacer ruido y mirar como su novio estaba cocinando algo.

Había un molcajete en la mesa, así como cáscaras de huevo sobre la mesa. El aroma a café hervido le hizo sonreír aún más y la vista de Wuxian tarareando le hizo sentir que lo tenía todo en la vida.

- Aiya... A-Yuan, ¿crees que a papá le guste esta comida? – Wangji se dio cuenta de que estaba sirviendo la comida en uno de esos tuppers que había comprado – Mira, papá le hizo taquitos de huevo con jamón para su almuerzo, también le puse algo de salsa a parte... para que tu papá no se enchile – el niño pareció reírse por eso – Le corté unas manzanas... ¿debería ponerles chile? – el bebé Lan soltó un balbuceo – Tienes razón, ya lleva salsa, mejor se las dejo así –

Lan Wangji sacó su celular y comenzó a grabar aquella escena.

- Para su colación le he puesto betabel y pepino en rodajas... ahora sí le voy a poner su limón, chile y sal – Lan Yuan se dio la vuelta, notando a su papá Wangji viéndoles desde la puerta – Y para antes de sus clases le dejaré una torta de pierna... le voy a poner chilitos en vinagre por si quiere tomar algunos –

Wei Wuxian empacaba esa comida en el tupper de Wangji. Wei Ying había estado viendo muchos videos de esas mujeres que les echaban lonche a sus maridos y por eso pensó que su novio se merecía algo así también. Lan Zhan trabajaba en las mañanas y se iba a estudiar en las tardes, así como Wei Ying. Algunas veces llegaba tan cansado y con hambre a casa... que prefería tan solo irse a dormir. Algo que no permitiría Wei Wuxian.

Lan Yuan alzó sus brazos en dirección a Wangji mientras soltaba grititos y risas.

- ¡Lan Zhan! Mira, mira – tomó a Lan Yuan en brazos y se acercó a Wuxian después – te hice lonche... ¿te gusta? –

La comida olía deliciosa, además de que era mucha. Las ojeras en los ojos de Wei Ying le hizo saber que se había levantado muy temprano para echarle lonche.

- Gracias, me gusta mucho – besó sus labios y luego su frente – No te levantes tan temprano. Ambos necesitamos descansar – 

MDZS: HECHO EN MÉXICO!!!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora