𝙼𝚢 𝙰𝚗𝚐𝚎𝚕 & 𝙼𝚢 𝙳𝚎𝚖𝚘𝚗 ➋ || '𝔅𝔦𝔫𝔴𝔬𝔬'

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—Myungjoon, ya no me sirves para nada. Absorbí tanto poder que mi cuerpo se regenera por sí solo. Ya no necesito robar tu esencia para curarme. —dijo Tzuyu sentada en su trono de hielo mientras veía al contrario escalones abajo de rodillas al suelo—. Malik, deshazte de él.

—Como digas.

—¡No, no, déjame ir! ¡Prometo que no diré nada, lo juro! ¡Por favor! —gritó este mientras se resistía al agarre de Malik en su espalda.

Tzuyu suspiró, colocándose de pie molesta mientras que lentamente iba bajando por los escalones hasta quedar frente a Myungjoon.

—Eres tan molesto. Solo gritas, lloras y suplicas. No sabes cuanto me hartas. —convirtió su brazo derecho en un sable de hielo y lo apuntó directo al rostro del contrario el cual abrió los ojos en grande y sintió su cuerpo paralizarse—. Muérete de una vez.

Lo siguiente que se oyó dentro de aquella extensa cueva adornada con hielo, fue el grito de agonía de Myungjoon.

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—O te unes a mí, o ves perecer a todos tus amiguitos. —indicó Lucifer afianzando el agarre en el cabello de Moonbin, tirándolo más hacia atrás y haciendo que su sable comenzara a penetrar ligeramente el cuello de este sacándole un poco de sangre.

Dongmin intentó levantarse con torpeza y algo de astenia, apoyándose en todo momento de la espada. Dio un paso hacia adelante, pero se detuvo al instante al oír un quejido por parte de Moonbin al sentir como más sangre comenzaba a salir de su cuello. Tragó duro sacudiendo su cabeza, estaba viendo doble.

—Y-Yo...

—¡Responde!

Miró con desespero hacia los demás. Las tres hermanas estaban lastimadas por el golpe provocado por el viento que emitieron las alas de Lucifer mientras que las sombras de Hajun se encontraban rodeándolas, apuntando sus filosos dientes y garras a sus rostro a la espera de la orden de Lucifer el cual las controlaba.

Sanha estaba peor, pues la marca de Caín que Lilith le había otorgado le estaba dando la vuelta. Esta se encontraba iluminada y le causaba una horrible punzada en su cabeza mientras oía un fuerte pitido en su oído el cual se hacía cada vez más fuerte. Pronto se le romperían los tímpanos y quizá el dolor en su cabeza sea tan fuerte que opte por el suicidio.

Rocky estaba siendo apretado por una de las sombras que parecía tener forma de serpiente. Lo había enrollado en su gran cuerpo mientras que su boca estaba abierta justo encima de la cabeza de de este listo para devorarlo. Aún estaba muy débil por el enfrentamiento que tuvo con Sanha como para liberarse.

—Si te unes a mí, si me ayudas con el apocalipsis, prometo dejar vivir a todos tus... amiguitos. Pero si dices que no, juro que te obligaré a ver como cada uno de ellos pierde la cabeza y te bañas en su sangre. Sobre todo la de tu querido Moonbin. —Lucifer se agachó a la altura de este y lamió su mejilla, luego volvió a su posición original.

En ese momento el pecho de Dongmin dolió, pero dolió literalmente. Era como si su corazón se comenzara a apretar a sí mismo, como si raíces lo envolvieran y lo apretaran hasta el punto de explotar. Como si hubiera algún intruso, algún virus o algo parecido que estaba dentro de él.

—Acepta. —susurró Luzbel dentro de su cabeza mientras que el dolor aumentaba—. Acepta, o todos morirán.

—Vamos, Dongmin, solo tienes que... aceptar. Es un simple trato ¿No?—Lucifer sonrió en grande—. Acepta.