BTS Parte uno - Luzbel nace.
Cuando Dios fue creando a los ángeles, a cada uno les otorgaba un pequeño regalo. Ese regalo era un secreto para los ángeles, ninguno sabía de qué se trataba, pero sabían que lo tenían dentro su yo. Ese regalo, era el crucifijo de luz el cual los representaba como lo que eran y les daba el poder necesario para brindar bondad y amabilidad.
Lo que no sabían, era que con eso, Dios podría controlarlos, podría manipularlos y tenerlos a su merced sin que cuestionen ninguna de sus acciones. Pero al principio no fue todo malo, simplemente fue algo... por simplemente tenerlo, nunca necesitó usarlo.
Fue hasta que Lucifer se reveló contra él que algo cambió en su interior.
Antes, no había nada para ella. Todo era oscuro, una habitación oscura, eso era lo que la rodeaba. Una donde no había luz ni oscuridad, simplemente... nada.
Fue entonces que una pequeña lucecita apareció en medio de todo eso, una pequeña lucecita que lentamente fue tomando una forma humanoide. Pálidas y delgadas piernas lograron verse con los segundos, luego el torso cubierto por una prenda blanca. Sus delgados brazos junto con esas delicadas manos de porcelana aparecieron luego. Y para finalizar, el hermoso rostro de aquél ángel se formó.
Lentamente fue abriendo los ojos, despertando de su sueño. Se sobó los ojos aún somnoliento, mirando su alrededor y no sabiendo dónde se encontraba.
Entonces unas grandes manos lo rodearon, tomándolo por sorpresa cuando hizo que se sentara en ellas.
—¿Cómo... Cómo es que naciste? —preguntó Dios, confundido ante el nacimiento del ángel—. Se supone que los ángeles habían nacido ya hace varios siglos.
Hace 615 años nació la última gran cantidad de ángeles en el cielo, lo que significaba que el ángel que tenía en sus manos era un... error.
—Mira, tienes un nombre, aquí en el pecho. —señaló el lugar con su dedo, haciendo que el ángel bajara la mirada.
—Cha... Cha Eunwoo. ¡Mi nombre! ¡Mi nombre es Cha Eunwoo! —exclamó emocionado tirándose para atrás.
Algo no cuadraba en todo esto, y Dios lo sabía. Se suponía que el mecanismo del cielo era simplemente perfecto, que ningún otro ángel debería nacer hasta más de mil años, ¿entonces por qué Eunwoo había nacido? ¿Un fallo?
Si los ángeles nacieron hace 615 años... Cha Eunwoo había nacido 616 años después.
Luego de aquello, Eunwoo no recuerda más. Despertó dentro de una jaula de oro la cual le era imposible tocar. Dios cambió por completo desde ese momento, pero Eunwoo nunca supo por qué, ya que él se encontraba inconsciente para saberlo.
Ahí, justo en esa jaula fue cuando Eunwoo lloró por primera vez, y fue ahí que Luzbel nació.
Dentro de él nació aquello que se encargaría de protegerlo, de cuidarlo y de hacerlo sentir bien cada que pudiera. Pero aún dando lo mejor de sí, nunca pudo hacerlo.
Luzbel estaba en un cuarto blanco en su totalidad, no había sombra, no habían esquinas ni paredes, pero era un cuarto rectangular muy pequeño.
Cada vez que Eunwoo era lastimado, una grieta se formaba en el cuarto de Luzbel, y ella se encargaba de repararlo para que nada salga mal. Pero con el paso del tiempo, el dolor y sufrimiento de Eunwoo se hizo cada vez más fuerte.
Dentro de él comenzaron a surgir sentimiento que se suponía que ningún ángel debería tener. Odio, repulsión, resentimiento, envidia, ira. Todo eso fue acumulándose en su interior, y rompiendo las paredes del cuarto blanco de Luzbel que no podía reparar todo.
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𝙼𝚢 𝙰𝚗𝚐𝚎𝚕 & 𝙼𝚢 𝙳𝚎𝚖𝚘𝚗 ➋ || '𝔅𝔦𝔫𝔴𝔬𝔬'
FanfictionContinuando con la historia anterior, luego de que Dongmin tuviera que abandonar a Moonbin solo para quedar al borde de la muerte y sin poder hacer nada por Jinwoo, quien se encontraba muy herido, nos encontramos varios años después en donde ocurren...