Xue Yang se encontraba en el supermercado. Tenía que hacer las compras de la semana, además de que había una promoción en los cartones... su carrito iba lleno de dulces. Desde chocolates hasta bombones y dulces tradicionales. También llevaba productos básicos y algo para la limpieza...
Todo iba normal, hasta que vio la sombra de alguien que había conocido hacía ya muchos años. Avanzó con su carro hasta seguir a esa mujer, y es que no podía evitarlo, le recordaba demasiado a Xiao...
- También falta jabón zote, querido – decía la mujer – Ya casi se acaba el que tenemos en casa – el hombre que acompañaba a Xingchen, estaba seguro de que era ella, le contestó con un asentimiento, mientras empujaba el carrito de compras – También... jabón para la ropa... ¿deberíamos llevar una escoba nueva? –
- Mejor la compramos con la señora que vive por la casa – respondió el hombre – Ella vende y salen muy buenas –
- Sí, mejor... -
Una joven se acercó a ellos. Y él la reconoció de inmediato. Era una copia casi idéntica de Xiao Xingchen cuando era joven, solo que sus ojos no eran de su madre, sino de su padre. Esa joven tenía los mismos ojos que él veía cada mañana frente al espejo.
- Papá, ¿podemos comprar los ingredientes para hacer un postre de limón? – dijo la joven, mientras tomaba la manga del hombre - ¿Por favor? –
- Eso depende – dijo él, sorprendiendo a ambas mujeres - ¿Vas a darle el postre a tu novio? – ambas mujeres comenzaron a reír, mientras el hombre las miraba fingiendo estar ofendido.
- No, papá – dijo la chica – O sea, sí lo voy a llevar a la casa y sí le voy a dar postre, pero también a ustedes dos –
- Bien, entonces puedes llevar lo que quieras –
Xue Yang salió entonces de detrás del anaquel y miró directamente a la madre de familia, quien solo puso una expresión asustada, mientras dejaba caer un jabón al piso. Song Lan la miró y la tomó del brazo, para luego ver en dirección en que estaba Xue Yang.
- Yo... ¿Xingchen? – la mujer se aferró a la ropa de su esposo, ahora lo sabía, mientras Song Lan se ponía frente a ella, como protegiéndola de aquel desconocido.
- No quiero... no quiero... yo... - murmuró Xingchen, mientras buscaba con su mano la presencia de Song Qin – A-Qin... -
- Aquí estoy – dijo ella, poniéndose también frente a su madre – Vámonos, no te preocupes por nada –
Xue Yang recibió dos miradas asesinas, la de la joven fue más ácida que la del esposo de Xingchen.
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MDZS: HECHO EN MÉXICO!!!
FanfictionEsta historia está disponible de FORMA GRATUITA EN WATTPAD, AO3 Y FB. Si la encuentras en otro lugar es PLAGIO. Shots que no tienen un orden específico con situaciones que le han pasado o que ha visto ésta persona en su ciudad y país. Wangji, ¿qué s...