Moonbin tomó de la mano al contrario y besó sus nudillos de forma tierna. El corazón de Dongmin se conmovió ante aquello, sintiendo las mariposas en su estómago.
—Acabó. —dijo Moonbin—. Ahora todo a acabado.
—Sabes muy bien que aún falta algo por hacer Moonbin. No podré estar tranquilo hasta que eso esté resuelto. —Moonbin se limitó a hacer una pequeña mueca de tristeza. No quería que su pequeño se metiera en más problemas.
Puede ser que físicamente se encontrara bien, pero estaba muy consciente del daño emocional que debió de haber sufrido cuando volvió a encarar a su creador. Debió ser muy duro para él volver a ese lugar y recordar todas las atrocidades por las que pasó.
—Sí, está bien. Pero por el momento reunámonos con Lucifer. Él sabrá que hacer ahora. —pronunció bajo sujetando la mano del contrario para comenzar a descender de los cielos.
Dongmin asintió y posó su vista hacia abajo suyo viendo así como los últimos ángeles en pie estaban siendo encadenados por los demonios los cuales no hacían más que burlarse de ellos. El suelo estaba lleno de sangre, y grandes montículos de cuerpos habían por todas partes. Aquello había sido una masacre.
¿Pero se acabó por ahora no es así? Los ángeles perdieron, el infierno ganó, Lucifer ganó. El apocalipsis por el que había estado soñando durante tantos siglos al fin se hizo realidad. Debe sentirse complacido por aquello.
Dio un pequeño vistazo a Moonbin el cual estaba a su izquierda sin que este se diera cuenta. Podía ver la pequeña sonrisa que estaba impregnada en su rostro, al parecer ocultándola para no parecer tan cursi. Eso le pareció demasiado adorable a Dongmin el cual sonrió.
Tzuyu podía esperar. Tenía tiempo. Estaba con Lucifer, no creía que sea tan atrevida como para hacer presencia en medio de tantos demonios. Pero ahora tenía ventaja. Todos los ángeles se habían debilitado bastante por el crucifijo que portaban en el pecho así que aunque quiera pelear ahora no habría manera de que ganara.
Girando su cabeza con lentitud hacia atrás quiso darle una última vista hacia las puertas del reino de los cielos antes de que se cerrara por completo. Sin embargo lo que vio en medio de estas hizo que su corazón prácticamente se detuviera.
Las palabras se le cortaron al igual que la respiración y eso impidió que pudiera advertir a Moonbin sobre el ataque que se dirigía hacia él. Todo fue tan rápido, tan repentino que en menos de un segundos él fue embestido fuertemente por una gigantesca columna de hielo la cual nacía de la mano de aquella ángel.
La columna se extendió a mas no poder, aplastando prácticamente a Moonbin en el suelo una vez se estrelló. Un segundo después esta misma comenzó a retroceder con rapidez hasta desaparecer por completo de la vista.
El cuerpo de Dongmin se giró por completo con rapidez viendo con sus ojos temblorosos a la contraria la cual sonreía en grande.
—T-Tzuyu.
Moonbin se levantó con rapidez ignorando todo el enorme dolor que inundaba su cuerpo lleno de heridas abiertas las cuales no paraban de sangrar junto con su nariz. Sostenía su estómago con un brazo pues prácticamente podía sentir como sus órganos habían sido aplastados.
Dirigió su vista hacia arriba por encima de Dongmin paralizándose por un momento al ver a la contraria.
Un click sonó en su cabeza haciéndolo darse cuenta que debía de reaccionar ahora o sería muy tarde para su pequeño. Así que por más que el dolor le impidiera pensar claramente se elevó de un salto y comenzó a volar hacia arriba con la intención de proteger a Dongmin.
ESTÁS LEYENDO
𝙼𝚢 𝙰𝚗𝚐𝚎𝚕 & 𝙼𝚢 𝙳𝚎𝚖𝚘𝚗 ➋ || '𝔅𝔦𝔫𝔴𝔬𝔬'
FanfictionContinuando con la historia anterior, luego de que Dongmin tuviera que abandonar a Moonbin solo para quedar al borde de la muerte y sin poder hacer nada por Jinwoo, quien se encontraba muy herido, nos encontramos varios años después en donde ocurren...