Una fuerte discusión lo sacó de su profundo sueño, sonrió divertido, de verdad se había quedado dormido en el sofá.
Dos hombres discutían acaloradamente frente a la recepcionista.
- Te lo dije, estoy cansado de tener que buscarte un asistente todas las semanas- gritó un hombre increíblemente atractivo, moreno y de ojos rasgados.
-¡ Mierda no es mi culpa si todas esas imbéciles terminan enamorándose de mí!- gritó el otro hombre también atractivo, mejor dicho endemoniadamente apuesto, de cabello negro azabache y cuerpo de ensueño.
-¿ No es tu culpa?, ¡ porque mierda te metes con ellas entonces!,¿ acaso no puedes controlarte?- gritó nuevamente el de ojos rasgados.
-¡ Ellas son las ofrecidas!- gritó el de pelo azabache furioso.
- ¡ Pues te quedas sin asistente y punto!- gritó nuevamente el de ojos rasgados.
-No hablas en serio ,¿ verdad?, preguntó el azabache.
- ¡Muy en serio!- dijo el de ojos rasgados.
Ambos hombres se quedaron mirando furiosos.
Jimin mientras tanto se entretenía mirando toda la escena, casi se sentía viendo una película en el cine, además no podía decidir cuál de los dos era más caliente.
De repente el de ojos rasgados reparó en Jimin.
-¿ Quién es él?- le preguntó a la recepcionista que por primera vez se deshacía en sonrisas, zorra pensó Jimin.
- Esta por un puesto de trabajo para el área de aseo- le respondió la recepcionista batiendo sus pestañas, ¿ qué mierda, tendría problemas de visión?, pensó Jimin divertido.
El de ojos rasgados caminó hacia Jimin y se detuvo frente a él.
- Tú- dijo el hombre.
Jimin miró hacia ambos lados pero no había nadie más que él.
-¿Yo?- dijo sonriendo como tonto y sin dejar de mirarlo.
El hombre sonrió al ver su actitud, y Jimin cayó rendido a sus pies, es que era demasiado para su pobre corazoncito.
- ¿ Te interesaría un nuevo trabajo?- preguntó sin dejar de mirarlo.
- Estoy aquí por eso- respondió sonriendo y sonriendo.
- Yo hablo de un nuevo empleo, no por el que viniste, ¿ te interesa?- preguntó el de ojos rasgados.
Jimin tenía debilidad por los chicos guapos, pero tonto no era.
- Depende...- respondió sonriendo.
El hombre lo observó y se puso a reír.
- Ven vamos a mi oficina y te diré de qué se trata, tú decides si lo tomas o lo dejas. - le dijo dirigiéndose al ascensor y Jimin corrió tras él para alcanzarlo.
- Jungkook te espero en mi oficina en cinco minutos, ni uno más- le dijo el de ojos rasgados al azabache que estaba mirando su celular, ni siquiera respondió cuando las puertas del ascensor se cerraron.
- Toma asiento, ¿ un vaso de agua?- ofrecio el apuesto espécimen.
Jimin no dejaba de mirarlo con ojos degollados.
- ¡ Naah!, estoy bien,- dijo Jimin sonriéndole.
El hombre sonrió.
- Bueno me dijo la recepcionista que viniste por un empleo en el área de aseo.
- Sí, exactamente- respondió Jimin.
-¿ Te gustaría trabajar como asistente?, la paga sería bastante mejor- le dijo el hombre sonriendo- ¡ Ah!, por cierto me llamo Kim Nam-joon, mánager de profesión.
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Happy
أدب الهواةPark Jimin tiene una manera peculiar de ver la vida, siempre con una sonrisa sin importar las circunstancias, no tiene nada más que a su padre y ambos se aman con todo su corazón. Park Jimin es homosexual y no tiene problemas con ello, su único p...
