Capítulo 46 * Felicidad

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Cinco años habían pasado,  muchas cosas habían cambiado...pero el amor entre Jungkook y Jimin aún seguía,  se amaban aún más que antes.

- ¡ Apúrate enano!, vamos a llegar tarde a tu propia exposición- lo apuró Jungkook terminando de ponerse el pantalón de su traje.

- ¡ Ya salgo!- le gritó Jimin desde el baño  apareciendo luego con su pelo mojado y una toalla alrededor de sus caderas.

Jungkook dejó de hacer lo que estaba haciendo para mirarlo fijamente.

- ¡ Ni se te ocurra!, tú mismo lo dijiste, estamos atrasados- le dijo Jimin al ver las intenciones en los ojos cargados de deseo de Jungkook.

Jungkook se acercó lentamente y lo atrapó por la cintura antes de que Jimin se le escapara.

- ¿ Porqué me provocas entonces enano?, ¿ ah?- dijo sonriendo pervertido Jungkook mientras le deslizaba la toalla hasta que cayó al piso.

- ¿ Yo?,¿ provocándote?- preguntó Jimin  sonriéndole.

- Sí,  tu me provocas enano, unos minutos que lleguemos tarde no importa- le dijo Jungkook sonriendo  acariciando suavemente los glúteos de Jimin.

Jimin se largó a reír y se dejó besar por Jungkook devolviéndole con ganas el beso,  porque eso tampoco había cambiado,  se seguían deseando y Jimin seguía amando besarlo hasta perder la conciencia.

Porsupuesto que salieron corriendo de su departamento,  porque obviamente se les hizo tarde, pero no les importaba,  se sonreían felices mientras iban en el automóvil de Jungkook.

Ellos ahora vivían juntos en el departamento de Jungkook hacía ya tres años,  sus padres los alentaron a hacerlo,  ellos seguirían viviendo en la casita que Jimin había comprado, los padres de ambos se habían transformado en amigos inseparables,  así que convencieron a Jimin para que hiciera su propia vida junto a Jungkook.

Jungkook ahora tenía su propia productora,  seguía componiendo y buscando nuevos talentos,  Nam-joon finalmente se fue a trabajar con él y ahora oficiaba de mánager de los nuevos talentos.

Jimin por su parte se hizo socio de Jin y trabajaban juntos como fotógrafos,  pero Jimin trabajaba también tomando fotos de lo que más amaba,  la sonrisa de la gente.

Ahora era conocido como el fotógrafo de las sonrisas,  y está era su primera exposición abierta al público.

Todos las personas importantes en su vida estaban allí para apoyarlo, Hobi,  Nam-joon,  Momo,  Jin y porsupuesto sus padres.

Su relación con Jungkook ya no era tema, y aunque lo fuera a ellos no les importaba,  era su vida y nadie les diría como vivirla.

Jimin dio un pequeño discurso agradeciendo a todos los presentes y a los periodistas que habían aceptado su invitación, cuando terminó con el aplauso de los presentes los invitó a disfrutar de la exposición.

- Lo hiciste increíble enano- le susurró Jungkook dándole un cariñoso abrazo.

- Gracias amor- le dijo Jimin sonriéndole con ternura.

- Bueno, bueno,  par de tortolitos,  dejen los arrumacos y tú Jungkook déjanos felicitar a Jimin- dijo divertido Nam-joon mirándolos,  esos dos no podían estar ni dos segundos separados.

Nam-joon lo abrazó y le entregó un ramo de rosas.

- ¡ Están hermosas!- le agradeció Jimin a Nam-joon.

- No tanto como tú Jimin- le dijo Nam-joon.

Jungkook carraspeo tras Jimin.

- Tiene dueño Nam-joon,  así que no seas tan efusivo- le dijo Jungkook atrayendo a Jimin a su lado.

- Eso no ha cambiado,  sigues igual de posesivo- le dijo Nam-joon y se largó a reír.

Jimin sólo miró a Jungkook y le sonrió como si no hubiera nada más importante que él dentro de su universo.

- Ustedes no tienen remedio,  mejor voy a ver las fotografías- dijo Nam-joon al verlos perdidos nuevamente en su burbuja.

Jin, Momo, Hobi y sus padres también lo felicitaron y luego se dispersaron para ver la exposición.

- Ven, vamos a recorrer la galería- le dijo Jungkook tomándolo de la mano.

Las fotos eran un tributo a las personas felices,  había trabajadores comunes y corrientes,  gente de la calle, desconocidos,  niños,  enfermos,  presos, todos retratados magistralmente por el lente de Jimin mostrando sus hermosas sonrisas.

Jungkook se detuvo en una y la emoción lo embargó,  Jimin le rodeó la cintura.

- Esa es tu sonrisa amor,  mi fotografía más amada- le habló dulcemente Jimin.

- Lo sé amor,  y también se el instante en que me la tomaste- le dijo Jungkook.

Era una foto donde sólo se mostraba la enorme sonrisa de Jungkook en blanco y negro,  pero aún así no se podía negar  la felicidad y emoción que había en ella.

Jimin le sonrió.

- Fue cuando me pediste ser tu esposo- recordó Jimin,  si porque ahora eran un matrimonio,  se habían casado en las Vegas hacía un año.

Jungkook sacó su celular y buscó una fotografía para mostrársela a Jimin.

- Esta fotografía debería estar entre las más bellas dentro de tú exposición- le dijo Jungkook.

Era una fotografía de Jimin  con sus ojitos brillando  en medias lunas y llenos de lágrimas pero con una sonrisa  tan dulce y llena de amor.

- Fue el día de nuestra boda,  cuando te preguntaron si aceptababas ser mi esposo- le recordó Jungkook.

- ¿ Te acuerdas cuál fue mi respuesta?- le dijo Jimin emocionado y a punto de llorar.

- "Acepto,  aquí y en todas las vidas que me toqué vivir, acepto"- le respondió Jungkook recordando las palabras exactas que su enano le había dicho- te amo enano,  te amo mucho.

- Y yo a tí , mi único y verdadero amor- le dijo Jimin sonriéndole con las lágrimas rodando por sus mejillas.

Sin importarles ser vistos se unieron en un dulce beso para sellar nuevamente sus votos de amor.

♡♡♡

Fin

Fin

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