Capítulo 18 * Sorpresa

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Jimin estuvo callado todo el camino de regreso a la empresa, luego se despidieron de Nam-joon y se fueron al estacionamiento por el automóvil de Jungkook.

- ¿ Te comieron la lengua los ratones enano?- le preguntó Jungkook divertido por la actitud de Jimin.

- No molestes Jungkook, déjame tranquilo- le respondió Jimin mirando por la ventana.

- No te conocía esta faceta de enano amurrado- le dijo Jungkook riéndose.

Jimin ni siquiera contestó y se acurrucó más cerca de la ventana.

Jungkook se quedó callado, Jimin era demasiado obvio y obstinado, podía ver a través de él toda su molestia, bueno a él eso lo estaba entreteniendo bastante.

- Llegamos enano- le avisó Jungkook mientras se estacionaba en un centro comercial.

Jimin suspiró y bajo del automóvil.

- Vamos enano, sígueme- le dijo Jungkook y tomando su muñeca lo obligó a seguirlo.

- Puedes soltarme por favor- dijo Jimin como gatito engrifado.

- No enano, en una de esas te escapas- dijo Jungkook sin soltarlo.

Jimin hacía un puchero precioso, su boquita toda arrugadita y rosada, Jungkook apartó la vista, era segunda vez que se quedaba viendo la boca del enano, y eso lo ponía nervioso.

Subieron por las escaleras mecánicas al tercer piso del exclusivo mall, Jimin se sentía fuera de lugar, resaltaba como bombilla encendida en un cuarto oscuro, pero a Jungkook parecía no importarle y seguía asiéndolo firmemente de la muñeca.

Se detuvieron en un lugar que no tenía ningún letrero y Jungkook entró con él, una chica muy hermosa les dio la bienvenida.

- Tengo una cita con Orlando- dijo Jungkook soltando la muñeca de Jimin.

- Pasé los está esperando- Jimin no sabía dónde estaban y miraba todo confundido.

- Vamos enano- le dijo Jungkook sonriendo.

Jimin lo siguió por un pasillo elegantemente adornado con fotografías de modelos o gente famosa.

Una puerta se abrió de las cuatro que habían y un hombre apareció y era evidentemente gay.

- ¡Jungkook!, me tenías abandonado darling- y besó a Jungkook en ambas mejillas luego miró a Jimin-¿ y esta lindura?.

Jimin sonrió y le hizo una reverencia.

- Es mi asistente personal y amigo también.

- ¿ Están cambiando tus gustos darling?- preguntó risueño el hombre.

- A-m-i-g-o, no te confundas Orlando- dijo Jungkook sonriendo.

- Eso dices ahora- le dijo Orlando cerrándole un ojo a Jimin que se puso como tetera hirviendo.

Pero seguía sin entender que hacían allí.

- Pasen, pueden dejar sus chaquetas ahí- señaló un lindo perchero de madera labrada.

Jimin miró el lugar y era evidentemente una peluquería por el espejo y las cosas sobre el mesón.

- Toma asiento ternurita- le dijo Orlando a Jimin que miró a Jungkook pidiendo una explicación.

-¿ Darling no te dijo nada ternurita?- preguntó Orlando.

Jungkook sonrió.

- Era una sorpresa...y parece que funcionó- dijo Jungkook sonriéndole a Jimin.

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