𝙼𝚢 𝙰𝚗𝚐𝚎𝚕 & 𝙼𝚢 𝙳𝚎𝚖𝚘𝚗 ➋ || '𝔅𝔦𝔫𝔴𝔬𝔬'

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Moonbin salió de la ciudad, y actualmente se encontraba atravesando el gran bosque en dirección a una montaña. Dongmin desconocía el motivo de por qué se dirigía hacia allí, seguramente quería algo alejado del ruido en donde pueda pensar con claridad. No todos los días eres revivido.

Con su vuelo dejaba aquella estela de luz roja que facilitaba el saber su ubicación para Dongmin. Los árboles se movían a los costados cuando Moonbin pasaba entre ellos, y los truenos en el cielo aumentaban cada vez más al igual que la cantidad de lluvia que caía.

Los pájaros, así se encontraban lejos de ambos sujetos, salían volando despavoridos debido a la aterradora presencia que emanaba Moonbin. Este dio una mirada hacia atrás de forma rápida, notando como era perseguido por el impostor de Dongmin.

Rápidamente materializó una lanza con su derecha, y dándose una vuelta hacia atrás sin detener su vuelo, la lanzó en su dirección.

Dongmin al verla la esquivó con rapidez, deteniéndose por un segundo, gruñendo y continuando con la persecución.

El corazón de Moonbin yacía alterado, al igual que su mente. Habían tantas cosas confusas, tantos sentimientos encontrados que ni él mismo podía explicar qué era lo que le pasaba. Tantas imágenes confusas de Dongmin llegaban a su cabeza, conversaciones con Lucifer, su vida en el infierno, era como si sus siglos de vida estuvieran pasando justo frente a sus ojos.

No sabía quién era aquél ángel que lo estaba persiguiendo, pero sabía que no era Dongmin. Su Dongmin era otro, ese no podía ser.

Antes de poder seguir continuando con su vuelo, Moonbin sintió como algo atrapó su tobillo, haciéndolo detener de golpe. Miró hacia abajo, y notó como de la tierra habían emergido largas cadenas de luz que lograron atraparlo. Su vista se dirigió hacia Dongmin, notando que este no estaba haciendo nada de eso, pero al buscar entre los árboles, logró ver a Luzbel escondida entre las hojas.

—¡Déjame en paz! —una bola de energía oscura emergió en su derecha, lanzándola directo hacia Luzbel, haciéndola distraerse y saltar hacia un lado, esquivando su ataque el cual hizo desintegrar el árbol en cenizas en menos de un segundo.

Las cadenas se debilitaron, permitiéndole volar nuevamente, pero antes de siquiera intentarlo, Dongmin llegó a él, abrazando su torso con fuerza y llevándolo consigo hasta chocar contra la tierra, arrastrándolo varios metros mientras dejaban un rastro.

Moonbin se alteró ante su toque.

Comenzó a gritar desesperadamente, comenzando a alejar al contrario como sea, golpeándolo con sus puños en la espalda, o con sus rodillas en su estómago, pero por más golpes que daba, Dongmin no lo soltó en ningún momento.

Una onda expansiva de energía oscura fue emanada del cuerpo de Moonbin debido a su desesperación, haciendo que Dongmin se separara de él, cayendo varios metros atrás. Los árboles se sacudieron y la lluvia se desvió a los lados por un momento. Se colocó de rodillas al suelo con los brazos tensados hacia los lados con el puño apretado mientras gritaba.

Luzbel aprovechó esa oportunidad en la cual Moonbin estaba completamente distraído para nuevamente crear cadenas de luz que emergieron justo debajo de este para comenzar a atarlo. Sus muñecas, tobillos, y cuello fueron envueltos en grandes grilletes unidos a varias cadenas que lo inmovilizaron. Estas estaban tan tensadas, que para Moonbin se le era casi imposible moverse.

Dongmin al ver aquello, lo único que hizo fue acercarse a él con rapidez, y abrazarlo. Lo abrazó tan fuerte como pudo, dejando que sus lágrimas cayeran por sus mejillas y dejando salir varios sollozos al ver al contrario en tal estado.

—Perdóname Moonbin... perdóname por todo. —susurró colocando una de sus manos justo en la nuca de este para intentar calmar.

Moonbin parecía una bestia en ese momento. Gritando hacia el cielo con desesperación, agonía y dolor, y el que esté encadenado solo reforzaba la idea.