El lunes por la mañana mi organismo me estaba reclamado todo lo que había comido el fin de semana con los chicos, me excedí por mucho y se notaba el atracón que me había dado.
Esta semana había planeado comenzar a digerir completamente una comida, pero con esto tendría que posponerlo una semana más.
Esta semana por fin me arriesgué a ir sola a la escuela, para mi mala suerte me había encontrado en el autobús con Shoto, sin embargo nos ignoramos mutuamente. Aún que internamente agradecía haber coincidido, así no me perdería camino a la escuela.
—Disculpe bella dama...—una voz alegre detrás mío tocaba mi hombro— oh creí que hablaba con una señorita, pero creo que las estrellas han cobrado vida.
—Buenos días para ti también Kaminari-kun.—reí por su piropo.
—No sabía que usabas el tren.
—Si, bueno es que antes me llevaban a la academia, pero creí que sería buen momento para intentar ir por mi cuenta.—explique mientras me aferraba al pasamanos.—Aún que soy muy torpe y me pierdo todo el tiempo.
—Que suerte que nos encontramos, yo me encargare de guiarla hasta su destino señorita.—hizo una reverencia bastante cómica.
Seguimos hablando de cosas triviales hasta que llegamos a la estación más cercana a la escuela.
—Creo que nunca te pregunte...—lo mire confundido—¿Por que elegiste la UA?
La pregunta me cayo como balde de agua fría, pare en seco nuestro caminar.
—En realidad yo no la elegí—me vio confundido— cuando mis papás aceptaron el trabajo en la agencia de Endevor, el me recomendó para entrar aquí.
—¡TUS PAPÁS TRABAJAN CON ENDEVOR!—gritó sorprendido.
—Si, pero yo no quería venir, no sabía nada en si de la academia o cualquier otra, decidieron por mi. —respondí de lo más natural.
No pudo contestar nada mas por que un escándalo frente a nosotros llamó nuestra atención. En la entrada de la academia había una manada de reporteros y periodistas.
Kaminari y yo nos volteamos a ver e intentamos abrirnos paso entre la barricada de reporteros, cuando por fin pudimos pasar vimos como una reportera entrevistaba a Midoriya, Uraraka e Iida. Me pareció gracioso ver al peliverde rojo por el nerviosismo.
—Bien, espero hayan descansado el fin de semana del ensayo de batalla del viernes.—hablo el profesor con el mismo tono aburrido de siempre.— Me tome la libertad de ver sus notas y evaluación.
Creo que todos sudamos frío en cuanto nos dimos cuenta del regaño que se venía, temia por que castigara a los que habíamos perdido. Sin embargo solo regaño a Bakugo y Midoriya por su comportamiento "infantil".
—En cuanto a Álvarez...—trague en seco—conoce tus límites, aún que nuestro lema sea Plus Ultra... y esto va para todos—nos vio amenazantes a todos.— Su salud no es juego, agradezcan que era un ejercicio de entrenamiento, en el campo de batalla el mínimo error marca la diferencia entre la vida y la muerte.
El salón de quedó en total silencio por la seriedad en las palabras del profesor.
—Ahora, sigamos con las cosas del salón, lamento decirles esto pero...—los murmullos se escuchaban esperando lo peor—Necesitamos elegir al delegado de la clase.
—¡UNA ACTIVIDAD NORMAL DE ESCUELA!—gritamos todos a la vez, mientras soltábamos el aire de nuestros pulmones.
Los gritos sobre que todos querían ser delegados de clase no se hicieron esperar, todos gritaban el por qué querían ser presidentes de la clase. Yo ni en sueños querría serlo.
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Tu me salvaste (BNHA)
Fiksi PenggemarEn una sociedad en donde ser un héroe es una de las profesiones mas importantes, todo niño con alguna peculiaridad o don tiene el sueño de ser el héroe numero 1. Citlali Álvarez con tan solo 15 años había luchado por ese mismo sueño en su natal Méx...